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VALENCIA. Durante décadas España ha sufrido 'fuga de cerebros' hacia el exterior -principalmente hacia los EE.UU.- que ha hecho disminuir el potencial nacional de forma progresiva y ha impedido el avance hacia una plena economía del conocimiento.

En noviembre de 2004 se anunció por parte del Ministerio de Educación y Ciencia la realización de un censo de científicos españoles en el extranjero para saber la cifra exacta, estrechar la vinculación y animar al colectivo a regresar a España.

La movilidad internacional es un factor crítico en el crecimiento económico y social y sirve para asegurar una fuente adecuada de recursos humanos en ciencia y tecnología altamente experta para un desarrollo económico y social de la nación o la región en el ámbito global. Un número de países de la U.E. ha tomado un papel proactivo al decretar una legislación que facilite la entrada extranjera de investigadores y así suavizar las cargas administrativas para las transferencias formales de permisos de trabajo.

Por ejemplo, el sistema de permisos británico ha respondido con éxito para traer trabajadores de la salud y de los servicios médicos. Alemania, a principios del 2003, introdujo las denominadas tarjetas green para fomentar el reclutamiento de investigadores, Dinamarca introdujo las llamadas personas expertas como parte de la iniciativa "tarjeta de trabajo" en Julio del 2002.

A diferencia de los otros Estados, España está produciendo personal investigador que se marcha fuera para seguir su investigación debido a la carencia de las oportunidades de la investigación en nuestro propio entorno y más generalmente por la escasa relación entre la oferta y la demanda laboral científica.

Para tratar de dar respuesta al primer conjunto de prioridades y con el fin de acercarse a los niveles comunitarios, el anterior Plan Estratégico aprobado por el Gobierno de Zapatero fijaba para los años en los que estuviera vigente el Plan Nacional de I+D+I (2004-2007), una proporción de cinco investigadores por cada mil ciudadanos en activo, frente al 4,4 en Noviembre de 2004.

Además, pretendía superar el 29 por ciento de estos recursos humanos altamente cualificados en el ámbito empresarial; aumentar en más de 3.000 las nuevas plazas y contratos en el sistema público y ampliar en más de 3.500 los nuevos contratos de tecnólogos y doctores en el sector privado. Tras esos números se esconden las claves para comprender la asfixia profesional que sufre este enorme potencial humano a la hora de acceder al mundo laboral. Prefiero no exponer los ratios a fecha de hoy, Febrero de 2013, porque como dice el Profesor Santiago Grisolía. " No quiero llorar".

Muchos años de formación y preparación no labran necesariamente un futuro profesional esperanzador. Cuando estos investigadores españoles pretenden dar el salto a la empresa se encuentran con muy pocas oportunidades de encontrar un puesto que se ajuste a su perfil o a su campo de investigación.

En una insuficiente financiación, tanto pública como privada, encontramos la raíz del problema, así como a una falta de respuesta del entorno empresarial. Tantas trabas para desarrollar sus líneas de trabajo desalientan a muchos investigadores, que, o bien abandonan su prometedora carrera investigadora o bien deciden probar suerte en el extranjero.

Para evitar la fuga de cerebros y proyectar la carrera del investigador español, el Plan contemplaba una serie de fórmulas como el Estatuto del Becario, que les reconocería el acceso a la Seguridad Social, aunque en el tramo inferior de las cotizaciones; el mantenimiento de las becas predoctorales, de los tecnólogos y las becas en el extranjero; la creación de contratos con los nuevos programas para jóvenes científicos (Programa Juan de la Cierva, Programa Severo Ochoa y Programa Torres Quevedo); y el incremento de la Oferta de Empleo Público.

El compromiso fue adquirido por todos los grupos parlamentarios del Congreso el día 29 de Septiembre de 2004 y fijaba como fecha límite para la inclusión en el sistema de la Seguridad Social el día 1 de Enero de 2005.

La Federación de Jóvenes Investigadores-Precarios (FJI) ya mostró sus recelos ante la aprobación del Estatuto del Becario, ya que consideraba que este documento no solucionaría los problemas, porque no todos se beneficiarían de los nuevos derechos y porque tan sólo regulaba algunos aspectos como la inclusión parcial en la Seguridad Social, con la cotización mínima interprofesional y sin derecho a desempleo.

Según el Instituto Nacional de Estadística ( INE), hay unos 20.000 jóvenes investigadores en España , responsables del 50 por ciento de los resultados científicos del país , el trato que reciben es como meros estudiantes ( aunque la mayoría son doctores ).

Si la indefinición en la que viven los investigadores emigrados a otros grupos extranjeros no se solventa y la precariedad de los jóvenes investigadores no se sustituye por contratos de trabajo estables , difícilmente podemos transformar un sistema sesgado que seguirá inevitablemente viendo en el exterior las únicas salidas a su futuro profesional.

La respuesta oficial hoy en el 2013 es "La fuga de cerebros es un topicazo", decía el miércoles el diputado del PP Alejandro Fernández ante la comparecencia en la Comisión de I+D del Congreso de los Diputados. Poco antes, el diputado de UPyD Carlos Martínez Gorriarán había acusado al Gobierno de provocar, precisamente la fuga masiva de cerebros fuera de España.

