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 La crisis retrae al capital español disponible para sustituir a Bankia en Iberia y más ahora que la ministra de Fomento ha pedido a los grandes constructores españoles (ACS, Ferrovial, FCC, Acciona, Sacyr y OHL) que acudan a la privatización de Aena. Los sindicatos temen que lBeria "sea engullida· por British Airways

VALENCIA. La confirmación esta misma semana por parte del presidente de BKA-Bankia, José Ignacio Goirigolzarri, en la presentación de su plan 2012/2015 para la entidad, de que Bruselas ha impuesto al grupo financiero la venta de sus acciones en IAG por haber recibido ayudas públicas, puede poner en peligro la 'españolidad' de Iberia.

Estas son las conclusiones de varios analistas financieros consultados por ValenciaPlaza.com y también se manifestaron en el mismo sentido los sindicatos de la aerolínea en su reciente convocatoria de paros a partir del próximo 14 de diciembre. El Gobierno hasta la fecha no se ha 'mojado' en este asunto, aunque tendrá que hacerlo en breve. De momento se limita a apelar al diálogo.

Los analista temen que la actual debilidad económica del mayor accionista de Iberia, BFA-Bankia, con un 12% del capital, pueda representar a medio plazo el fin de la españolidad de Iberia ya que en estos momentos, a menos que el Gobierno intervenga o ayude en la búsqueda de los socios para sustituir a BFA-Bankia, no parece fácil que haya mucho capital español dispuesto a afrontar una inversión de estas características en estos momentos de crisis y dada la situación de Iberia.

Los bancos no están para estas aventuras, ni parece que haya ahora capital riesgo disponible como ha sucedido en otras ocasiones, añaden las fuentes, que destacan con que se da la casualidad de que el poco capital español que podría haber disponible, pese a su alto grado de endeudamiento, como son las grandes constructoras españolas (ACS, Ferrovial, FCC, Acciona, Sacyr, y OHL, entre otras) ha sido convocado por la ministra de Fomento Ana Pastor esta misma semana en una reunión en Seopan para que participen, si pueden, en la privatización de los aeropuertos españoles integrados en AENA.

Los sindicatos añaden que la posible pérdida del equilibrio en el holding IAG que forman el grupo español y la británica British Airways (BA), supondría dar unas facilidades al socio británico para que pueda hacerse con un mayor control. Las centrales llevan meses diciendo que BA está siendo la beneficiada de la fusión en detrimento de Iberia, sobre todo en rutas, lo que rechaza totalmente la dirección de la aerolínea española.

Aunque el canje fijado en el acuerdo alcanzado en noviembre de 2010 concedía el 45% del capital a los dueños de Iberia y el 55% a los de British Airways, el mayor accionista de la compañía es Bankia con el 12% del capital. El Corte Inglés controla casi el 2% y el organismo público SEPI también mantiene una participación cercana al 3%, mientras que los grandes inversores británicos son fondos que no participan en la gestión como BlackRocks, Templeton o Schoeders, entre otros.

Retirada de depósitos

Una prueba de la inestabilidad de Bankia es que hace ya meses que Iberia retiró de entidades financieras españolas, entre ellas de su accionista Bankia, cientos de millones de euros, que algunas fuentes evalúan en torno a los 500, depositándolos en entidades extranjeras para limitar el riesgo de la banca española.

No obstante, la dirección de Iberia con su consejero delegado, Rafael Sánchez Lozano, que está multiplicando sus apariciones en medios, han explicado el acuerdo con BA es firme y se está ratificando cada día. Asimismo, niegan que la actual coyuntura económica del grupo que les fuerza al plan de ajustes a negociar con los sindicatos tenga nada que ver con sus relaciones con British en el seno de International Airlines Group (IAG), caificadas de excelentes.

Iberia ratifica que su plan de futuro, aunque requiera sacrificios, se está planteando para hacer un grupo rentable y salvar los 15.500 puestos de trabajo estimados para la "plantilla necesaria", ante pérdidas insostenibles de un millón de euros diarios durante los primeros nueve meses de este año y casi 900 millones en los últimos cuatro años, por la mala coyuntura económica (crisis, precios combustibles, etc) y la rigidez de algunos de sus convenios, sobre todo los de vuelo.

Entrevistas con Ana Pastor

Los sindicatos de Iberia se han entrevistado con la ministra de Fomento, Ana Pastor, para pedirla que actúe y no deje que la aerolínea nacional sea engullida por la británica y el Gobierno.

Pero hasta la fecha, tanto Pastor como otros miembros del Ejecutivo se han limitado a declaraciones apelando a la seriedad y a que entre la empresa y sindicatos sean capaces de alcanzar un acuerdo que impida huelgas salvajes de los sindicatos tomando como rehenes a toda la sociedad española y que pueden afectar al sector turístico nacional, un 11% del PIB español y algo con lo que, a su juicio, no se puede jugar nunca. Pero de las relaciones con BA no han dicho todavía nada que aguante un titular.