La portavoz pide al resto de responsables autonómicos que le acompañen en las ruedas de prensa para dar imagen de amplitud del Consell y 'repartir' las preguntas
VALENCIA. La sala del Palacio de Fuentehermosa donde se celebran las ruedas de prensa posteriores al pleno del Consell se ha convertido en un examen difícil de superar para cualquier miembro del Gobierno valenciano. Un 'crematorio' político para cualquier dirigente que ocupe la silla en tiempos tan difíciles para un Ejecutivo con graves problemas políticos y judiciales. Ya lo sufrieron Lola Johnson y el vicepresidente José Císcar, y ahora le ha tocado el turno a la titular de Educación y Cultura, María José Catalá.
Sin embargo, la actual portavoz ha hecho gala de su habilidad política para trazar una estrategia que minimice el desgaste de su imagen en la exigente prueba de cada viernes. Esta consiste, según admiten fuentes de su entorno, en 'repartir' juego al resto de miembros del Gobierno valenciano para que le acompañen en las complicadas ruedas de prensa. "Se trata de dar imagen de amplitud del Consell", comentan las fuentes consultadas, que reconocen también la dispersión del 'fuego' que se produce al aparecer otro miembro del Ejecutivo.
De hecho, en el último mes y medio, han pasado por la sala de Fuentehermosa la titular de Infraestructuras, Isabel Bonig; en dos ocasiones conseller de Economía, Máximo Buch; y también dos veces el responsable de Hacienda, Juan Carlos Moragues. En estos casos, la justificación de la presencia de otros compañeros viene marcada por la presentación de algún proyecto de ley o para informar con mayor profundidad sobre algún asunto de actualidad que los consellers de turno dominan en mayor medida.
Así, el pasado 20 de junio Bonig compareció con Catalá para informar sobre la nueva Actuación Territorial Estratégica (ATE) Alicante Avanza. Una semana después, era Moragues el que aparecía junto a la portavoz para dar cuenta de lo acontecido en la reunión del Consejo de Política Fiscal y Financiera (CPFF) e intentar acallar los rumores de rescate en la Comunitat Valenciana. En la siguiente rueda de prensa, celebrada el 4 de julio, Catalá también estuvo acompañada, en esta ocasión por Máximo Buch, quien acudió a presentar el programa Salario Joven dotado con 3,5 millones de euros y, además, para contestar preguntas de actualidad sobre la apertura en festivos de Ikea o las soluciones al problema del 'trencadís'.
El viernes 11 de julio, por otro lado, la portavoz compareció en solitario si bien en ese pleno su cartera, Educación, Cultura y Deporte, era la 'estrella' debido a los importantes cambios abordados en la cúpula de su conselleria y a la aprobación del decreto de las tasas universitarias. En el siguiente, la reunión del Gobierno valenciano se trasladó a El Campello (Alicante), con lo que la intensidad de la rueda de prensa fue menor.
De regreso a Valencia, Buch volvió a acompañar a Catalá en la rueda de prensa el 25 de julio, en el que analizó los últimos datos del paro y ofreció novedades sobre el pliego para la externalización de Cacsa. Por último, el pasado viernes fue Moragues quien regresó a la sala para presentar el anteproyecto de Ley de Hacienda Pública, de Subvenciones y del Sector Público Empresarial de la Generalitat, y explicar además lo acontecido en la reunión del día anterior del CPFF. Catalá contó con un aliado para explicar los motivos por los que el ministro Cristóbal Montoro había aplazado la reunión programada para julio con los empresarios valencianos.
Así pues, en las últimas semanas se viene sucediendo la presencia de diversos consellers en la sala de prensa, una circunstancia que precisamente en la etapa final de Císcar como portavoz del Ejecutivo era a la inversa. En este sentido, mientras algunas fuentes próximas a Catalá opinan que el vicepresidente daba "menos juego" al resto de miembros del Ejecutivo, desde el entorno de Císcar argumentan que la presencia de consellers para difundir iniciativas de discutible calado obedece, simplemente, a otro tipo de estrategia comunicativa.
OTRO PUNTO IMPORTANTE: DESTERRAR AL PPCV DE LA RUEDA DE PRENSA
Otra de las líneas estratégicas de Catalá en las ruedas de prensa es su alejamiento de los asuntos de partido. Aunque estas citas con los medios de comunicación se convocan para dar cuenta de lo acordado en los plenos del Consell así como de la actualidad relacionada con el Gobierno valenciano, también se ha utilizado a menudo desde años atrás para interpelar al portavoz de turno por algunas cuestiones concretas del PPCV.
Císcar, que además era presidente provincial del PP de Alicante, no rehuía estas preguntas aunque se dedicaba a responder en relación al cargo orgánico que ostenta en el partido, manteniendo en cualquier caso una distancia institucional sobre las cuestiones.
Catalá, por otro lado, posee un cargo orgánico en la Ejecutiva del PPCV de carácter más simbólico, y se ha ocupado de transmitir a los medios de comunicación que no tiene intención de opinar sobre cuestiones de la formación 'popular' en la sala de prensa del Palacio de Fuentehermosa.
Es lo mismo que hace Soraya Saenz de Santamaria para no quemarse, se lleva a un ministro y asi se reparten los golpes
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