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VALENCIA. "Con menos de lo que hay, no se podrá mantener el actual nivel artístico", le espetó el prestigioso director de orquesta Zubi Mehta a los responsables de la Generalitat durante los preparativos de la actual edición del VI Festival del Mediterrani.
Con el telón de fondo del ERE sobre Culturarts, el músico, principal reclamo internacional del Palau de les Arts, no dudó en romper una lanza por su actual gestora ante el presidente de la Generalitat, Alberto Fabra. "Hemos hablado de que la intendente Helga Schmidt debe mantener ese nivel y para eso es importante el apoyo del Gobierno", reconoció al término de su encuentro con el jefe del ejecutivo valenciano.
Este es uno de los casos más sonados de los tira y afloja de los distintos responsables de las entidades que forman actualmente el holding cultural Culturarts, resultado de la supresión y extinción del Instituto Valenciano del Audiovisual y la Cinematografía (IVAC), Instituto Valenciano de la Música (IVM), Instituto Valenciano de Conservación y Restauración (IVC+R), Teatres de la Generalitat, de la mercantil Proyecto Cultural de Castellón, SA (PCC) y de la Fundación de la Comunitat Valenciana Palau de les Arts Reina Sofía y Fundación de la Comunitat Valenciana La Llum de les Imatges.
Tanto los sindicatos como las direcciones han hecho causa común, a pesar de las diferencias que mantienen, para intentar que los recortes les afecten lo menos posible. Fuentes conoceras del proceso destacan como cada cual ha optado por sus respectivas fortalezas y contactos profesionales, como ha sido el caso del Palau de les Arts, o las vinculaciones políticas que mantienen.
En este proceso, la imputación de la gerente de la Fundación La Luz de las Imágenes, Carmen Díaz Quintero, en el caso Gürtel le ha quitado parte de su fuerza de negociación, según distintas fuentes consultadas, una situación que están aprovechando otros de los representantes de las entidades afectadas.
NEGOCIANDO LA LETRA PEQUEÑA
Actualmente, el expediente está en negociación desde el pasado lunes día 10. Por el momento, se sabe que afectará a 85 trabajadores del holding cultural, un 33% de los 258 que componen la plantilla, pero se desconoce cómo se repartirá este ajuste entre las distintas entidades que lo integran. Desde esa fecha en la que se comunicó oficialmente la medida se ha vuelto a celebrar otras reunión este viernes, que ha servido al director general de Culturats, Manuel Tomás, para asegurar que no significará el cierre de ningún centro de trabajo.
En la mesa de negociación, las posturas se mantienen alejadas, ya que los sindicatos reclaman la retirada del ERE y niegan que esté "suficientemente" argumentado que existan causas económicas, a lo que la dirección replica que "las causas económicas son evidentes" tras el descenso de "todas las partidas presupuestarias de la Generalitat".
De hecho, mantienen que "están suficientemente acreditadas tanto las causas económicas como las organizativas". El próximo encuentro tendrá lugar el miércoles día 19 de junio.
Hasta el miércoles 10 de julio tienen de tiempo las partes para llegar a un acuerdo, aunque será en la fase final de este periodo de negociación cuando realemnte se pongan las cartas sobre la mesa y se avance hacia una solución, como suele ocurrir en estos casos. Por el momento, fuentes próximas a la dirección general defienden que la postura de la Administración no está siendo de máximos.
Apoyan estas afirmaciones en el hecho de que la propuesta inicial de despedir a un 40% de la plantilla para encajar el recorte de un 34,6% del gasto previsto en el presupuesto de 2013 (que ha quedado en 267,5 millones de euros) que reconoció la exconsellera de Cultura, Lola Johnson, se ha reducido significativamente en lo que se refiere a los despidos. "Queremos evitar las decisiones más traumáticas", aseguró el pasado lunes el director general de Culturats, Manuel Tomás.
AMORTIZACIÓN DE PLAZAS, ALTERNATIVA A LOS DESPIDOS
En todo caso, desde un punto legal la decisión se basa en el proceso de redimensionamiento de la Administración valenciana que, en este caso, se concretó con la aprobación del Decreto 7/2012 de las Cortes Valencianas y que estableció la integración de las cuatro entidades de derecho público que existían hasta ahora en CulturArts, lo cual es una causa organizativa suficiente tras al reforma laboral, que se suma a las causas económicas.
En todo caso, parte de los recortes se quieren orientar a la amortización de plazas pendientes de cubrir, especialmente en Instituto Valenciano de la Música (IVM), que incluye al Coro de la Generalitat (conjunto titular del Palau de les Arts); o el Instituto Valenciano de Conservación y Restauración (IVC+R); pero esta opción, que no permitiría rebaña más de una decena de empleos, no es aplicable en todos los casos.
El de la primera foto con Mehta no es Fabra es Manuel Tomás.
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