VALENCIA. Hará falta tiempo para lograr discernir si el órdago reivindicativo lanzado este miércoles por el presidente de la Generalitat, Alberto Fabra, se mantiene en los próximos meses o se queda en flor de un día. Exigir en Madrid, junto a Ignacio González, una reunión inmediata del Consejo de Política Fiscal y Financiera (CPFF) para abordar la reforma del sistema de financiación es, con mucho, la reclamación más visible que el jefe del Consell ha realizado en público frente a la línea discursiva del Gobierno central.
Fuentes de la Generalitat aseguraron a este diario que el incremento del tono reivindicativo del presidente no será un ‘brindis al sol'. De hecho, dentro del cambio de estrategia que se viene estudiando, se baraja incluir el argumento de la deuda histórica para tratar de sacar rédito ante el ministro de Hacienda, Cristóbal Montoro. Este argumento, que fue utilizado por el propio Fabra al inicio de su mandato, fue abandonado posteriormente con la llegada de Mariano Rajoy al poder.
Sin embargo, este argumento ha sido recuperado por algunos históricos del PP en fechas señaladas, como Juan Cotino, quien lo reclamó con vehemencia en el Fórum Europa Tribuna Mediterránea celebrado semanas atrás. La primera acogida de estas palabras, la hizo el portavoz del PP en Les Corts, Jorge Bellver, quien navegó entre dos aguas: "Puede ser una solución, pero la reforma del sistema de financiación es la más importante y sostenible".
La realidad es que la estrategia está sobre la mesa. El propio conseller de Hacienda, Juan Carlos Moragues, preguntado por ello en una entrevista al diario Las Provincias el pasado fin de semana sobre si se incluiría también la deuda histórica entre las reivindicaciones valencianas, respondía así: "Lo estamos poniendo en valor porque hay un perjuicio pasado. Aunque lleguemos a un escenario de financiación justa, habrá que reconocer la injusticia retrospectiva".
Si bien las fuentes consultadas por este diario anteponen a cualquier reivindicación a la reforma del sistema de financiación, también admiten que, en un segundo paso, se contemplaría la posibilidad de exigir algún tipo de compensación por ejemplo, sobre las deudas contraídas con el Estado.
Cabe recordar que, según el informe del Instituto Valenciano de Investigaciones Económicas (Ivie) encargado por la Asociación Valenciana de Empresarios (AVE), si la financiación entre 2002 y 2009 hubiera sido igual a la media de las comunidades autónomas de régimen común, el endeudamiento sería inferior en 7.781 millones de euros.
TRAS EL DATO DEL DÉFICIT, IMPERA UN CAMBIO DE ESTRATEGIA
Tras hacerse público el nefasto dato del déficit (3,45%), 1,9% por encima del objetivo marcado y la cifra más alta de todas las comunidades autónomas, impera en el Consell la necesidad de un cambio de estrategia.
Pese a los esfuerzos y recortes de la Generalitat durante el pasado ejercicio, que el propio Cristóbal Montoro apuntó a incrementar tras conocer la cifra del déficit, el Gobierno valenciano tiene prácticamente imposible alcanzar la siguiente exigencia del Ministerio de Hacienda: dejar el citado déficit en el 0,7% en el presente ejercicio.
Resulta evidente que el Consell de Fabra necesita una reforma del sistema que entre en vigor en 2014 y le permita realizar unos presupuestos realistas para, en definitiva, tener algún opción plausible de conseguir cierto equilibrio económico.
Además, en el apartado de estrategia política, el Consell tiene que reforzar su discurso reivindicativo en materia de financiación para no ser una víctima propiciatoria para la oposición, que la viene exigiendo reiteradamente sin complejos.
Logre o no provocar la reforma del sistema en 2013 -parece difícil-, elevar el tono ante Madrid es una de las pocas salidas que tiene el Gobierno de Alberto Fabra, una estrategia que avalan dirigentes como el líder provincial del PP y presidente de la Diputación de Valencia, Alfonso Rus, o el vicepresidente del Consell, José Císcar. Y, a esta reivindicación, es posible que se sume como argumento a esgrimir la infrafinanciación histórica que viene arrastrando la Generalitat. Un argumento que, si bien no justifica -ni mucho menos- todos las penurias económicas que atraviesa el Consell de Fabra, sí evidencia el trato injusto que durante años ha recibido la Comunitat Valenciana por los diferentes gobiernos que han pasado por La Moncloa.
Actualmente no hay comentarios para esta noticia.
Si quieres dejarnos un comentario rellena el siguiente formulario con tu nombre, tu dirección de correo electrónico y tu comentario.
Tu email nunca será publicado o compartido. Los campos con * son obligatorios. Los comentarios deben ser aprobados por el administrador antes de ser publicados.