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VALENCIA. Cuando la maquinaria judicial se pone en marcha, y más en una época como la actual en la que la presión social es tan fuerte, nada parece que la pueda parar. Lo puede decir el expresidente de Caja Madrid, el otrora todopoderoso banquero con amistades en la Moncloa, que pasó la noche del jueves al viernes en la cárcel de Soto del Real después de que un juez decretara su ingreso en prisión por gestión deseleal en la principal entidad de las que formaron Bankia.
La imagen de Blesa puede haberse quedado grabada en más de un exdirigente financiero valenciano y en varios empresarios en la tarde de este jueves cuando se conoció que el juez de la Audiencia Nacional Santiago Pedraz admitió a trámite tres de las siete querellas que tiene interpuestas el Fondo de Reestructuración Ordenada Bancaria (FROB) por la mala gestión intencionada en Banco de Valencia.
Las siete denuncias presentadas por el Estado, dueño del FROB, suponen una enmienda a la totalidad de la actividad que desarrolló Domingo Parra en la última planta del edificio de Banco de Valencia. La base de operaciones que estableció allí el consejero delegado de la histórica entidad, ahora desmantelada (la base y la entidad), sirvió para más que gestionar el banco. De las denuncias que ahora Pedraz va a investigar se destilan actividades supuestamente ilícitas que provocaron un quebranto para el banco, estimado en 500 millones de euros, y un beneficio para quienes en ellas participaron.
Parra, que dominó ese entramado con habilidad, ha quedado al descubierto, y con él parte de la cúpula de Banco de Valencia así como ilustres apellidos del ladrillo local, fundamentalmente, ahora imputados y obligados en breve a tener que desfilar por la concurrida puerta de la Audiencia Nacional con un abogado de escudero.
En tres autos que dictó Pedraz este jueves, se admitieron a trámite tres de las siete querellas interpuestas por el FROB el pasado mes de febrero por gestión desleal contra los exresponsables del banco valenciano y varios empresarios, la mayoría constructores.
La primera va dirigida contra el ex consejero delegado Domingo Parra, el director de participaciones inmobiliarias del banco, Alfonso Monferrer, y los empresarios Salvador Vila, Juan Bautista Soler Luján, Fernando Polanco, el notario Carlos Pascual y Teresa Villalba, a los que imputa tres delitos de apropiación indebida o, alternativamente, tres de administración desleal.
También contra las sociedades Salvador Vila S.L., Urbanas de Levante y Faverch Desarrollos como responsables civiles subsidiarios.
En otra, el juez imputa tres delitos de apropiación indebida a Parra, Monferrer y Bartolomé Cursach, y señala como responsables civiles a las sociedades Intrademallorca 2005, Magainver, Calviá Parc y Tito's.
Por último, en el tercero de los autos, el magistrado requiere al Juzgado número 17 de Madrid lo investigado sobre un préstamo de 312 millones a Construcciones Valencia Constituciones S.L., destinado a la compra de acciones de Metrovacesa, ya que es la misma operación que denunció el FROB en una de sus acciones penales, que es la tercera que admite a trámite.
Así, Pedraz rechaza la petición del empresario Rafael Ruiz-Jarabo para que fuera el juzgado madrileño el que lo instruyera, y queda finalmente imputado por la Audiencia Nacional junto al expresidente de Metrovacesa Joaquín Rivero y Domingo Parra por falsedad en documento mercantil, tentativa de estafa y apropiación indebida.
Mientras, el promotor Juan Bautista Soler Crespo aparece como partícipe a título lucrativo. Según el magistrado, la financiación aparece como concedida a Arlette Dome S.L. y Sapa S.A., y para ella se habrían utilizado pagarés falsos, en cuya elaboración "podría haber participado" Domingo Parra.
Quedan otras tres querellas en las que el juez tendrá que pronunciarse -especialemente una vinculada a Bcanaja Hábitat en la que consta como denunciado entre otros José Luis Olivas- al tiempo que sigue instruyendo la primera que admitió, la vinculada a Aguas de Valencia. En todas ellas el nexo común es el ex consejero delegado. Todos los hombres de Domingo Parra están bajo sospecha.
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