Los ceses, reubicaciones y cambios competenciales han afectado a dos tercios del total de cargos
VALENCIA. El presidente de la Generalitat, Alberto Fabra, tardó más de lo previsto en afrontar la remodelación del Gobierno valenciano en lo que se refiere a máximos responsables autonómicos. Sin embargo, en el casi año y medio que el jefe del Consell está al mando, ha acometido 60 variaciones en el segundo escalón del Ejecutivo entre cambios de competencias o destino de los cargos y los ceses y nombramientos.
Así, dos tercios de los 91 puestos del Gobierno entre subsecretarios, secretarios autonómicos y directores generales ya no tienen los mismos dueños que cuando Fabra llegó al poder. Más de una veintena de ceses en un año y medio que, unidos a los cambios estructurales en las consellerias, han derivado en una auténtica revolución del Ejecutivo.
La primera gran tanda de variaciones en el segundo escalón del Consell fue el pasado 18 de febrero. En ese momento, Fabra dejó vía libre a los nuevos responsables autonómicos, Máximo Buch en Economía y María José Catalá en Educación, para diseñar sus propios equipos. A estos cambios se les unieron algunos otros que se interpretaron en su día como una maniobra de alejamiento de la herencia de Francisco Camps. En total, se produjeron ocho ceses, otros tantos nombramientos y nueve reubicaciones de dirigentes.
Así, en el mes de marzo el presidente de la Generalitat ya había acometido un total de 29 cambios en el segundo escalón. En julio se produjeron unas pocas variaciones a raíz de la salida de Mariano Vivancos de la Dirección General de la Agencia Valenciana de Evaluación y Prospectiva tras unas declaraciones en las que calificó de "talibanes" a los profesores.
Su puesto fue ocupado por Jacobo Navarro, hasta entonces director de Análisis y Políticas Públicas. Al mismo tiempo, su lugar fue cubierto por Rubén Cortés, hasta entonces director general de Modernización, plaza que recogió María Barrios, una cara nueva. Además, la entonces directora general de Relaciones Informativas Cristina Albamonte dejó su puesto a José Santamans, hasta entonces jefe de prensa del vicepresidente del Consell, José Císcar.
Desde estos cambios, el segundo escalón de la Generalitat había permanecido en tranquilidad. Sin embargo, la remodelación del Consell ejecutada por Fabra días atrás ha derivado en 11 ceses y 27 nombramientos en el segundo escalón, entre los que se incluyen una decena de caras nuevas. En total, 60 cambios que han afectado a casi todas las consellerias. De hecho, las pocas áreas que se han mantenido prácticamente intactas desde que Fabra entró en el Palau de la Generalitat han sido Infraestructuras y Gobernación.
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