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VALENCIA. Esta semana se han sentado por primera vez a negociar las condiciones del cierre de Corporación Dermoestética los representantes del propietario, José María Suescun, y los delegados de los trabajadores (este diario avanzó en exclusiva la noticia del cierre, así como la negativa de la empresa a reconocerlo públicamente).

Y el balance del primer encuentro es desolador para los empleados: "La empresa no ofrece otra solución que el cierre en seis meses de las 59 clínicas y el despido de los 353 empleados. Dicen que no tienen liquidez; que no es viable", señala a Valenciaplaza.com, la secretaria general de la Federación de Sanidad de UGT, Pilar Navarro, pero desde la parte laboral niegan que esta drástica medida sea la única salida.

La dirección ha informado que se está procediendo a reagrupar y redistribuir pacientes a los que se está haciendo seguimiento de sus tratamientos o intervenciones. "Están derivando pacientes de Tarragona a la clínica de Barcelona y también a Valencia, entre otras", pero añade Navarro que ha sido una información "de palabra, no con cifras, ni por escrito", apunta. Por ello, añade, han solicitado para la próxima reunión más concreción en el proceso.

Y ha recordado que la dirección avisó a los sindicatos a mediados de noviembre de 2014 que ya no se admitían nuevos clientes para nuevos tratamientos. El proceso de cierre es acelerado, aunque la parte social desconoce el calendario; qué clínicas serán las primeras en cerrar y qué trabajadores los primeros en dejar la firma.

UGT SOLICITA MÁS INFORMACIÓN

La empresa solicitó a finales de diciembre el concurso de acreedores ante el Juzgado Mercantil de Valencia sin apurar los tres meses (más uno) del preconcurso (presentado el 10 de diciembre) y ahora está a la espera que el juez lo admita a trámite y designe el administrador concursal.

La dirección ha entregado de momento dossiers con las cifras que pretenden avalar la liquidación, pero la responsable de sanidad en UGT explica que "es cierto que hay clínicas con graves dificultades, pero hay otras que no. No vamos a aceptar el cierre de todo", afirma contundente.

Además añade que no van a aceptar 20 días por año trabajado cuando hay trabajadores que llevan 30 años en la empresa, "toda una vida, bajo ningún concepto los vamos a dejar tirados", manifiesta la sindicalista. E insiste en recordar que en los anteriores ERE temporales y en el plan para su reflotamiento se reflejó ("está en las actas") que "todos los ajustes que se hicieron era "para su viabilidad".

UGT ha solicitado a Suescun que participe personalmente en las negociaciones, "porque sería todo mucho más rápido, ya que los otros son simples interlocutores y tienen  que ir preguntándole todo, pero de momento él no ha aparecido".

Respecto a la posibilidad apuntada por este sindicato de que el propietario responda con su patrimonio en las indemnizaciones, Navarro ha dicho que "está claro que aquí hay un entramado (de clínicas alquiladas a una empresa de la que él es partícipe) donde al final él está en todo", concluye.

Pilar Navarro acumula un bagaje de tres años de arduas negociaciones con Corporación Dermoestética por los sucesivos ERE temporales y por el plan de viabilidad y asegura que "los trabajadores están haciendo un esfuerzo ímprobo. Han puesto ilusión y esfuerzo, e incluso se bajaron los sueldos. Y no vamos a permitir que esto se resuelva con el cierre".