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VALENCIA. El clarinetista valenciano Joan Enric Lluna se orienta cada vez más hacia la dirección de orquesta. Una buena muestra de ello fue el concierto que ofreció el pasado 18 de febrero en el Palau de la Música al frente de la Manchester Camerata. Lluna no solo dio un concierto titánico desde el punto de vista del clarinete solista, sino que además dirigió una formación de la talla de la orquesta Manchester Camerata.

El programa incluía, además de la Fantasía de Ramón Carnicer, el Concierto número 2 de Weber y las dos piezas de la Fantasía de Porgy and Bess, de Gershwin, todas ellas con complejas y virtuosísticas partes solistas de clarinete, la Sinfonietta FP 141 de Francis Poulenc. El público premió con repetidos y cálidos aplausos la sesión y el doble trabajo del artista de Godella como director y clarinetista.

Pero lo más destacable es que Lluna está adentrándose de manera cada vez más firme en el terreno de la dirección. Y no solo, como hacen algunos solistas, dirigiendo las obras en que la orquesta los acompaña, sino también en el terreno especializado de la gran orquesta. Lluna dirigió en Londres en septiembre de 2013 una partitura de la complejidad de la Sexta sinfonía de Mahler a la orquesta I Maestri, fundada por Neville Marriner.

Un año después, el 5 de octubre de 2014, dirigió la orquesta del Palau de les Arts de Valencia, en un programa que incluía la Sinfonía número 25 y la Sinfonía Concertante para instrumentos de viento y orquesta de Mozart en la primera parte y la Séptima sinfonía de Beethoven en la segunda. Pero además hace tan solo unas semanas que Lluna ha dirigido de nuevo en Londres, a la Orquesta de Cámara del Covent Garden, un programa que incluía la Sinfonietta de Poulenc y la Séptima de Beethoven y se abría con El Amor Brujo de Manuel de Falla.

A todo ello se une la labor de director musical que Lluna desempeña cada año al frente de la orquesta del Festival de Música de Cambra de Godella, que siempre incluye piezas de envergadura, de manera que Lluna durante el festival unos días dirige, otros toca y los restantes toca y dirige. No es solo un músico polifacético; es cada vez más un gran director de orquesta.