06/10/2010 El presidente de la compañía ha ratificado que su objetivo es "incrementar las inversiones en Europa, especialmente en España"

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VALENCIA (VP/EP). La factoría de Celestica en La Pobla de Vallbona (Valencia) ha vuelto a obtener beneficios en los primeros nueve meses del año, tras "varios años" en números rojos, y prevé cerrar 2010 y 2011 con una facturación cercana a los 80 millones de dólares -frente a los 90 de 2009-, para después "crecer en 2012 y 2013" hasta alcanzar los 100 millones de dólares, con inversiones "a largo plazo" garantizadas.

Así lo ha señalado el director general de Europa Occidental de la multinacional canadiense, Manuel Ruiz, tras la visita realizada a la planta por el presidente y CEO de Celestica, Craig Muhlhauser, junto al presidente de la Generalitat, Francisco Camps, el vicepresidente primero y conseller de Industria, Vicente Rambla, y la alcaldesa de La Pobla de Vallbona, María del Carmen Contelles.

En su intervención, Muhlhauser ha agradecido a los responsables de su filial española el "esfuerzo muy importante" que han realizado en los últimos 18 meses para culminar la primera fase del plan de transformación de la planta, que ha incluido la reducción de sus instalaciones de 40.000 a 10.000 metros cuadrados y la aplicación de un Expediente de Regulación de Empleo (ERE) con 290 afectados. En la actualidad, posee una plantilla de 320 empleados fijos.

Celestica ha invertido cinco millones de euros para llevar a cabo el equipamiento y traslado a ese nuevo edificio de menores dimensiones, así como para crear dos nuevas líneas de producción y realizar mejoras tecnológicas en su software de gestión.

El presidente de la compañía ha ratificado que su objetivo es "incrementar las inversiones en Europa, especialmente en España", y ha recalcado que su esfuerzo inversor en la planta valenciana "será a largo plazo" para afianzarse como "un centro de excelencia en materia de salud, aeroespacial, defensa y electromedicina". "Pueden contar con nosotros como un compañero a largo plazo en España", ha dicho.

Ruiz, hasta ahora director general de la planta, ha constatado que "se han cumplido los hitos marcados hace año y medio", con lo que ha "vuelto a números negros en los primeros nueve meses de 2010" y ha "cumplido los objetivos de beneficios", hasta situarse nuevamente en sus márgenes tradicionales de "entre un 3 y un 5 por ciento".

Así, afronta el cuarto trimestre y el inicio de 2011 "de manera razonable" tras detectar "cierta recuperación de la demanda" en sus sectores estratégicos: aeroespacial y defensa; salud y medicina; y servicios de ingeniería, venta de prototipos y codiseño.

De cara al futuro, prevé que el sector aeroespacial y defensa suponga "entre el 50 y el 60 por ciento del negocio", con clientes como Airbus, y la división de salud "entre un 20 y un 25 por ciento", con Roche como principal comprador. El porcentaje de negocio restante se repartirá entre sus servicios de ingeniería y codiseño, y el mantenimiento de su actividad de reparación y de los servicios que presta a "clientes históricos" de telecomunicaciones e industriales.

Según ha explicado, la planta valenciana va a "centrarse en lo que se puede fabricar aquí", en nichos de mercado "donde el coste no es la única razón del negocio", mientras traslada la fabricación de productos de gran volumen a "fábricas hermanas" de mayor capacidad y menores costes de producción en países como Rumanía o Tailandia.

Además, la compañía estudia poner a la venta algunos activos fijos como los terrenos y el edificio que ocupaba anteriormente en las mismas instalaciones La Pobla de Vallbona, donde posee un solar de 280.000 metros cuadrados, aunque descarta "malvender" porque "no tiene necesidad de hacer caja".

COLABORACIÓN ENTRE GOBIERNO E INDUSTRIA

Por otro lado, Craig Muhlhauser ha valorado la "colaboración esencial" que mantienen con el Gobierno valenciano y ha abogado por "seguir trabajando juntos para construir lo que puede ser un ejemplo puntero a nivel mundial de lo que gobiernos e industria deben hacer conjuntamente en el futuro".

En este sentido, Francisco Camps ha ratificado que "la Generalitat está dispuesta a apoyar cualquier iniciativa empresarial para seguir desarrollando prosperidad y empleo en nuestra comunidad" y ha subrayado que Celestica constituye "una muestra excepcional de que podemos seguir fabricando al máximo nivel".

Camps ha valorado el importante significado de la apuesta de Celestica por crear empleo y realizar inversiones de futuro en el actual contexto, que le permiten "poder convertirse en un elemento tractor para otras empresas que, alrededor de esta empresa, puedan constituir un auténtico 'hub' de producción de alta tecnología".

Así, ha defendido que "la industria espacial, la sanidad y otro tipo de industrias que tienen una relación directa con la alta tecnología" instan a las administraciones públicas a "seguir creyendo en las posibilidades industriales" de la Comunitat, España y Europa, y a "intentar fabricar nosotros nuestras propias ideas".

"EJEMPLO DE NO BAJAR LOS BRAZOS"

"Celestica es un ejemplo de no haber bajado los brazos ante otro tipo de países o lugares en el planeta que pueden estar fabricando en estos momentos en otras condiciones", ha subrayado Camps, quien ha insistido en que la Comunitat posee "capacidad suficiente para ser competitivos" porque está en el mercado y tiene "a la mejor gente y la mejor disposición para que este tipo de industrias continúen realizando sus proyectos" en su territorio.