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CASTELLÓ. BP Oil en Castellón prevé cerrar el presente ejercicio con unos beneficios de 60 millones de euros, según ha anunciado este miércoles el director de la refinería, Emilio Marín, quien ha asegurado que, además de "ser rentables", los otros objetivos para 2013 son acabar el año con cero accidentes e incidentes, "ya que ponemos la seguridad por delante de todo", ha añadido.

En un almuerzo con los medios de comunicación, Marín ha señalado que la "clave" para conseguir estos beneficios está en "focalizar la atención en la optimización y oportunidades comerciales, incrementadas por las nuevas instalaciones en el Puerto, y buscar continuamente la eficiencia en los trabajos diarios".

Así, ha indicado que, durante los primeros meses de 2013, la refinería ha ido cumpliendo los "hitos previstos", pues "hemos superado con nota excelente la auditoría de seguridad realizada a principios de año por 19 auditores del Grupo BP". Además, ha apuntado que este año "verá la luz la Fundación para la Eficiencia Energética, una fundación en colaboración con la UJI y el Ayuntamiento de Castellón, con la que queremos promover el buen uso de la energía a todos los niveles: institucional, empresarial y de consumo ciudadano".

Por lo que respecta a los proyectos futuros, ha explicado que durante 2013 se iniciará la construcción de una nueva esfera de propileno, "una instalación en la que se invertirán 18 millones de euros y permitirá a la refinería mejorar en seguridad y abrir nuevas oportunidades comerciales".

Respecto a 2012, el director de la refinería ha destacado que ha sido un ejercicio "muy importante", y, en este sentido, se ha referido a la parada programada que se realizó durante los meses de mayo y junio, "con un coste de 55 millones de euros", y a la puesta en marcha el pasado 30 de noviembre de las instalaciones de BP en el Puerto de Castellón, que constan de dos nuevos puntos de atraque y cuya inversión ronda los 60 millones de euros.

Según ha dicho, esta infraestructura "posibilita mayor seguridad, al operar en una zona abrigada, y mejora la disponibilidad de carga y descarga". Asimismo, ha apuntado que se evitan las posibles demoras, fruto de condiciones climatológicas adversas, y se pueden cargar y descargar varios productos al mismo tiempo, así como realizar maniobras de atraque durante la noche. Al respecto, Marín ha anunciado que la plataforma en mar abierto dejó de funcionar el 1 de marzo y será desmantelada.

RESULTADOS

En cuanto a los resultados, la refinería de BP en Castellón cerró el ejercicio de 2012 con 5,31 millones de euros de pérdidas, "unos resultados positivos", tal y como ha indicado Emilio Marín, "ya que las previsiones con las que se trabajaba eran de pérdidas superiores debido a los costes de la parada general". Así, ha resaltado que en la primera mitad del año las pérdidas fueron las establecidas en el plan, mientras que en la segunda, tras la parada general, se lograron superar todas las previsiones, con unos beneficios en ese semestre de 58,48 millones de euros, "que compensan casi todas las pérdidas a final de año".

En esta línea, ha manifestado que uno de los "pilares" de este cierre de año han sido los "excelentes" resultados operativos de la planta por lo que se refiere a sus niveles de utilización, disponibilidad y eficiencia energética. Por otra parte, las medidas de eficiencia puestas en marcha, así como las ideas proporcionadas por los empleados, y posteriormente implantadas por la compañía, han supuesto una aportación adicional a los resultados de 12,30 millones de euros.

Por otra parte, Marín se ha quejado del nuevo impuesto de la Generalitat Valenciana que grava el almacenamiento de crudo y que supondrá un desembolso para la refinería de 800.000 euros anuales.

Preguntado por los accesos ferroviarios al Puerto de Castellón, el director de la refinería ha afirmado que "a nosotros nos da igual la opción, lo que hemos alegado es que preferimos que la vía se pegue lo máximo posible a la carretera y que la estación intermodal se ubique al sur de la refinería, pero no en nuestros terrenos".