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VALENCIA. El actual Consell no es muy partidario de los nuevos centros comerciales, ya lo han manifesta algunos de sus integrantes en estas últimas semanas. La vicepresidenta del Consell, Mónica Oltra, advertía de que existe "una inflación de centros comerciales alrededor del área metropolitana de la ciudad de Valencia", además de subrayar que la tarea del Gobierno es contribuir a la igualdad de la "parte más vulnerable", que es la del pequeño y mediano comercio.
El conseller de Economía, Rafael Climent, tampoco dudó en manifestarse en contra de Puerto Mediterráneo, proyecto ubicado en Paterna, del que se esperan 300.000 metros cuadrados de superficie alquilable y con una inversión de 800 millones."El modelo de vida basado en las grandes superficies nos ha cambiado la vida como personas, ha matado un modelo de vida y unos hábitos y no los hemos tenido en cuenta", explicaba Climent en una entrevista a Valenciaplaza.com.
"El pequeño comercio ayuda a la convivencia, a tener productos de proximidad... Y hemos convertido en nuestro modelo de vida pasar un fin de semana paseando por grandes superficies en lugar de disfrutar de la naturaleza o la cultura", reprochaba. "Y por lo que se refiere a los trabajadores, les hemos roto la conciliación familiar y un modus vivendi diferenciado, Tendremos que replantearnos qué modelo queremos para el comercio. Nosotros apostamos por el pequeño y mediano comercio".
Sin embargo, en años anteriores son varios los proyectos que han ido gestándose y que tienen toda la voluntad de ser consumados. De hecho, entre todos ellos, aumentan un 30% la superficie comercial de la Comunitat Valenciana ya que se trata de un aumento de 44.563 metros cuadrados más. Puerto Mediterráneo es el más grande de ellos, pero a éste se suman los también pedientes Alfafar Parc, Cruce de Caminos en Sagunto y Sector Nord en Carcaixent. Según un estudio de Pateco, la Comunitat Valenciana es la séptima autonomía en superficie bruta alquilable por habitante con 355 metros cuadrados por cada 1.000 habitantes, 30 por debajo de la media de España.
ALFAFAR PARC, AL CALOR DE IKEA
El parque comercial Alfafar Parc nace al calor de la multinacional sueca Ikea: AlfafarParc. Su promotor es una agrupación de interés urbanístico, y comercializa un total de 95.000 metros cuadrados de superficie comercial a través de la empresa Quick Expansión. Decathlon ha sido una de las primeras empresas en cambiar de calle y trasladarse junto a Ikea mientras que también se ha instalado la empresa catalana de restauración Viena.
El segundo gran parque comercial previsto para los próximos dos años es Cruce de Caminos en Sagunto. Lar España Real Estate, sociedad cotizada de inversión inmobiliaria, ha confirmado la inversión de 53 millones de euros en el desarrollo del complejo comercial. El conjunto comercial, con 45.000 metros cuadrados de superficie bruta alquilable, estará formado por un centro comercial y una galería comercial en la que ya han confirmado firmas como Decathlon, AKI Bricolaje, C&A, Fifty Factory (Grupo Cortefiel), Panre Toys, Burger King y Foster Hollywood. Está previsto que concluyan entre finales de 2016 y comienzos de 2017.
El parque comercial Sector Nord de Carcaixent es obra de la promotora Clásica Urbana Desarrollo Inmobiliario, y prevé una superficie total de 19.563 metros cuadrados. La superficie edificable es de 10.564 metros cuadrados, está situado junto al Decathlon de Carcaixent y frente al centro comercial Ribera del Xúquer.
LAS ÚLTIMAS APUESTAS DE LAS PROMOTORAS
En los útimos diez años se han abierto tres grandes superficies en la provincia de Valencia, mientras que otros se han remodelado para cambiar su imagen. Uno de los más recientes es el de Parque Ademuz, cuya apertura fue en 2013. La empresa IGSA, Inmobiliaria Guadalmedina, propiedad de Enrique Ballester, está detrás de este proyecto que tiene 300.000 metros cuadrados de SBA.
En 2010, el centro comercial Arena Multiespacio abría sus puertas al lado del campo del Levante UD, en la zona norte de la ciudad. Con una inversión de 200 millones de euros, Valencia Natura Park y el grupo NAU pusieron en marcha 101.000 metros cuadrados de SBA para tiendas y restauración. La inversión que llevó a cabo fue de 200 millones de euros, 130 de los promotores y 70 millones de los locales comerciales.
En el año 2006 era inaugurado el centro comercial Aqua Multiespacio, situado en la Avenida de Francia, de Valencia. La constructora del complejo, Oceanic Center, extendió su creación en 35.000 metros cuadrados de SBA donde habilitó 96 locales. El centro se instaló al lado de una gran superfecie, el Corte Inglés.
En el término de Alfafar también se encuentra el Centro Comercial MN4, inaugurado en 2004 por el Grupo Martí con 40.724 metros cuadrados de SBA. Acumula 101 locales en sus instalaciones y se encuentra rodeado por grandes superficies de tecnología y zonas de restauración. Actualmente tiene una de sus últimas plantas con varios locales vacíos por el cierre de negocios.
El centro comercial Bonaire, situado en Aldaia, abrió sus puertas en 2001. Se encuentra constituido por 135.000 metros cuadrados de SBA, pero se realizó una ampliación para conformar una segunda zona llamada Factory Bonaire y en 2011, debido a su décimo aniversario, realizó un lavado de imagen y se hicieron algunas reestructuraciones de locales. Riofisa, grupo promotor del centro, invirtió 40.000 millones de pesetas en su construcción. Con casi 300 locales en todo su recinto, su área superior no ha tenido muy buena acogida, donde solo permanecen abiertas un par de tiendas. Recientemente se ha instalado una exitosa cadena y con gran reclamo por sus pocas aperturas en la Comunitat, Primark.
Una de las caídas más estrepitosas de centros comerciales recientes fue la construcción del llamado Mercado de Fuencarral. 19.000 metros cuadrados de superficie alquilable en la zona de Campanar y distribuidos en cuatro plantas, que acabaron siendo derruidos para construir unos grande almacenes deportivos en la actualidad. Se abrieron hasta 50 tiendas pero sus escaparates acabaron vacíos tras ser reconvertido en Espai Campanar. Una inversión millonaria del grupo inmobiliario GMp que vio como su negocio caía al vacío. Actualmente, siguen activos los cines Yelmo, un restaurante Kebab y un Frutolandia.
Convendría no generar malvados absolutos Sra. Oltra. Los centros comerciales en si no son limitadores de actividades culturales o deportivas. Son la alternativa para establecer grandes marcas de distribución que ofrecen productos competitvos y la posibilidad de hacer una compra voluminosa sin desesperarse para aparcar. Permite no tener que entrar en la gran ciudad si vives fuera y de no depender del centro saturado para encontrar mucha oferta concentrada. El que quiere hacer deporte o leer lo hace y los centros comerciales no les minan su voluntad de hacerlo. Ni siquiera afectan a la deshumanizacion que sufre la ciudad, dejando, según mi experiencia las urbanizaciones con zonas comunes o los pueblos como los focos más propicios al contacto humano. La oferta y la demanda son mas sabias de lo que piensa.
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