VALENCIA. Las energías renovables han dejado de ser un ejemplo puntual dentro de la producción energética de la Comunitat Valenciana. Su desarrollo y la actividad económica que generan ofrecen buenas expectativas de crecimiento y de negocio, según los profesionales y expertos que han participado en el ciclo 'La Nueva Economía Valenciana ante los Retos del Siglo XXI' organizado por ValenciaPlaza.com bajo el titulo 'Energías Renovables. Ser o no ser sostenibles'.
En la Comunitat Valenciana, las energías renovables son ya el 37,5% de la potencia eléctrica, después de haber crecido doce puntos en apenas cuatro años, destacó Antonio Cejalbo, director de la Agencia Valenciana de la Energía (AVEN), quien se encargó de inagurar el acto. Este crecimiento de las renovables ha venido acompañado de un retroceso de las más contaminantes. Este es el caso de la demanda de consumo para los derivados del petróleo, que han bajado un 18% en los últimos cuatro años.
Igualmente, la cantidad de CO2 emitido a la atmósfera es hoy en la Comunitat un 25% inferior a la emisión media española. "Éste es el resultado de la reducción en un 20% de la emisión de gases efecto invernadero tanto por habitante como en función del Producto Interior Bruto", ha destacado Cejalbo.
EFICIENCIA ENERGÉTICA, CLAVE DEL EXITO
El secreto de este resultado ha sido la mejora de la eficiencia energética, que ha crecido un 17% en cuatro años, frente al 10% de la media nacional en el mismo periodo. Y no ha sido fruto de un regalo, sino de la "apuesta decidida por las energías renovables, la aplicación de medidas de ahorro y la más adecuada producción eléctrica y gasística", como ha señalado el director de AVEN.
Sin embargo, el objetivo es conseguir que las energías renovables asuman el 45% de la producción energética de la Comunitat valenciana en un plazo medio de tiempo. Para este fin, Cejalbo ha destacado cómo la Generalitat ha dado prioridad a una serie de proyectos para esta legislatura que van desde la 'Ciudad Solar' (instalación de paneles solares en todos los edificios públicos), la redistribución del Plan Eólico (facilitando la colaboración con las autonomías vecinas para aprovechar sinergias), la creación de instalaciones de generación de frío por medio de biomasa y energía solar o el desarrollo de biocombustibles.
La intención desde la Generalitat es incentivar este tipo de proyecto para lograr una inversión de 1.900 millones de euros, principalmente fruto de la iniciativa privada. "Esta legislatura se deberán reducir las emisiones de CO2 en un 1,5% y el consumo de combustibles sólidos del 1% en la Comunitat", ha marcado como objetivo Cejalbo.
SEGUIR EN EJEMPLO DE LA FOTOVOLTAICA
El director de la Asociación Valenciana de Empresas del Sector de la Energía (Avaese), Salvador Jiménez, ejerció de moderador de la mesa redonda en la que participaron Enrique Selva, consejero delegado de IM2; Ander Muelas, socio director de Grupotec, y Antonio Martínez, gerente de Tramave. Jiménez recordó que las energía renovables "están instaladas en la economía valenciana porque no se le puedes poner puertas al campo".
Como ejemplo, señaló cómo el conjunto de las empresas de energías renovables deben armarse como lo hicieron las de fotovoltáica española. "Después del impulso inicial de este modo de generación, hoy se ha convertido en un negocio muy admirado y reconocido internacionalmente, lo que le ha abierto muchas puertas en el exterior, como es el caso del mercado de EEUU", recordó.
Por su parte, desde el Instituto Tecnológico de la Energía (ITE), su director, Alfredo Quijano, ha destacado las posibilidades de negocio que ofrece no sólo la propia actividad de las renovables, sino también los servicios y actividades complementarias. Quijano explicó cómo se han convertido en nichos de negocio los trabajos dedicados al desarrollo de un mejor almacenamiento de energía y de las redes de abastecimiento.
En el caso del almacenamiento, además de la propia infraestructura y la mejora de los procedimientos, ha destacado las posibilidades de "la segunda vida de las baterías de los vehículos eléctricos". Aunque no ha terminado de extenderse la implantación de este medio de transporte, Quijano se mostró convencido de que se impondrá y de que va a ofrecer no sólo posibilidades de fabricación y perfecionamiento, sino también su propia reutilización.
