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VALELNCIA. La famosa Bacanal de la ópera Sansón y Dalila (Saint-Saëns), la obertura Romeo y Julieta (Tchaikovski) y Sheherezade (Rimsky-Korsakov) son las obras escogidas para el próximo concierto de la Orquesta Metropolitana de Madrid y su directora titular Silvia Sanz. Tendrá lugar el sábado 9 de febrero a las 22.30 en la Sala Sinfónica del Auditorio Nacional y estará dedicado a “grandes historias de amor, traición, astucia y seducción” contadas en música y que tienen su origen en relatos literarios. Se trata del tercer concierto de la temporada organizada por el Grupo Concertante Talía después del gran éxito de público obtenido en los dos anteriores: Réquiem de Mozart el pasado 20 de octubre y Noche de soul, el 27 de diciembre, para el que se agotaron las más de 2.300 localidades de la sala.

La suite sinfónica Scheherezade op. 35 (1888), del compositor ruso Nikolái Rimsky-Korsakov es el plato fuerte de este concierto y tiene su fuente en la literatura árabe. Sheherezade es el nombre del personaje que narra los cuentos de Las mil y una noches. El sultán persa Shahryar desposaba una virgen cada noche y al día siguiente la decapitaba en venganza por la traición de su primera esposa. Cuando le llegó el turno a Sheherezade, la astuta joven inició un relato que despertó tanto interés en el sultán que quiso escuchar más, y así hasta que transcurrieron mil y una noches. Sheherezade salvó su vida y los cuentos transformaron el alma del sultán. La obra, repleta de color y exotismo, es una demostración de las grandes dotes de orquestación del músico ruso y está dividida en cuatro movimientos. No obstante, Rimsky Korsakov prefería no hablar de temas vinculados a imágenes concretas: “Estos motivos pasan –decía- y se extienden por toda la obra, uniéndose sucesivamente y entrelazándose. Aparecen cada vez bajo diferente luz, mostrando distintas características y expresando nuevas situaciones y corresponden cada vez a imágenes y cuadros diferentes”.

La primera parte del programa, no obstante, estará dedicada a las historias de Sansón y Dalila y Romeo y Julieta: la primera, marcada por la seducción y la traición; y la segunda, por un amor indestructible. De la famosa ópera de Saint-Saëns se ofrecerá la Bacanal, un fragmento orquestal danzado que se interpreta a menudo en conciertos y que nos describe una fiesta pagana en honor del falso dios Dagón de los filisteos. El libreto se basa en el episodio del Antiguo Testamento que narra cómo Dalila seduce a Sansón, dotado de una fuerza excepcional, para descubrir su punto débil (su cabello), destruir su poder y entregarlo a los filisteos. Saint-Saëns comenzó a trabajar en la obra en 1867 y la concibió como un oratorio. El libretista le convenció de que la historia tenía la suficiente fuerza dramática para hacer una ópera. El proyecto tardó en fraguarse: primero, por las reticencias del público francés a la utilización de un tema bíblico en la ópera y, después, porque no encontró teatro en Francia que la produjera. Su estreno tuvo lugar en Weimar en 1877 gracias al apoyo del compositor Franz Liszt. La primera representación en Francia se produjo trece años más tarde (1890) y, desde entonces hasta el día de hoy, se mantiene en el repertorio operístico.

Tchaikovski, al igual que hicieron Berlioz o Prokofiev, parte de la obra teatral de Shakespeare que narra la trágica historia de los amantes de Verona para componer la Obertura-Fantasía Romeo y Julieta. Escribio la música en 1869, pero la versión que conocemos hoy en día data de 1880. A lo largo de la obra se escuchan distintos temas musicales relacionados con cada uno de los protagonistas, Romeo y Julieta, así como los que hacen referencia a la rivalidad entre las familias de ambos, los Capuleto y los Montesco, o al destino.

Silvia Sanz, batuta de la nueva Orquesta Metropolitana de Madrid, ha dirigido más de 100 conciertos en el Auditorio Nacional de Música de Madrid. Estudió dirección de orquesta con Enrique García Asensio y posteriormente con otros maestros como Helmuth Rilling y Aldo Cecatto. Durante la temporada 1993-1994 fue directora asistente en la Orquesta y Coro Nacionales de España. A lo largo de once años, ha sido directora titular de la Fundación Orquesta Sinfónica Chamartín, con la que ha mantenido una temporada estable de conciertos en el Auditorio Nacional desde el año 2000. También ha sido invitada por numerosas orquestas españolas y extranjeras y ha llevado la música española por todos los rincones del mundo, ya sea por Europa (Francia, Bélgica, República Checa, Eslovaquia, Lisboa…) o países como Corea del Sur o Turquía. Participó en el programa de formación y difusión de la música Los sonidos de la Tierra en Paraguay y en una reciente gira por Centroamérica ha recibido el reconocimiento de la Asamblea Legislativa de El Salvador como ejemplo de la participación de la mujer en la erradicación de desigualdades. A su experiencia en la dirección orquestal, se une su iniciativa como promotora y creadora de orquestas infantiles y juveniles.