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VALENCIA. Lo relata el promotor y periodista valenciano Miguel Angel Pastor, socio de Música, Arte y Sueños. Hace unos meses esta empresa, que se ha encargado por ejemplo de algunos de los conciertos de música pop más relevantes del Palau de les Arts, como el de Luz Casal, recibió una propuesta interesante sobre el papel: tenían el contrato para organizar sendos conciertos de Marc Anthony en Valencia y Madrid.

Las fechas que se manejaban eran las de mayo. El lugar elegido, en el caso de Valencia, la Marina Sur. Se hicieron cuentas y finalmente se dijo que no. Los motivos, varios. Uno de ellos, la premura de tiempo. Otro el riesgo de la operación. Ambos condicionados por lo mismo: el IVA del 21%. La súbida impositiva ha reducido los márgenes de beneficio hasta tal punto que arriesgarse por la música es temerario. "Con un IVA como el anterior lo hubiéramos hecho seguro, pero si tienes que pagar un 21% a Hacienda, un 10% a autores (que no digo que no se lo merezcan), entre un 12 y un 15% de alquiler de local... tus márgenes se reducen", explica Pastor.

El caso de Valencia y Marc Anthony más que una anécdota es la norma. Así cabe deducirlo de las declaraciones ofrecidas este martes en Madrid por los responsables de la Asociación de Promotores Musicales, quienes anunciaron que la facturación de los conciertos en directo ha caído un 28,6%, y que entre las giras caídas de cartel se encuentran las de Neil Young, Bob Dylan, Robbie Williams o Tom Petty. España ya no tiene dinero para pagarles.

"La oferta es muy baja, es la frase que más nos repiten sus agentes", explicaba este martes en Madrid Pascual Egea, presidente de la Asociación de Promotores Musicales. Un caso excepcional es el de artistas como Bon Jovi, que rebajó su caché para poder actuar en Madrid, o Bruce Springsteen, quien, según aseguraba Egea, tiene especial "cariño" a España, motivo por el cual le cuesta dejar al país fuera de sus giras. Pero la mayoría simplemente dicen no.

Algunos como Lorenzo Pérez, de Mundosenti2, prefieren no hablar de renuncias. "Nosotros nos ajustamos a lo que hay", comenta. Y recuerda que los promotores tienen que enfrentarse también a otros problemas como la ausencia de infraestructuras. Pero, la conclusión está clara: "Al ajustarte renuncias a cosas que no tienes muy claras". Se reducen las apuestas. Se reduce la oferta. Todo cotiza a la baja. O par o negro. Ningún riesgo.

EL DESPLOME EN CIFRAS: 29 MILLONES MENOS... PARA HACIENDA 

Renuncias o ajustes, el hecho es que la música en directo se está desplomando. Según el anuario de la APM, las cifras de recaudación son claras. De los 206 millones de euros recaudados entre septiembre de 2011 y agosto de 2012, se ha pasado a 147 millones en el mismo periodo entre 2012 y 2013, una caída del 28,6% que pone de manifiesto el efecto negativo de la aplicación del IVA del 21%. Además, a esto se suma una caída del 10,6% en la programación, según datos de la SGAE que también se incluyen en este anuario. 

Citando fuentes del Instituto Nacional de Estadística (INE), el empleo cultural ha descendido de 488.700 a 457.000 trabajadores, hasta niveles de 2006. En el caso de la música en vivo, los representantes de la APM calculan que se han cerrado 300 agencias y que en total se han perdido alrededor de 1.200 empleos.  

Los datos ofrecidos por el presidente a la APM, Pascual Egea, y el miembro de la junta Carlos Espinosa, y recogidos por Europa Press, hablan de hasta qué punto la subida de impuestos fue un mal negocio para Hacienda. La pérdida de la recaudación fiscal es de alrededor de 29 millones de euros, por lo que, según destacan los representantes de la APM, "más que ganar, se ha obtenido menos dinero para las arcas públicas" 

El "oasis" lo han constituido los festivales, aunque "también están sufriendo" y han percibido también los efectos de la subida del IVA. Entre los festivales, destaca el impacto económico del Primavera Sound, que, según datos de 2012, alcanza los 65 millones de euros; seguido por el Sónar, con 52 millones de impacto; el SOS 4.8, con 20 millones; y el Bilbao BBK Live, con 17,5 millones.

Con todo, las expectativas son optimistas. En el sector esperan que se regrese al IVA reducido, como ha sucedido ya en el caso de las transacciones artísticas y eso suponga un impulso. "A ver si volvemos a la normalidad", comentaba este martes Pastor. En parte deseo, en parte esperanza, en parte pensamiento positivo, la reactivación del mercado se debe vislumbrar este año.