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VALENCIA (A. MOHORTE). Hacer los presupuesto es, al fin y al cabo, una apuesta sobre los ingresos y gastos que se irán produciendo durante el ejercicio. Se cuenta con claves y cálculos, pero la liquidación permite constatar en muchas ocasiones como el presupuesto propone y el destino dispone.

Aunque unas veces se gana y otras veces se pierde, los cálculos sobre los ingresos por los juegos a través de los cuales recauda la Generalitat valenciana (casinos, bingo y máquinas tragaperras, principalmente) están dejando un magro balance en los últimos años, situándose muy por debajo de lo previsto.

Según la Memoria de Anual 2012 de la Dirección General de Ordenación del Juego, dependiente del Ministerio de Hacienda y Administraciones Públicas, el dinero destinado al azar en la Comunitat Valenciana se ha incrementado un 11,7% (pasando de 996 millones en 2011 a 1.113 millones en 2012, gracias a Loterías y Apuestas del Estado), pero en el ámbito de los juegos por los que recauda la Generalitat se ha reducido en un 17,68%, pasando de 673 millones en 2011 a 554 millones en 2012.

Teniendo en cuenta que en 2011 se recaudó un 56,5% menos de lo previsto (según la Cuenta General del ejercicio, la última publicada) y que los resultados conocidos de lo jugado en 2012 es menos de lo que se consiguió el año anterior, distintos conocedores de la fiscalidad autonómica prevén una contundente y continuada merma de ingresos en este apartado, arruinando las previsiones realizadas hasta ahora.

ESTIMACIONES A LA BAJA QUE SE QUEDAN CORTAS

Los redactores de los Presupuestos de la Generalitat ya temían una merma, pero sus estimaciones se han quedado cortas. Frente a los 425,2 millones que fijaron para 2011, previeron una recaudación para 2012 de 328,9 millones, un 22,64% menos. Sin embargo, la liquidación presupuestaria de 2011 demostró que la cantidad obtenida por esa vía ese año fue realmente de 185 millones, un 43,52% menos de lo previsto.

Al conocerse ese dato cuando ya estaba aprobado el presupuesto de 2012, la cantidad prevista para ese nuevo año resultó un 43,7% superior de la liquidada, pasando de prever una bajada de recaudación a apostar involuntariamente por una contundente mejora sobre lo recaudado en el ejercicio anterior.

A pesar de la confianza que distintos responsable políticos tienen depositada en los casinos, máquinas y bingos, el presupuesto valenciano para 2013 evidencia el pesimismo de la Generalitat sobre los ingresos procedentes de estas actividades, ya que apuntan una caída de un 30,7%, hasta los 227,7 millones, en el ejercicio actual.

MÁS CASINOS PARA MENOS JUGADORES

Teniendo en cuenta los datos publicados por el Ministerio de Hacienda sobre 2012, los casinos no están pasando por su mejor momento. De hecho, en la Comunitat Valenciana este negocio ingresó un 13,4% menos este pasado año, quedando sus ingresos netos (descontando los premios concedidos) en 174 millones, frente los 201 millones de 2011.

El número de visitantes también fue menos, pasando de 759.910 jugadores en 2011 a 690.512 en 2012, un 9,13% menos. Sin embargo, el número de casino se duplicó el pasado año, quedando en seis frente a los tres que operaban un año antes. Menos dinero a repartir entre una oferta mayor.

La menor fiscalidad de la que se han beneficiado los bingos ha favorecido a las salas, que han podido desarrollar estrategias que les han permitido mejorar un 1% su recaudación, al ingresar 98 millones en 2011 y 99 millones en 2012. Esta situación ha permitido situar el número de salas en un total de 58 en 2012, una más que el año anterior pero 20 menos que hace diez años.

La máquinas también han salido perjudicadas de la caída generalizada del consumo. Sólo en 2012, su recaudación ha bajado un 24,8% en la Comunitat Valenciana, pasando de ingresar 374 millones en 2011 a 281 millones en 2012. Aunque son la fórmula de juego que más ingresos genera para las arcas autonómicas, su popularidad ha bajado intensamente, pasando de los 443 millones ingresados por las empresas a través de esa vía en 2008 al 36% menos de este año.