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VALENCIA/SUECA (X. A./EP). El presidente provincial del PP de Valencia, Alfonso Rus, se dio la noche de este viernes un baño de masas en la Sala Cancela de Sueca. La cena organizada por la dirección provinical del partido, congregó a unas 1.500 personas, 1.000 comensales en el interior y 500, la mayoría de Nuevas Generaciones, en el exterior del recinto.

Al acto, que servía como punto final a todos los procesos congresuales comarcales y locales culminados en los últimos meses, asistieron el ministro de Exteriores, José Manuel García-Margallo, el presidente de la Generalitat y líder del PPCV, Alberto Fabra, el vicesecretario de Estudios y Programas del PP nacional, Esteban González Pons, la alcaldesa de Valencia, Rita Barberá, la delegada del Gobierno, Paula Sánchez de León, además de diversos consellers como María José Catalá o el secretario general del PPCV, Serafín Castellano.

Rus, que se ha caracterizado en los últimos meses por hilvanar un discurso especialmente reivindicativo hacia Madrid, fue incluso más incisivo que de costumbre, enviando mensajes directos hacia La Moncloa: "El cariño, en Valencia es dinero. Recuerda a tu siervo, señor", subrayó para recordar la infrafinanciación que sufre la Comunitat. 

En esta línea, y en presencia del ministro de Exteriores, no pasó la ocasión de llamar la atención del presidente del Gobierno y del titular de Hacienda: "Margallo es el ministro mas valorado, Montoro no. Nos deben 1.250 millones anuales. A Rajoy: Mariano, acuérdate de nosotros: 1,4 millones de votos para ser presidente del Gobierno", puntualizó.

CORRUPCIÓN, PREFERENTES Y LENGUA VALENCIANA

Por otro lado, Rus defendió la honradez del PP y se preguntó por qué los alcaldes tienen que "agachar la cabeza" ante los casos de corrupción. En este sentido, mencionó el caso Bárcenas y ha exigido que los corruptos vayan "a la cárcel".

El dirigente provincial también se expresó contra los banqueros "sinvergüenzas que inventaron las preferentes" y opinó que "esos tienen que estar en la prisión". Al respecto, manifestó su deseo de que la Justicia sea "más rápida" para que "a las personas que han engañado les tienen que dar lo que toca", mientras que a los que resulten culpables, "lo que toca es a la prisión", remarcó.

Alfonso Rus también aprovechó su discurso para mostrarse "orgulloso de tener un presidente como Fabra" y de sentirse valenciano. A continuación instó a los presentes a no permitir que les digan que "la lengua valenciana es una rama de la catalana". "No catalana, valenciana" ha agregado Rus, que comentó: "No sé si soy de pueblo, pero aleshores, gairebé y doncs, no lo he dicho en mi vida en casa".

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