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VALENCIA (EFECOM). Bankia buscará ser un banco rentable en los próximos tres años y "empujará" el crédito a las pymes y al consumo para crecer en cuota de mercado dentro de su plan de reestructuración, según ha dicho hoy el presidente de la entidad, José Ignacio Goirigolzarri.

En mejora de eficiencia, el banco tiene que reducir todavía su red en más de mil oficinas y en 5.500 el número de empleados, un ajuste que ya ha concluido en Madrid y la Comunidad Valenciana, sus dos mercados más relevantes y que suponen el 60 % del volumen de negocio.

Goirigolzarri ha destacado en un encuentro con la prensa en Valencia con motivo de la Junta de Accionistas que ha convocado para mañana, que la entidad tiene una hoja de ruta "muy definida" que se va cumpliendo.

Sin embargo, ha reconocido ser consciente de los desafíos en "un partido muy largo que acaba de empezar" y que es un proyecto "de gran impacto social".

El plan de reestructuración de Bankia, el primero de carácter estable aprobado por la Comisión Europea para una entidad financiera, ha hecho del banco una entidad "muy, muy solvente" que además debe alcanzar una rentabilidad sobre fondos propios del 10 % en 2015.

Goirigolzarri ha basado esta rentabilidad en el incremento de los productos de mayor valor añadido (fondos de inversión u otros), que en los cuatro primeros meses del año han aumentado en 0,20 puntos, en focalizar el crédito en pymes y consumo, en mejorar los costos del riesgo y la eficiencia.

Según ha dicho, el principal interesado en estar más cerca de los empresarios es el banco, que debe preservar la cercanía al territorio natural de las cajas que se integraron en Bankia. "Se puede ser una entidad grande y ser cercana", ha proclamado.

"Somos el único banco valenciano", ha reiterado Goirigolzarri tras destacar que el negocio de Bankia en la Comunidad Valenciana -centrado en Valencia y Castellón- representa más del 20 % del volumen de negocio, 2,6 millones de clientes y 5.400 millones de créditos a empresas.

El descenso del volumen del crédito en general es "compatible" con que los nuevos proyectos "con futuro" empiecen a recibir crédito, en una situación "diferente" a la de hace un año en la que Bankia quiere "reposicionarse" en el mundo de las pymes.

Dentro de su plan de reestructuración, por el que tiene que desinvertir 25.000 millones en activos -otros 25.000 están traspasados a la Sareb-, no existe ninguna previsión de venta a corto plazo de su edificio principal en Valencia, la antigua sede de Bancaja, pero es una cuestión que no se descarta si existen inversores.

Ha asegurado que nunca se ha tratado el hecho de trasladar la sede social de Bankia de Valencia a Madrid, aunque sí se prevé que sea este último el municipio alternativo en los casos en que, por causa de fuerza mayor, no se puedan celebrar las juntas de accionistas en la capital valenciana.

El presidente de Bankia ha afirmado que lucharán para crear valor en el futuro para los accionistas, de quienes ha reconocido que han obtenido un resultado "muy malo" de su inversión.

Sobre los productos híbridos, ha dicho que el precio del canje no ha tenido el resultado que le habría gustado pero era la única alternativa, y ha citado la posibilidad del arbitraje para los afectados.

Según sus datos, 145.000 personas han solicitado el arbitraje y se han analizado 45.000 expedientes, de los que 179 están resueltos de forma positiva para el afectado, frente a las 75 sentencias dictadas por vía judicial.

Goirigolzarri se ha referido, preguntado por el futuro de la entidad, al futuro proceso de reprivatización del banco que será un proceso lento y comenzará "por el mundo institucional", por la venta de determinados paquetes a inversores profesionales