La única que sí esgrimió cifras fue la secretaria de Estado de I+D Carmen Vela quien afirmó que un 21% de los científicos españoles se fueron a vivir fuera de España en algún momento entre 2000 y 2009, pero que una cifra similar, el 20,7%, fue cubierta por extranjeros que vinieron a trabajar aquí. Con esas cifras argumentó, que más que fuga de cerebros lo que hay es movilidad. Y hace un año, unas palabras del ministro de Cultura, José Ignacio Wert, negando la fuga de cerebros, también encendieron las redes sociales.

Lo cierto es que más allá de los datos del INE, que alcanzan hasta 2009, el primer año de los recortes y el momento justo en el que los investigadores españoles contaban con más recursos a su disposición de la historia, no es sencillo obtener datos que permitan evaluar con información precisa la magnitud de la presunta fuga. El Ministerio de Economía y Competitividad, del que depende la gestión de la I+D, no cuenta con un registro de salidas y entradas de investigadores, y tampoco existe un registro similar en Exteriores.

Además, dada la libertad de movimientos dentro de la UE, el presunto destino de la mayor parte de los cerebros fugados, resulta aún más complicado seguir el trasiego de los científicos. Lo que sí que es cierto es que más del 85% de los Centros Tecnológicos españoles han tenido que acometer EREs dentro de sus estructuras ocasionados los mismos por la asfixia de tesorería provocada por las deudas de los Gobiernos Central y Autonómico.

La crisis en nuestro país ha empujado a un total de 390.206 españoles a irse al extranjero en busca de una oportunidad laboral que España, de momento, parece no poder ofrecer. Así se desprende de los últimos datos ofrecidos por el Censo Electoral de Españoles Residentes en el Extranjero de Adecco. Y es que la realidad española parece no dejar otra alternativa: 5.965.400 desempleados al cierre de 2012. España tiene ya una tasa de desempleo por encima del 26% mientras que la del paro juvenil se sitúa en el 55,12%.

Por ello, cada vez son más los residentes que prefieren irse fuera. De hecho, uno de cada cuatro demandantes de empleo en una empresa de trabajo temporal que es Adecco solicita un puesto de trabajo en el extranjero. Tal es la desesperación por conseguir un contrato que, en el último año, 82.306 trabajadores españoles han abandonado nuestro país para buscar una oportunidad laboral fuera de nuestras fronteras, lo que representa un incremento del 5,5% con respecto al año anterior. En este sentido, hay que recordar que a inicios del 2008, justo antes de que comenzase la crisis económica, solo 1.201.433 españoles vivían en el extranjero

La crisis económica sigue provocando estragos entre el talento patrio. Científicos, ingenieros, licenciados y ahora... Yola Berrocal. La neumática actriz y cantante, ganadora de 'Hotel Glam' y 'El reencuentro', acudió este pasado viernes a ese programa tan enriquecedor de cultura patria como es 'Sálvame de Luxe' junto a su novio, Carlos Casaña, para anunciar que se marcha de España a hacer las Américas porque aquí no se le reconoce la sabiduría que porta, no se bien, si en su cuerpo o en sus neuronas.

Cualquier país avanzado habría rechazado de pleno declaraciones-insulto a la inteligencia de este tipo, mientras que nosotros la hacemos trending topic porque nos hace mucha gracia semejantes ocurrencias. ¡Así nos luce el pelo internacionalmente!

En concreto dijo: "Aquí en España se nota muchísimo la crisis", aseguró la ciudadrealeña de 42 años. "Mi novio y yo somos un claro ejemplo de la fuga de cerebos que está viviendo España en estos momentos", confesó sin pudor alguno.

Sólo hace falta, como diría Galbraith, "pensar un poco en nuestro porvenir, porque de otra forma nunca lo tendremos". Porvenir a través de un aumento de la capacidad de riesgo del sector productivo empresarial, incentivación de proyectos conjuntos, contratación de gestores de I+D+I, una retribución justa en función del valor realmente aportado, una estabilidad laboral en los sectores público y privado, una distribución adecuada de los fondos para investigación, una adecuada estabilidad de apoyo a proyectos y grupos de investigación, una disminución de trabas burocráticas a todo lo que envuelve a este colectivo.

En suma, voluntades, traducidas a proyectos y éstos a realidades que beneficien a toda la sociedad española. De la cultura televisiva permítanme que no me extienda porque como en otras cosas tenemos los que nos merecemos.

Son las 23:45 de un domingo, después de repasar la agenda de la semana que mañana comienza, pienso en todas las dificultades que tengo que afrontar durante la misma, pues tras más de 25 años dedicado a la I+D+I jamás se me habría ocurrido el momento profesional que estamos pasando todos los que nos dedicamos a ella.

Escribo este artículo para en teoría relajarme, aunque es difícil por su temática, oigo la radio y comentan que Luis Bárcenas acaba de llegar de pasar el fin de semana en Canadá esquiando y que han estado haciendo lo mismo pero en Baqueira Beret la Princesa Cristina e Iñaki Urdangarín. Como diría Forges, solo me queda decir...¡país!