ALICANTE (EP/VP). El conseller de Economía, Industria, Turismo y Empleo, Máximo Buch, ha ofrecido este sábado "un excelente entorno de infraestructuras y servicios" a las empresas catalanas interesadas en trasladar su producción a la Comunitat. "Nos ponemos a su disposición, igual que de cualquier empresa de cualquier lugar del mundo o de España que quiera mover su producción". "Aquí será bien recibida", ha garantizado.
Así lo ha señalado en declaraciones a los periodistas durante su visita la empresa Dicarcono de Ibi (Alicante), a preguntas acerca del ofrecimiento que realizó Alberto Fabra a aquellas personas o empresas que ven "dudas, incertidumbres en la falta de estabilidad política en Cataluña", para que contemplen la Comunitat como "una oportunidad".
Buch sostiene que una de las actividades de su departamento es "la atracción de inversión para la Comunitat Valenciana" y que, para lograrlo, cuentan con "más de cuatro millones de metros cuadrados de suelo disponible que se puede ofrecer en condiciones muy buenas".
Ha valorado, en este sentido, que esta autonomía "cuenta con un entorno industrial y de infraestructuras muy favorable para la inversión" y que, para el Consell, "cualquier empresa que se plantee trasladar su produccion ya sea desde Cataluña o desde otros sitios de España, o desde el extranjero, es bienvenida a la Comunitat".
"Lo que no queremos es que nadie se vaya de aquí, sino que cada vez haya más empresas que apuesten por la Comunitat, y por supuesto, si hay empresas que desde Cataluña se plantean trasladarse, nos ponemos a su disposición, igual que de cualquier empresa de cualquier lugar del mundo o de España que quiera mover su producción", ha sentenciado.
Durante su visita a esta empresa dedicada a la fabricación de productos relacionados con el sector heladero, Buch ha abogado por "fomentar una industria innovadora y con una clara vocación exterior porque son dos ingredientes para crear empleo sostenible".
Así, ha señalado que la Generalitat, "además de destinar las líneas presupuestarias hacia las empresas, tiene que actuar como facilitadora de las necesidades de las empresas y focalizar los incentivos en acciones que tengan aplicación directa en los sectores productivos".
Según ha indicado, el principal objetivo de las medidas de impulso de la Generalitat para reactivar la economía "es mejorar los datos de ocupación y volver a la senda de la creación de empleo para lo que es fundamental tener en cuenta el sector industrial".
LA ÚLTIMA EPA "DA ESPERANZA PARA ESTE AÑO"
Ha aludido, en este punto, a los datos de la EPA del cuarto trimestre y ha subrayado que la Comunitat cerró 2012 "con una clara mejoría respecto al inicio del año lo que nos da esperanza para este año", con una reducción del paro en 1.900 personas en el cuarto trimestre mientras que en España subió en 187.300 parados más.
Buch ha indicado que "el objetivo es lograr que en 2020 la Comunitat esté plenamente internacionalizada y que el peso del sector industrial alcance el 20 por ciento del PIB", para lo que aboga por "promover medidas que ayuden a que las industrias ganen cuotas de mercado en los países emergentes, incentivar a un mayor número de pyme industriales para que apuesten por la innovación y la exportación e impulsar nuevas empresas endógenas que refuercen la salida de la crisis".
Ha valorado, en este sentido, el trabajo que realizan con los agentes sociales y económicos en el marco del Observatorio de la Industria "en una nueva estrategia global con el horizonte 2020 que permita propiciar el desarrollo y creación de empresas globales y competitivas en todos los sectores emergentes y consolidados".
Además, ha remarcado que, en el ámbito industrial, van a "mejorar la productividad, el desarrollo de industrias y servicios basados en el conocimiento, el incremento del tamaño de las empresas, la internacionalización, el aumento del gasto en I+D+i y potenciar el capital humano empresarial, aprovechando al máximo las sinergias mutuas de apoyo entre todas ellas para seguir avanzando".
independientemente de las insuficiencias del Consell y de los problemas reales de una crisis económica e institucional, personalmente me parece refrescante la propuesta y no por un fantasma de anticatalanismo. Al revés. Se acepta la postura del Parlament de Catalunya y a partir de ahí se da la bienvenida al mundo empresarial dentro del marco actual del mercado. Nadie ataca a nadie. En este sentido creo un error meter la politica en el tema. Y hay que ir rompiendo clichés. No se entiende que desde aquí pretendamos dar solución a problemas que se suscitan en Cataluña. Ya se encargan ellos de sacar sus ventajas.
La persistencia de la falta de conocimiento y programa de este Consell son llamativas. Es evidente que vamos a continuar hundiéndonos, porque nadie quiere (ni sabe) dar alternativas. Como la cosa no está ya bastante mal, y como no están ya bastante identificados los responsables de la crisis, agitamos ahora el anticatalanismo (probablemente piensan: “a ver si distraemos al personal de exigir que gobernemos bien”). ¿Es rentable para la sociedad valenciana enfrentarse a una tierra vecina, con tantas afinidades y con tantas inversiones aquí? Si queremos que los de fuera trasladen su producción aquí, habremos de ser mejores: más competitivos en costes, infraestructuras, educación, gestión…y buen gobierno. Si eso no se consigue, no me parece que agitar “banderitas” sea muy rentable o inteligente. Además parecen no darse cuenta de que Catalunya, pese al silencio público de la mayoría de los valencianos, despierta grandes simpatías aquí. Por favor, dejen de engañar (o de mostrar púbicamente su ignorancia). Los ciudadanos catalanes no dejarán nunca de ser ciudadanos de la Unión Europea (salvo que así lo decidan ellos), y las empresas catalanas (como todas), tendrán la “nacionalidad” que ellas quieran. A un ciudadano europeo no le puedes privar de esa nacionalidad común. Ya sé que es una cuestión controvertida, pero admito apuestas al respecto. En cualquier caso, por imperativos geográficos, y pese a decenios de dificultarlo desde los poderes establecidos, el camino natural de la ribera mediterránea española hacia y desde el norte de Europa pasa por Catalunya.
me parece genial. Una respuesta positiva y desdramatizada a una agresiva bateria de ensoñaciones secesionistas.
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