VALENCIA. Uno de los momentos más difíciles de montar un proyecto con tus recursos es precisamente, saber de cuantos recursos dispones y cuando hablo de recursos me refiero sobre todo a los recursos económicos. ¿Cuánto tiempo eres capaz de seguir adelante con tu propio dinero y con las técnicas de guerrilla o 'emprendizaje extremo' que puedas conocer?
Es en este instante cuando llega un momento en la vida de todo emprendedor que la aventura se bifurca en dos caminos y no sabrás realmente cual es el correcto. Incluso quizás, una vez escogido uno de los dos caminos, volver atrás para escoger el otro sea demasiado complicado. Hablo del camino de la búsqueda de inversión o del camino de centrarte en el producto y que tus ventas sean "tu propio inversor".
A veces incluso parece que hablar de inversión entre emprendedores sea un tema tabú, pero la realidad es que buscar inversión supone en muchos casos perder infinidad de tiempo. Todos coincidimos que en España, cerrar una ronda inversión cuesta entre 4 y 6 meses (si mi proyecto o producto tiene 10 meses de vida y ahora tengo que dedicarle 6 a buscar inversión, ¿no puedo quedarme finalmente sin producto?).
Por otro lado, hay que valorar también en qué momento buscar esa inversión y cuanta. Desde nuestra mi experiencia, creo que conseguir en España una inversión de 25.000 euros es relativamente fácil, pero la cosa se complica mucho cuando hablamos de 200.000. Además, quizá sea porque he vivido el negocio familiar muy cerca (mi madre y sus hermanas están en el Mercado Central desde los trece años), pero 25.000 euros te solucionan o aportan para todo lo que tus alas, tu creatividad, tu sueño, la ilusión por arrancar quieres hacer?. Ampliar equipo, comenzar el marketing, la tecnología,...
Si pasamos al camino del producto y de ser "tu propio inversor" con tus ventas (está claro que esto será mucho más difícil que el camino anterior), la cosa cambia. Para llegar a esto primero debes tener un buen producto y a veces da la sensación que para tener un buen producto necesitas mucho dinero, y por lo tanto inversión. Sobre todo cuando el producto requiere tecnología y la búsqueda de un CTO (como sucedió en SchoolMars), se convierte en un camino de espinas.
Justo en el principio de estos dos caminos es donde nos encontrábamos con SchoolMars hace no mucho. He de reconocer que paseamos demasiado por el camino de la inversión (y quizás demasiado pronto), pero que llegó un momento en que decidimos salir de éste, y centrarnos en el camino del producto al cien por cien. Aunque éramos conscientes de que necesitábamos algo de ayuda, sobre todo en la parte tecnológica para seguir avanzando.
Mientras estábamos por el camino de la inversión, estudiamos todas las vías posibles de inversión para tu startup:
- Business Angel: Una persona como tú o como yo, pero que tiene dinero, y le gusta invertir en proyectos de internet o Startups. Aquí encontramos de todo, desde emprendedores que habían ganado mucho dinero, hasta constructores que habían decidido cambiar de sector.
- Subvenciones o financiación pública: Los más famosos son los ENISA, pero también hay préstamos ICO, CDTI, o a nivel Europeo Horizonte 2020.
- Amigos y familia: o lo conocido como triple FFF (Friends, Fools and Family) pero aquí resulta que no teníamos amigos ni familia con dinero para invertir.
- Fondos de Inversión: Los conocidos como VC-Venture Capital. Capital privado con mucho más expertise en el sector. Esta no era la liga que nos tocaba jugar de momento.
- Crowdfundig, lending, equity y todos sus derivados del "prefijo crowd". Es una forma muy interesante de aportaciones económica para tu proyecto a cambio de recompensas.
- Concursos, aceleradoras, premios ... son lo que más vivos mantienen el ecosistema emprendedor. Te ayudan sobre todo en "formación" para poder llevar adelante tu proyecto, incluso en formación para recibir inversión. Por cierto también invierten en proyectos.
Pero ninguna de las opciones era lo que necesitábamos, porque con ninguna de ellas podíamos pasar al camino del producto y tener nuestros problemas tecnológicos resueltos. Es en este punto donde conocimos una nueva figura de inversión. Y digo nueva porque en España está emergiendo y resultando cada vez más interesante.
Es la figura de los Developer Angels. También podemos llamarlos socios tecnológicos. Es decir, puede ser una persona, un equipo o una gran empresa o consultoría tecnológica pero en definitiva de lo que se trata es de que inviertan en tu proyecto pero en "especias".
Con SchoolMars hemos cerrado nuestra primera ronda de inversión, con unos Developer Angels, que han puesto en el equipo a tres desarrolladores, un diseñador gráfico, un analista de datos y un jefe de proyectos a cambio de un pequeño porcentaje (al igual que el resto de inversores) que unidos al equipo técnico propio y a nuestro CTO, hemos conseguido tener el producto que buscábamos. Ahora como nos gusta decir, ya dependemos de nosotros. Es decir estamos en el principio del segundo camino (intentar ser nuestros propios inversores con nuestras propias ventas).
Ser consciente de que un buen número de ventas deben llegar para "no morir en el intento" es uno de los siguientes caminos a los que nos enfrentaremos, siendo conscientes de que para crecer y sobre todo para poder hacer todo lo que en nuestras mentes está, en algún momento volveremos a iniciar el camino de la inversión.
Pero como un día dijo un sabio, "sin prisa, pero sin pausa", o como me gusta decir "después del uno, siempre viene el dos".
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