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BRUSELAS (VP/EFE). La Comisión Europea va a proponer un recorte del 0,4% en el salario de los funcionarios comunitarios para 2011, lo que se sumará al 2,4% de subida prevista del coste de la vida en Bruselas para este año.

El recorte es consecuencia de las reducciones de salarios de los funcionarios nacionales aplicadas en 2010 en varios países comunitarios dentro de las medidas de ajuste fiscal decididas por los Estados miembros para afrontar la crisis. En España, el recorte de los salarios de los funcionarios fue del 5% a partir de julio pasado, que irá seguido de una congelación durante 2011.

La CE calcula que los salarios de los trabajadores de la UE sufrieron un recorte neto del 6% entre el período 2004-2010 como consecuencia de la aplicación del mecanismo de adaptación salarial introducido en 2004, según indicó ayer.

Los salarios de los funcionarios comunitarios se establecen según un mecanismo que los calcula en función de los salarios de los funcionarios nacionales de ocho países comunitarios (Alemania, Francia, Reino Unido, Italia, España, Holanda, Bélgica y Luxemburgo), que juntos totalizan el 76% del PIB de la Unión.

Dado que varios de esos países han aprobado recortes o congelaciones de salarios de sus funcionarios, estos recortes afectarán a los trabajadores de la UE.

"Estas reglas no dan ninguna posibilidad a la Comisión o al Consejo para aplicar otros criterios", según señaló la CE, que insistió en que "cuando los salarios de los funcionarios nacionales bajan, los funcionarios europeos sufren igualmente las consecuencias". Sin embargo, el sistema se aplica con un año de retraso, a fin de permitir el cálculo de los cambios en los funcionarios salariales.

El año pasado, por ejemplo, la Comisión propuso aumentar el salario de los eurofuncionarios un 3,7%, lo que le valió fuertes críticas de algunos países miembros afectados por la crisis. Finalmente, el Consejo acordó un incremento de exactamente la mitad (1,85%), lo que fue recurrido por la CE y la Eurocámara ante el Tribunal de Justicia comunitario al considerar que los Veintisiete no habían respetado las normas comunitarias.

La audiencia de este caso está prevista para diciembre próximo en Luxemburgo y la sentencia debería ser emitida durante el primer semestre del año próximo