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VALENCIA. "Nunca en mis más de 30 años trabajando en los mercados había visto algo similar en la bolsa española y mira que he negociado con cientos de valores, pero lo de Mercal Inmuebles es algo que no entiendo porque lo que se busca en bolsa es notoriedad, visibilidad y marca y si solo ha cotizado tres veces en seis meses ya me dirás". Son palabras de un veterano operador de bolsa consultado por este diario sobre el curioso caso de esa sociedad cotizada de inversión inmobiliaria del Mercado Alternativo Bursátil (MAB).

Pero la singularidad de la cotizada presidida por José Enrique Ramos va más allá porque el pasado jueves comunicó por hecho relevante al mercado que el número de accionistas a 31 de diciembre de 2014 ascendía a... ¡18! Ver para creer. "Es un hecho insólito en el parqué aunque se trate de este pequeño mercado para empresas en expansión y más teniendo en cuenta que parece que el ladrillo comienza a dar señales de vida", añade el sorprendido broker.

VOLVIÓ A COTIZAR 169 DÍAS DESPUÉS

Mercal Inmuebles se estrenó en el MAB -concretamente en el segmento de socimis- el 2 de julio de 2014 a 29,40 euros, un 1,37% por encima de los 29 euros desde los que partía. Lo hizo negociando la pírrica cifra de 200 títulos.

Hubo que esperar al 18 de diciembre para ver el siguiente cambio (32,41 euros), lo que representó una fuerte revalorización del 10,24% con solo 400 acciones de volumen; mientras que al día siguiente marcó el último precio (33,50 euros), al repuntar un 3,36% y negociar 1.690 títulos. Desde entonces no ha vuelto a dejarse ver por el MAB.

Mercal fue la sexta socimi que salió a cotizar a bolsa el pasado ejercicio siendo la tercera presente en el segmento de socimis del MAB junto a Entrecampos Cuatro y Promorent. Esta cotizada madrileña, que cuenta con GVC Gaesco Valores como proveedor de liquidez y PKF Attest Servicios Empresariales su asesor registrado, capitaliza por valor de 29,35 millones de euros.

Fue constituida en 1992 y se convirtió en socimi en septiembre de 2013, tiene por objeto principal la adquisición y promoción de bienes inmuebles de naturaleza urbana para su arrendamiento. Según su ficha del MAB cuenta con una cartera de activos de primer nivel, situados en los mejores emplazamientos, alquilados a grandes compañías con contratos de arrendamiento a medio y largo plazo. Esto le permite mantener unos altos niveles de ocupación y unos ingresos estables.