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VALENCIA. Los dardos envenenados del presidente de Extremadura, José Antonio Monago (PP), a su homólogo valenciano y compañero de partido, Alberto Fabra, han alimentado uno de los episodios más rocambolescos de la legislatura en lo que se refiere a enfrentamientos entre barones regionales de esta formación.

Este miércoles el responsable autonómico extremeño, que gobierna en minoría, volvió a dejar frases para el recuerdo: "Le pido a Fabra que no se obsesione conmigo al hablar de financiación autonómica", ironizó. "Que mire más para arriba, que no mire para el Atlántico; es que no hay día que no se acuerde de mí, no sé si es culpa suya o de algún asesor", indicó.

Este no fue el único recado enviado en el día de ayer por el presidente de Extremadura, que regaló otras 'perlas' a cuenta del encuentro llevado a cabo por Alberto Fabra y los presidentes de Baleares y Murcia, José Ramón Bauzá y Ramón Luis Valcárcel, para aunar esfuerzos en materia de financiación. "No podemos ser tan bobos de meternos en una dinámica propia de nacionalistas cuando somos miembros de un partido de carácter nacional y no somos nacionalistas", sentenció.

Llueve sobre mojado, dado que el consejero extremeño de Economía, Antonio Hernández, había calificado el encuentro impulsado por Fabra como "foto de los tres tenores".

UN AÑO DE 'RIFIRRAFES'

La ironía y la chanza no son una novedad entre los responsables del Gobierno extremeño para referirse a las iniciativas o declaraciones del Consell de Fabra, que casi siempre ha respondido ciñéndose al asunto concreto y evitando ataques gratuitos. Una corrección que no parece haber hecho sino envalentonar a sus compañeros del PP de Extremadura, cuya lista de agravios verbales hacia el presidente de la Generalitat comienzan a ser muy extensos.

Por recordar algunos ejemplos, en enero se produjo otro rifirrafe a cuenta de la ley del aborto. En pleno cruce de declaraciones, Fabra señaló en referencia a Monago y su postura: "Algunos quieren quedar bien con otros que están apoyando a su gobierno y no con aquellos que le están votando".

La réplica de Monago fue esta: "Esa es la que se le ha ocurrido esta mañana", para asegurar posteriormente que había algunos "confusos" en el asunto. "Yo le cedo a Fabra mi puesto en el ránking de políticos influyentes si es eso...", añadió, en referencia a una clasificación publicada en un medio nacional.

Como ha ocurrido en diversas ocasiones, la cosa no quedó ahí, puesto que otro dirigente extremeño salió a renglón seguido redoblando el ataque contra el presidente valenciano: "Monago conoce a sus votantes porque se presentó a unas elecciones, no como Fabra", señaló el secretario general del PP extremeño, Fernando Manzano.

En noviembre de 2013 habían tenido otro 'enganchón', esta vez de nuevo por la financiación autonómica. Ante los estudios e informes presentados por el Consell de Fabra, Monago señaló: "Algunos por la mañana no piensan lo que dicen: el modelo que proponen va contra el principio de solidaridad".

Ha habido varios encontronazos más. Sin ir más lejos en mayo de 2013, en este caso a cuenta de la flexibilización del déficit, sobre la que la Comunitat Valenciana y Extremadura mantenían posiciones contrarias. Fabra había señalado que llegaba a un encuentro de líderes regionales dispuesto a "arremangarse" en esta cuestión. Monago volvió a replicarle con ironía: "Hay un libro que se llama Constitución y tiene 169 artículos. Habla de solidaridad y se lo recomendaría".

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