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VALENCIA. Economía y Hacienda siguen sin resolver su pugna por el reparto de competencias en el nuevo Consell, uno de los principales conflictos que ha estallado en el seno del Gobierno autonómico. El pulso entre los departamentos que encabezan Vicent Soler, nombrado a propuesta del PSPV y Rafael Climent (Compromís) se centra en delimitar quién tendrá el control sobre los créditos públicos a empresas. Tras varias semanas de negociación entre personal de ambos departamentos, los dos consellers celebraron ayer una reunión monotemática para rubricar un acuerdo, pero el encuentro acabó en fracaso.
Según informaron este miércoles fuentes de ambas consellerias, las negociaciones se mantienen abiertas, pero es complicado que se pueda llegar con una solución definitiva al pleno del Consell de mañana, tal y como se pretendía para atajar cuanto antes una cuestión enquistada prácticamente desde que el nuevo Consell echó a andar.
Los encargados de negociar este asunto han sido el director general de Economía, Francisco Álvarez, y el director del Instituto Valenciano de Finanzas (IVF), Manuel Illueca, por parte de la Conselleria de Hacienda. El punto de partida era el compromiso adquirido por los socios de gobierno para convertir el IVF en un banco público con capacidad de dar créditos a empresas y familias, tal y como quedó recogido en el Acuerdo del Botánico suscrito entre PSPV, Compromís y Podemos.
Cumplir esa promesa obliga a reordenar las competencias en financiación al sector privado entre las consellerias de Economía y Hacienda. El origen del problema es la complicada estructura de reparto heredada del anterior Gobierno, en el que Máximo Buch consiguió llevarse a la Conselleria de Economía el control sobre los créditos a empresas que hasta ese momento detentaba el Instituto Valenciano de Finanzas (IVF).
Álvarez e Illueca alcanzaron un principio de acuerdo a principios de mes. El reparto de competencias y los detalles de ese pacto deberían haberse definido y plasmado por escrito en las semanas siguientes con el objetivo de cerrar cuanto antes este frente y aprobar la nueva estructura en el pleno del Consell de este viernes, el primero tras el receso estival. Salvo acuerdo de último minuto, no va ser posible.
El problema han sido las diferentes interpretaciones que los implicados han hecho posteriormente de las bases de ese pacto. Sólo un día despues de llegar al principio de acuerdo, el conseller de Economía, Rafael Climent, explicó a ValenciaPlaza.com que mantener el control sobre los créditos a empresas era "fundamental" para su departamento y apostaba por bucar fórmulas "para que lo que se decida en Economía generalmente no se pueda vetar en ningún sitio". Fuentes de su departamento subrayaron que Economía mantendría intactas sus competencias y que Hacienda estaba de acuerdo en que así fuera.
No lo vieron del mismo modo en la Conselleria de Vicent Soler. Fuentes de este departamento explicaron que cumplir con los objetivos del Acuerdo del Botánico para la creación de un banco público obliga a devolver al IVF las competencias para prestar. El pacto pasa por la creación de una línea específica de inversión en economía social controlada por la dirección general de Economía y Emprendimiento, mientras que el IVF recupera la capacidad de dar préstamos.
Fuentes cercanas a la negociación reconocen que la negativa de Economía a ceder parte de sus competencias, postura que volvió a defender el conseller Rafael Climent en la reunión de este miércoles, impide zanjar el asunto. Por su lado, Hacienda interpreta que todo lo que no consista en devolver al IVF su potestad para prestar impide reconvertir el IVF en un banco público.
Esta fue una de las principales promesas con las que el presidente de la Generalitat se presentó a las elecciones. Para refundar el IVF, Ximo Puig se apoyó en quien hoy es su director, Manuel Illueca. Su intención es centrar la acción del IVF en tres ámbitos: conceder microcréditos familias sin acceso a la banca tradicional, velar por la competencia bancaria en la Comunitat y gestionar todos los incentivos públicos a las empresas, incluidos los préstamos ICO.
Con la reordenación del sector público que llevó a cabo el anterior Consell, las competencias sobre financiación al sector privado con préstamos participativos y préstamos ordinarios fueron traspasadas al Ivace, dependiente de la Conselleria de Economia. Ello dejaba al conseller Máximo Buch la potestad para conceder préstamos y avales o promover nuevos instrumentos de financiación del sector privado.
He votat a Compromís, però no cal ser una eminència per comparar currículums i saber on deuria estar la competència per concedir crèdits: en l'IVF i, en conseqüència, en la Conselleria d'Hisenda. És senzill, si la Conselleria d'Hisenda és l'encarregada d'obtindre els recursos econòmics, que s'encarregue d'aquest projecte dita conselleria. I per últim, jo també pense com el usuari "panes y peces", doncs juntar a Soler/Illueca (experts en fiscalitat i finances públiques) amb Climent/Álvarez (somiatruites de la "Economia" del Bé Comú), doncs no sé que voleu que us diga...
Sentar a la misma mesa a Soler/Illueca con Climente/ Alvarez , es como mezclar agua con aceite que por mucho que se den vueltas no hay forma. ........Mientras Soler habla de economía, Climent habla del milagro de los panes y los peces para repartir entre sus adeptos. Experimentos absurdos de Puig
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