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VALENCIA. La reunión del Consejo de Política Fiscal y Financiera (CPFF) celebrada este miércoles en Madrid, la primera a la que acudía el flamante conseller de Hacienda, Vicent Soler, se pareció demasiado a las anteriores, para desgracia de la Comunitat Valenciana. El conseller expuso la grave situación financiera que atraviesa la Generalitat, reclamó un cambio del modelo de financiación autonómica y pidió medidas transitorias que palíen los efectos de la infrafinanciación hasta que entre en vigor el nuevo modelo. Todo en consonancia con lo que ya venía reivindicando el Gobierno de Alberto Fabra por boca de su conseller, Juan Carlos Moragues.
La respuesta del ministro de Hacienda, Cristóbal Montoro, no varió un ápice. Pidió más austeridad a las comunidades autónomas, a las que fijó un objetivo de déficit inferior al de la Administración central, y respecto al cambio de modelo de financiación, se comprometió ante Soler a "reactivar" el grupo de trabajo creado por el CPFF para dicha reforma, que se dejó inactivo después de que en 2014 los expertos designados por el Ministerio presentaran un informe que dejaba bien claro que la Comunitat Valenciana es, desde 2002, la peor financiada.
En su intervención en el pleno del CPFF, el conseller afirmó: "La situación para la Comunitat Valenciana es límite y la única solución es cambiar el sistema de financiación, ya que el nuestro no es un problema de gastos, sino de ingresos".
Soler recordó que la Comunitat "supuestamente tenía que cumplir el objetivo de estabilidad porque presentó unos ingresos ficticios de 1.500 millones de euros en el Plan Económico Financiero (PEF), pero atendiendo a la realidad se trata de algo complementamente fuera de nuestro alcance de cumplir".
El conseller criticó que las "alegrías electorales" que está permitiéndose el Gobierno Central -en referencia a la rebaja fiscal- son un indicador de que el Ministerio tiene margen de maniobra y por tanto, "es injusto que sigan aplicando unos objetivos de déficit muy duros a las comunidades autónomas que no se aplican a ellos mismos".
DIEZ MINUTOS DE CONVERSACIÓN
Al término de la reunión, Soler tuvo ocasión de conversar durante unos diez minutos con Montoro, el secretario de Estado de Administraciones Públicas, Antonio Beteta, y el resto de la delegación valenciana, compuesta por los secretarios autonómicos de Modelo Económico y Financiación, Julián López, y de Hacienda, Clara Ferrando.
El conseller abundó en los argumentos ya expuestos para tratar de convencer a Montoro, al parecer sin éxito, de que las demandas de la Comunitat no son como las de muchas de las autonomías que se quejan del modelo a pesar de recibir fondos muy superiores a la media.
El guión de este CPFF fue, pues, similar a los anteriores excepto en un punto importante. Al contrario que cuando la dirigía el PP, la Comunitat Valenciana votó en contra de los objetivos de déficit y deuda propuestos por el Ministerio para el período 2016-2018. Tras una reunión previa por la mañana presidida por el líder del PSOE, Pedro Sánchez, los representantes socialistas en los gobiernos autonómicos que controlan habían decidido proponer un objetivo de déficit para 2016 del 1,4%, más de un punto por encima del 0,3% que ofrecía el Gobierno.
Votaron a favor cuatro comunidades gobernadas por el PP, Madrid, La Rioja, Murcia y Galicia, además de las ciudades autónomas de Ceuta y Melilla, mientras que Castilla y León abstuvo. En contra de los objetivos marcados por el Gobierno votaron nueve comunidades: Castilla-La Mancha, Comunitat Valenciana, Canarias, Cataluña, Andalucía, Aragón, Extremadura, Baleares y Asturias.
La propuesta pasa por mantener el objetivo de déficit en el 0,3% para el próximo año, el 0,1% para 2017 y del 0% para 2018. La propuesta del Ministerio fue aprobada en segunda votación, al no alcanza en la primera los dos tercios del voto ponderado.
Los objetivos de deuda pública para el conjunto de las comunidades quedan en el 22,5 % del PIB nacional en 2016; el 21,8 % en 2017 y el 20,9 % en 2018.
CASI 100 MILLONES MÁS ESTE MES
El CPFF también entregó a las autonomías la liquidación definitiva del ejercicio 2013, por lo que, según Antonio Beteta, a partir de ahora se podrá empezar a "evaluar el sistema vigente" de financiación autonómica (2009-2013). El Gobierno devolverá, previsiblemente a finales de este mes, 1.775 millones de euros a 13 comunidades y las ciudades de Ceuta y Melilla, por el ajuste derivado de las entregas a cuenta realizadas en el año 2013, mientras que Andalucía y Aragón tendrán que devolver dinero.
Según informó el Ministerio de Hacienda, de los 1.775,6 millones, la mayor parte (684,4) corresponderá a la Comunitat Valenciana, y 553,9 a Baleares. Por el contrario, tendrán que devolver dinero Andalucía (265,2 millones) y Aragón (20,7). La cantidad que recibirá la Comunitat es 96 millones superior a la prevista en los presupuestos, como adelantó este miércoles Valenciaplaza.com. En conjunto la diferencia a favor de las comunidades entre lo previsto y lo que recibirán finalmente es de 938,6 millones.
Pues a los tribunales, es insostenible esta situación. Si ahora no hacen nada de nada, ya nos podemos imaginar como lleguen al poder en el gobierno central, nos podemos olvidar.
El PSOE no es el partido que va a mejorar nuestra financiación, ya que fue el partido que aprobó el actual sistema, y sabían perfectamente que íbamos a perder con el mismo. Entonces callaron. Ahora hacen como que reclaman. Todo con la boca muy pequeña.
El concert i el cupo estalvien a bascos i narresos d'assistir a aquestes humiliacions, més estalvi impossible. Hem de voler per als valencians el millor, hem de voler per als valencians el concert i el cupo.
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