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MADRID. La Sociedad de Gestión de Activos Inmobiliarios procedentes de la Reestructuración Bancaria (Sareb) ha sacado un pliego para pedir una segunda valoración de sus activos inmobiliarios. Este concurso demanda consorcios liderados por bufetes de abogados a los que se sumarían auditoras, consultores inmobiliarios y técnicos informáticos con el fin de asegurarse de que la documentación de los activos es la correcta.

"No es una valoración final, es verificar todo lo que tienen". Así lo ha explicado uno de los presidentes de Aguirre Newman, Santiago Aguirre, en la presentación de la Asociación de Consultoras Inmobiliarias (ACI). Esta decisión cuestionaría la valoración que hizo Oliver Wyman sobre la solvencia de la banca española, al menos en la parte que afectaba a sus activos inmobiliarios de riesgo. Como se recordará, la discrecionalidad de la valoración fue muy cuestionada desde algunos sectores financieros. 

El pliego divide los activos en dos grupos. El primero recoge el 40% del valor de los inmuebles y el resto de activos iría en el segundo. El primero consistiría en un análisis más completo y en el otro se contempla la posibilidad de que el análisis no sea tan exhaustivo.

Según explicaba, el tiempo de análisis del primer grupo sería de 12 semanas y el del segundo, antes de julio, aunque no quiso asegurarlo del todo. Serían unos 100.000 millones de euros el valor de los activos de la Sareb que tendrían que corroborar, unos 145.000 activos.

Estos grupos de profesionales realizarán una profunda 'due diligence' de todos los activos, desde su valoración exacta hasta la verificación de su documentación y su situación legal. El objetivo final de la entidad que preside Belén Romana es "disponer cuanto antes de toda la información necesaria de su cartera para estar en disposición de poder vender después los activos", según indican desde ACI.

Aguirre ha apuntado a que el valor de este contrato no tiene determinado un precio todavía. Los consorcios tendrán que ser constituidos por las empresas. Desde Aguirre Newman se ha confirmado la puja por los dos paquetes, ya que no se tiene claro si un mismo consorcio podrá optar a ambas tareas. No se descarta la opción de que sean varios los que realicen esta actividad, es más, Aguirre mencionó la posibilidad de que trabajaran gran parte de los despachos de abogados.

No obstante, el director de Knight Frank España, Alberto Prieto quiso restarle importancia a la decisión tomada desde la Sareb. "Hace lo que haría cualquier fondo que compra un gran paquete, quieren saber todo lo que les han ido transfiriendo". Aguirre apuntó a que no está determinada la fecha de resolución del pliego y las cuatro empresas fundadoras de la ACI, Aguirrre Newman, Jones Lang Lasalle, Frank Knigt y CBRE, presentarán sus propuestas por separado.

Desde el punto de vista de la asociación, la Sareb está actuando de una manera muy profesional. El objetivo final de la entidad es "disponer cuanto antes de toda la información necesaria de su cartera para estar en disposición de poder vender después los activos" indican.