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VALENCIA (EP). El precio de la vivienda en Valencia y provincia cayó un 10 por ciento en 2012 y se sitúan ya en niveles de 2004, y se prevé que este ejercicio siga bajando sobre un 7 por ciento, aunque el descenso dependerá "mucho" de la política de descuentos que se aplique en el banco malo.

Así, lo han puesto de manifiesto este viernes el presidente del Colegio Oficial de los Agentes de la Propiedad Inmobiliaria de Valencia, Juan José Piquer, y el portavoz, Vicente Beltrán, en rueda de prensa para informar sobre el precio y evolución de la vivienda en 2012.

Del mismo modo, el precio del alquiler también ha bajado un 5,73 por ciento en la capital y un 3,56 por ciento en la provincia. No obstante, donde los precios han caído "estrepitosamente", un 40 por ciento respecto a 2007, es en los locales, a excepción de los céntricos de Valencia, que "aguantan mejor" la caída pese a que "prácticamente todos han renegociados" los contratos.

El portavoz del Colegio Oficial de los Agentes de la Propiedad Inmobiliaria de Valencia, Vicente Beltrán, ha explicado que los descensos de los precios continuarán mientras "se mantenga la situación de paro, las dificultades de acceso a los créditos y la cuantía que los bancos concede".

Sin embargo, la caída de precios dependerá "mucho" de la política que se aplique al conocido banco malo ya que si se comercializa a particulares el descenso de precios se verá notará "directamente", mientras que si se opta por fondos o entidades de inversión "se produciría un retraso en la bajada hasta que los inmuebles llegasen al usuario final".

Además, ha puesto de manifiesto que la política de descuentos de precios del banco malo "no se encuentra definida" ya que ha recordado que si el ministro de Economía, Luis de Guindos, apostaba hace unas semanas porque las primera operaciones del mes de enero podrían alcanzar hasta el 80 por ciento, la presidenta de la Serab, Belén Romana, se descantaba por no realizar bajadas bruscas.

Asimismo, ha vaticinado que este descenso de precios será más evidente a partir del segundo trimestre ya que en el primero la compraventa de viviendas experimentará "un parón" por el fin de la desgravación fiscal con lo que "los propietarios que quieran vender tendrán que optar por una rebaja".

Pese a todo, "se muestran optimistas a corto plazo" ya que los precios de la vivienda en la Comunidad Valenciana están resultando "muy atractivos" para muchos ciudadanos europeos, principalmente de británicos, daneses y noruegos, aunque en los últimos años ha crecido un 14 por ciento las ventas entre ciudadanos rusos y también entre magrebíes. De hecho, en la actualidad el 24 por ciento de las ventas de inmuebles extranjeros en España se producen en la Comunitat.

DIFERENCIAS POR BARRIOS

Beltrán ha apuntado que la bajada de precios ha dependido mucho en la ciudad de la zona ya que si en barrios "marginales" han experimentado un gran descenso, los pisos del centro y los de zonas nuevas como la Ciudad de las Artes se han mantenido.

De este modo, la zona con el precio medio por metro cuadrado más caro es el Ensanche-Gran Vía con 3.218 euros, mientras que Patraix-Olivereta cuenta con el más barato con 1.622 euros. En la provincia el precio bajó un 12,56 por ciento. El más caro es Alboraya con 2.819 euros metro cuadrado y el más barato se registra en localidades como Requena con 878 euros y la zona de Canal de Navarrés con 797.

Por su parte, en los últimos años el mercado del alquiler ha experimentado un crecimiento ya que se ha pasado del 10 por ciento de hogares que vivían con esta modalidad al 17 por ciento ante la inseguridad laboral, la escasez de crédito y el coste de las hipotecas.

Sin embargo, los precios también han bajado porque la oferta aún ha crecido más ante las "pocas expectativas" de venta de los propietario y el aumento del coste de mantener una vivienda. Así, el precio medio se sitúa en 6,22 euros metro cuadrado en Valencia y 5 euros en la provincia.