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VALENCIA. El acuerdo alcanzado por el líder del PPCV, Alberto Fabra, con los presidentes provinciales y la alcaldesa de Valencia, Rita Barberá, para otorgar los galones de la secretaría general del partido a la consellera Isabel Bonig se formalizará este viernes en la Junta Directiva Regional de la formación 'popular'. Al mismo tiempo, se producirá oficialmente la salida del hasta ahora 'número dos' del PPCV, Serafín Castellano, que se mantendrá en el Ejecutivo con la cartera de Gobernación y Justicia que hasta ahora ha dirigido.

No obstante, al margen de este cambio, en el seno de la formación 'popular' la creencia generalizada es de que habrá más variaciones en el organigrama e, incluso, fuentes de las distintas direcciones provinciales no descartan que este mismo viernes pueda producirse una revolución orgánica en el PPCV a cargo de Bonig. Tiempo ha tenido para madurar si quiere entrar en el puesto haciendo cambios: la reunión de Fabra con los barones del partido tuvo lugar el lunes pasado y habrán transcurrido casi dos semanas cuando la consellera sea nombrada oficialmente.

Fuentes 'populares' apuntan a que la demora en la designación oficial de Bonig en el PPCV se debe a que Fabra sigue porfiando por convencer a Madrid de que le permitan situar a Serafín Castellano como delegado del Gobierno, un puesto que depende directamente de la vicepresidenta del Gobierno, Soraya Sáenz de Santamaría. De hecho, se espera a que este mismo viernes se conozca el nombre del sucesor de Paula Sánchez de León, quien manifestó públicamente semanas atrás que dejaría el puesto para dedicarse a la esfera privada. De lograr su objetivo, si bien las distinas fuentes consultadas del partido lo ven "complicado", Fabra daría una salida digna a Castellano el mismo día de su cese como secretario general del partido.

Al margen de esta vía en la que viene trabajando Fabra, los días transcurridos también han servido para que la propia Bonig medite sobre las tareas a realizar -el presidente le ha encargado abrir el diálogo con la oposición sobre una reforma estatutaria- y también acerca de los cambios de caras a abordar en el organigrama. En este sentido, en diversos cuadros del partido circula la tesis de que la nueva 'número dos' del partido se plantea abordar una reestructuración del organigrama en la que no se descarta la salida varios vicesecretarios del partido, incluso de los cuatro que se sitúan por debajo del 'número tres' del partido César Sánchez.

DUDAS SOBRE LOS VICESECRETARIOS 

Actualmente, los vicesecretarios del partido son Marisol Linares (Organización), Miguel Ortiz (Política Territorial), César Augusto Asencio (Política Social) y Jorge Bellver (Comunicación). Analizando los nombres uno a uno, la perspectiva desde su nombramiento ha cambiado sensiblemente y tendría cierta lógica que hubiera cambios. Linares, quien fuera secretaria general provincial de Castellón con Carlos Fabra, ha perdido influencia en el partido; Asencio, centra buena parte de su labor como vicepresidente de la Diputación de Alicante; Bellver, ya es portavoz en Les Corts y es responsable de un área a la que se quiere dar un nuevo impulso y, por último, Ortiz, está considerado un dirigente válido aunque puede lastrarle su cercanía a Serafín Castellano.

Estos nombres, así como algún otro de las áreas ejecutivas, podrían variar a partir del viernes, según señalan fuentes 'populares'. No obstante, mientras algunos temen los cambios, desde las direcciones provinciales se muestran favorables a que Bonig afronte una reestructuración a su gusto de la Ejecutiva, sobre todo si viene cubierta bajo un manto de cierta renovación generacional y 'guiños' hacia los presidentes provinciales del partido, Alfonso Rus, José Císcar y Javier Moliner.