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MADRID (VP/EP). La vicepresidenta segunda y ministra de Economía y Hacienda, Elena Salgado, ha admitido que España tiene aún "malos" datos de paro, pero ha indicado que en 2011 habrá menos paro que en 2010 y que es preciso esperar para ver los resultados de la reforma laboral, ya que no está concebida para dar frutos "al día siguiente".

Salgado, que valoró de esta manera el aumento del paro y de la temporalidad en septiembre, señaló que la recuperación del empleo está siendo "más lenta" de lo que le gustaría al Gobierno, pero insistió en que, a pesar de que el Ejecutivo ha empeorado las cifras del paro para este año, en 2011 prevé una mejora en la creación de empleo.

La titular de Economía indicó, en declaraciones a Televisión Española, que el Gobierno nunca pensó que la reforma laboral diera fruto "al día siguiente" de su aprobación, por lo que apuntó que es preciso darle "un poco de tiempo". "No es algo que produzca resultados de la noche a la mañana, pero va en el buen camino", resaltó.

En este sentido, afirmó que es una reforma "para el medio y largo plazo" y, por ello, indicó que en 2011 el Gobierno prevé que el paro comience a disminuir en términos interanuales como consecuencia tanto de la mejora de la actividad como de la reforma laboral. "En 2011 habrá menos paro que en 2010", reiteró.

Sobre la posibilidad de ampliar la prórroga de los 420 euros para los desempleados que hayan agotado su prestación, que concluye el próximo mes de febrero, Salgado afirmó que esta prestación siempre ha tenido vocación de "temporalidad" y añadió que el Gobierno ya la ha prorrogado dos veces.

EN FEBRERO SE DECIDIRÁ SOBRE LOS 420 EUROS

"Nuestras prestaciones por desempleo consumen una parte importante de nuestro presupuesto y si podemos dedicar estas prestaciones a otras cosas, sería mejor, pero (su prórroga) lo veremos en febrero", indicó Salgado, tras señalar que no contempla un "cataclismo social" si finalmente no se prorroga la ayuda tal y como ha dicho el secretario general de CC.OO., Ignacio Fernández Toxo. "Esas palabras están fuera de lugar", agregó.

En cuanto a la recuperación del diálogo social con los sindicatos, la ministra aseguró que queda margen en los reglamentos de la reforma laboral para buscar la colaboración de las centrales sindicales, no así en los Presupuestos para 2011 que, según dijo, están "muy cerrados" y cuentan con "muy poco margen".

En materia de pensiones, volvió a defender la necesidad de atrasar a los 67 años la edad de jubilación y, como ejemplo, indicó que en 2011 se destinarán 112.000 millones al pago de las pensiones y en 2004 se dedicaban 74.000 millones, por lo que el gasto en pensiones ha subido un 50% en estos años.

"¿Alguien piensa que esta dinámica es sostenible en el tiempo?", se preguntó Salgado, que indicó que en este momento la Seguridad Social no tiene ningún problema, pero que dentro de 15 ó 20 años si ahora no se hace nada, sí surgirán dificultades. "Un gobernante responsable tiene que hacer algo, aunque no va a ser este gobierno, probablemente ni el siguiente ni el siguiente, quienes tengan este problema", añadió.

RETRASAR LA EDAD DE JUBILACIÓN

En este sentido, confió en que los sindicatos "tomen conciencia del problema" y emplazó al Pacto de Toledo a emitir su informe, que servirá de base a la propuesta del Gobierno, aunque reiteró que la opción del Ejecutivo es retrasar la edad de jubilación a 67 años y afirmó que es "la mejor opción".

En cuanto a la evolución de la economía española, la titular de Economía defendió la previsión de crecimiento del PIB para 2011 (1,3%) y basó la estimación, más optimista que el consenso del mercado, en que tanto las exportaciones como el consumo seguirán creciendo el próximo año.

Aunque reconoció que la situación económica es todavía "muy difícil", destacó algunos "síntomas de mejoría", como la reducción del déficit, la mejora de la recaudación, la "desaceleración" de las cifras del paro o el mayor crecimiento del PIB en el segundo trimestre respecto al primero.

Por todo ello, defendió en plan de ajuste aprobado por el Gobierno y añadió que, a pesar de que pueda retrasar la recuperación económica como sostienen algunos economistas, los mercados penalizan más el déficit que el menor crecimiento. Con todo, indicó que España tendrá que pagar el próximo año 4.000 millones de euros adicionales por intereses de la deuda, a pesar de reducir el déficit al 6%.

Sobre la posibilidad de incrementar todos los tramos del IRPF para conseguir mayor recaudación, Salgado afirmó que no es una posibilidad que contemple el Gobierno porque cree que no es necesario, ya que el déficit va según lo previsto.

Finalmente, en cuanto a la salida de Celestino Corbacho del Gobierno, aseguró que ha sido un "excelente" ministro de Trabajo y afirmó que está "absolutamente descartado" que ella vaya a asumir sus competencias. "Yo tengo suficiente con lo que tengo y no necesito más tarea", concluyó.