Sobre el negocio en la red de abastecimiento, el director del ITE destacó el negocio desde el punto de vista del diseño, el desarrollo de la propia instalación o la formación en aspectos relacionados con la gestión de la red de distribución. "En estos aspectos ya se está destinado muchos esfuerzos e inversiones", afirmó Quijano.
DERROCAR FALSOS MITOS DE LAS RENOVABLES
"En el juego energético hay nuevos jugadores y ya juegan en competencia", sentenció Enrique Selva, consejero delegado de IM2. Mientras en los años 80 la mayoría de la instalaciones se limitaban a viviendas aisladas; actualmente, el negocio vive una proyección de crecimiento ordenado en el largo plazo, gracias a la transposición de las directivas europeas.
Selva explicó en nuevo modelo productivo que plantean las empresas de energías renovables basado en la descentralización de las fuentes de energía, el aprovechamiento de recursos ilimitados, limpios, además de lo que ha denominado la "energía 2.0". Este nuevo concepto de producción energética permite intercambiar el papel del productor y del consumidor, al poder comercializar este último sus excedentes energéticos.
Sin embargo, para la definitiva implantación de las renovables como eje de la producción energética, Selva ha denunciado la existencia de varios falsos mitos. Uno de ellos es el que se refiere a la "falta de madurez" de las energías renovables, "cuando la energía fotovoltaica ha reducido ya un 20% sus costes y alcanzado un porcentaje significativo en el mix que reúne al resto de fuentes de producción".
También ha negado que sean caras, ya que no tiene costes externos, a diferencia de la nuclear, en caso de accidente; o los hidrocarburos, si se producen vertidos. En su opinión, son las grandes productoras energéticas españolas las que prefieren conservar el actual modelo de producción energético, mientras apuestas por las renovables en su inversiones en el extranjero.
LOS COMPROMISOS INTERNACIONALES APOYAN LAS RENOVABLES
"Las renovables ya están asentadas en el Producto Interior Bruto español", aseguró Ander Muelas, socio director de Grupotec. Por citar la víspera del encuentro, Muelas mostró los gráficos de demanda de energía del martes 29 de noviembre para demostrar que las renovables ya son el 25% del total en España.
Actualmente, se cuentan con compromisos internacionales como el Protocolo de Kyoto o las conferencias de Copenhague y Cancún que obligan a tomar medidas. En la Unión Europea, el objetivo es lograr que en el año 2020, un 40% del mix energético será de energías renovables.
En el caso de España, el Plan estatal de Energías Renovables propone vencer con las renovables un triple reto: reducir el consumo energético por unidad del PIB, reducir nuestra dependencia energética del exterior y cumplir el reparto de producción al 20% entre los distintos tipos de energías.
Entre otras ventajas, el socio director de Grupotec destacó cómo el precio medio diario de estas energías está siendo menor, ahorrando 9.000 millones de euros por formar parte del mix. Además explicó como la tecnología eólica consigue ofrecer los mejores costes, mientras que la fotovoltaica ha corregido y mejorado sus sistemas.
Para el futuro, la cuestión es alcanzar los objetivos políticos, pero también lograr un rentabilidad del 10 o el 11%. Eso sí, una vez superado el desfase producido por el exceso de oferta de fotovoltaica ocurrido en 2008. Y es que, para Ander Muelas, "las renovables ya estamos en competencia, como demuestran los gráficos de consumo diario".
BIOMASA: UNA CENICIENTA QUE BUSCA SU ZAPATO
Antonio Martínez, gerente de Tramave, defendió la fuerza de "la cenicienta de las renovables, que aún busca su zapato": la producción por medio de la biomasa. Martínez defendió las amplias posibilidades de futuro que ofrece este modo de producción por su capacidad para producir energía de forma continuada, "sin depender del sol o del viento".
También destacó su contribución a la reducción de las emisiones de CO2, por dejar de incorporar metano a la atmósfera, ya que este gas es su combustible. Este aspecto es doblemente rentable, ya que permite al país la venta de derechos de emisión de gases con efecto invernadero.
Por otra parte, recordó que no sufre riegos de bajadas de tarifa porque está englobado en otro grupo de productores de energía. En opinión del gerente de Tramave, la biomasa también tiene un amplio recorrido porque los residuos son la materia prima de este negocio y estos serán producidos por la sociedad "hoy y en el futuro".
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