Dos ingenieros desarrollan una plataforma para desarrolladores de plataformas y aplicaciones
VALENCIA (A. MOHORTE) Cuando el negocio es la generación de negocio. Los ingenieros Luis Picurelli y Héctor Badal decidieron dejar sus empleos y jugársela en un proyecto que da una nueva vuelta de tuerca al negocio de las startups. Si la generación de plataformas y aplicaciones móviles va a más, ser intermediador entre empresas y desarrolladores es un nicho en sí mismo.
Su plataforma, Yeeply, ofrece a las compañías un espacio para exponer sus proyectos y necesidades para que los informáticos inscritos en el sistema puedan valorarlas y proponerse para sacarlos adelante. "Nuestra fuerza es la especialización", reconoce Badal.
Aunque plataformas de empleo y servicios hay muchas, centrarse en este tipo de actividad les da un valor diferencial que el resto de la competencia no tiene. Actualmente, el negocio de las aplicaciones para móvil o app mueve en el mundo unos 25.000 millones de dólares, pero se prevé que en 2015 esta cantidad alcance los 100.000 millones, asegura Picurelli.
EL VALOR DE INTERMEDIACIÓN
El valor añadido que aporta Yeeply es tanto el asesoramiento a la empresa de lo que necesita o cómo solicitarlo como garantizar que los desarrolladores inscritos sean buenos profesionales, contando con un juego de recompensas que certifica la satisfacción de clientes anteriores.
Por otra parte, los propios desarrolladores disponen de ofertas de proyectos y tienen la garantía de que la empresa es sería, como ha de demostrar al pagar a Yeeply por adelantado una fianza que será remitida al desarrollador cuando el trabajo se realice y la empresa lo valide.
Yeeply cobra al desarrollador un 10% de la retribución que reciba por el proyecto, ya que es éste quien pone el precio. Por otra parte, se plantea a medio plazo ofrecer también a las empresas servicios complementarios como destacar su oferta o ejercer de project manager con lo que también ingresar por ese extremo de la cadena.
UNA IDEA RECONOCIDA POR LOS INVERSORES
Aunque iniciaron su andadura de su propio bolsillo, dos años más tarde ya han acumulado aportaciones y visibilidad ante los inversores gracias a su participación en el programa de aceleración de Plug and Play en Valencia y los premios Bancaja Emprendedores y EmprendedorXXI de La Caixa.
En el caso de Picurelli, esta es su primera experiencia emprendedora después de siete años en Francis y Estados Unidos como ingeniero de Telecomunicación y Master en Negocios, pero no dudó a la hora de recurrir a Héctol Badal para Yeeply.
Aunque fueron compañeros de colegio, Badal era un año menor y había estudiado Ingeniería de Caminos y un MBA. Sin embargo, aportaba un empeño emprendedor "innato", ya que desde niño había desarrollado negocios por internet. Una cena bastó para ponerse de acuerdo y embarcarse juntos en esta aventura.
Actualmente no hay comentarios para esta noticia.
Si quieres dejarnos un comentario rellena el siguiente formulario con tu nombre, tu dirección de correo electrónico y tu comentario.
Tu email nunca será publicado o compartido. Los campos con * son obligatorios. Los comentarios deben ser aprobados por el administrador antes de ser publicados.