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VALENCIA. Se acaba de presentar el último estudio sobre la inversión en I+D+I en España, presentado por EAE Business School. En dicho informe se constata que España llega al 1,3%, un porcentaje que equivale a 13.000 millones de euros. De 100 empresas españolas, sólo 13 son innovadoras. Un 20% menos que el año anterior. Nuestro país pagó 286 euros por habitante en I+D+I en 2012, una cifra que implica una caída del 7% respecto a 2011. En Alemania: 636,4 euros.

Las principales CC AA inversoras en I+D+I son, según el estudio, Madrid, Cataluña, País Vasco y Andalucía (con 3.400, 2.900, 1.500 y 1.400 millones de euros respectivamente). Entre las cuatro representan el 72,8% del gasto total de estas actividades en España.

El estudio destaca, además, la relación internacionalización-innovación. El informe muestra que las ventas en el extranjero de las empresas españolas se sustenta «mayoritariamente» en los nuevos productos innovadores y que la partida de exportaciones es la que ha permitido obtener beneficios durante los últimos años.

Según otro estudio denominado "Encuesta sobre la Eficiencia de las Ayudas Públicas a las actividades de I+D+I", de la CEOE, arroja que el 68 % de las empresas consultadas presupuesta fondos para innovar en sus productos o invertir en tecnología, un porcentaje que en 2008 era del 75 %.
 Este descenso limita las posibilidades de mejora de la competitividad empresarial.

La inversión en Investigación y Desarrollo (I+D) ha caído en la Comunitat Valenciana en más de 105 millones de euros en los últimos cinco años, situándose en 2012 en 1.008 millones de euros anuales, según el Instituto Nacional de Estadística. 


La disminución de un 9,5 % del gasto en el sistema de I+D valenciano durante este quinquenio de crisis económica ha hecho que Andalucía, cuyo PIB por habitante es el penúltimo de las 17 autonomías, supere a la Comunitat Valenciana en esfuerzo en actividades de I+D.

Como dice el profesor Virginio Gallardo, "nunca hemos oído hablar tanto de innovación, en tantos ámbitos, nunca se ha percibido como tan necesaria y nunca se han contado tantas bienintencionadas mentiras".

Efectivamente, la investigación, el desarrollo y la innovación son la base del bienestar de un territorio y de su riqueza. Ya sea la innovación empresarial, la social o la que afecta a las instituciones públicas; todos desearíamos vivir en una comunidad autónoma donde sus supuestos líderes actuaran impulsando la I+D y la innovación y no solo hablaran de ella.

Algunos pensarán que hemos avanzado, que las palabras y las ideas cambian el mundo, mueven emociones y los humanos necesitamos ideas que nos dirijan para la acción. Por desgracia, la realidad es que al día siguiente del discurso todo continúa igual y ello puede crear decepción y emociones negativas. Esto es debido a que tener un discurso genérico sobre la necesidad de la I+D+I, como principal prioridad estratégica puede ser relativamente fácil, pero materializar esa idea no lo es.

Hay muchas formas de suicidio social y especialmente empresarial, el más ingenuo es dejar la I+D+I en un discurso vacío. La falta de cultura y experiencia en temas de innovación, transformación y gestión del cambio que sufren los profesionales con más poder en las administraciones y en las organizaciones valencianas comienza a causar problemas de competitividad, es urgente crear sistemas de aprendizaje donde estos políticos y directivos, más allá de saber lo importante que es la I+D y la innovación, sepan cómo actuar e ir más allá de los discursos.