MADRID. Nueve decretos ley y reformas legales de distinto calado han sido aprobados entre 2012 y 2013 con el exclusivo objetivo de resolver el problema del déficit tarifario del sector eléctrico, objetivo que ha quedado en agua de borrajas tras una enmienda del PP en el Senado que impide la aplicación del crédito extraordinario de 2.200 millones de euros destinado a sufragar el déficit de tarifa, así como los 900 millones comprometidos para las extrapeninsulares y, supuestamente, los 500 millones del céntimo verde.
Tras un carrusel de declaraciones contradictorias, medias verdades y mentiras en toda regla, del ministro del ramo, Soria y del secretario de Estado de Energía, Nadal, el objetivo señalado por Ley de que el déficit tarifario en 2013 fuera cero, pasa a mejor vida con lo que el déficit de tarifa acumulado superará, al cierre del 2013, la enorme cifra de 30.500 millones de euros, aumentando en más de un 13% la cifra consignada a finales de 2012.
La historia del déficit tarifario del sector eléctrico, iniciada por el gobierno de Aznar-Rato-Piqué y continuada por los sucesivos gobiernos, es la historia de intereses electorales y sectoriales, en donde se cruzan decisiones en ocasiones "legítimas", en ocasiones espurias y en ocasiones bastardas y que hoy representa una seria amenaza para el riesgo país y es uno de los factores críticos que afectan a la línea de flotación de la devastada inseguridad jurídica del sector eléctrico español, hasta el extremo de convertirse en un problema estructural crónico.
El problema no se quiere o no se puede resolver y, en esta ocasión, se trata de diluirlo en ese mantra que es Bruselas y su exigencia de controlar el déficit público, aunque ese déficit permanezca disfrazado de otra cosa y sea perjudicial, según los analistas, para la credibilidad de España y para la confianza de los inversores en las utilities.
En esta ocasión, el problema viene trufado de supuestos enfrentamiento entre dos ministros claves -Hacienda e Industria- que parecen estar en desacuerdo sobre la financiación en un momento tan crucial. Este supuesto y patrio enfrentamiento hay quien lo ha reducido a una vendetta de barrio en la cumbre que viene de lejos y en donde se mezclan tres apellidos: Montoro, Soria y Abengoa.
Puede que empresas y gobierno busquen a partir de ahora soluciones, unas soluciones que lo único que conseguirán es seguir incorporando a nuestras vidas el problema y hacer cada día más urgente nuevas subidas de tarifas que mientras algunos calculan en el 10 % otros evalúan en más del 18%, algo que se está utilizando como moneda de cambio para conseguir que el Estado, que no paga, que al menos, avale.
Todos se sienten maltratados por el gobierno y ni consumidores, ni eléctricas convencionales, ni empresas de energías renovables, traslucen un mínimo de positivismo sobre la política energética del gobierno, hasta el extremo de que observadores y especialistas empiezan a detectar movimientos en las empresas "españolas" relacionados con la internacionalización que indican que alguna sociedad como la italiana Endesa pueda estar girando buena parte de su estrategia hacia Latinoamérica, dejando a España como mercado secundario.
Y mientras todo ello sucede a pleno día, vuelve a cobrar toda su vigencia una lista que recuerda que el sector eléctrico es un empleador intensivo de altos políticos.
• Endesa tiene o ha tenido en nómina a José Maria Aznar como asesor externo, a Elena Salgado como consejera de Chilectra, a Miquel Roca como consejero externo independiente, a Pedro Solbes como consejero no ejecutivo de Enel, y a Luis de Guindos, Rodolfo Martín Villa y al exministro de Industria, Joan Majó.
• Iberdrola paga o ha pagado a Ángel Acebes, exministro, y a Ramón de Miguel, exsecretario de Estado de Política Exterior y Asuntos Europeos, como responsable del Area Internacional.
• Gas Natural paga o ha pagado a Felipe González como consejero independiente y a Narcis Serra como consejero.
• Red Electrica de España paga o ha pagado a José Folgado, exsecretario de Estado de Energía y a los ex ministros Luis Atienza, Miguel Boyer y Ángeles Amador.
• Abengoa paga o ha pagado a Ricardo Martínez, exsecretario de Estado de Presupuestos; a Alberto Aza, exjefe de la Casa del Rey y a José Borrell, exministro y expresidente del Parlamento Europeo.
• Acciona tiene o ha tenido en nómina al exministro Pio Cabanillas, a Javier Solana, exAlto Representante de Política Exterior de la UE y a Carmen Becerril, exsecretaria de Estado de Energía.
• Hidrocantábrico tiene o ha tenido como consejeros al exministro de Trabajo, Luis Martínez Noval y a la exministra de Asuntos Exteriores, Ana Palacio.
Actualmente no hay comentarios para esta noticia.
Si quieres dejarnos un comentario rellena el siguiente formulario con tu nombre, tu dirección de correo electrónico y tu comentario.
Tu email nunca será publicado o compartido. Los campos con * son obligatorios. Los comentarios deben ser aprobados por el administrador antes de ser publicados.