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VALENCIA (EP/VP). El conseller de Economía, Industria y Comercio, Máximo Buch, ha anunciado este martes el desarrollo de un segundo Plan de Incentivos en 2013 dotado con 160 millones de euros, lo que supone un aumento del 3 por ciento respecto al anterior, para apoyar a los sectores productivos de la Comunitat Valenciana.

Así lo ha avanzado en su comparecencia en la Comisión de Economía de las Corts para presentar los presupuestos de su departamento, que caen un 25 por ciento y se sitúan en 131,5 millones de euros. A nivel consolidado, ascienden a 273,8 millones, con lo que el 62 por ciento de las cuentas será gestionado por las entidades públicas que ejecutan las políticas de apoyo directo a las empresas en materia de competitividad y de financiación empresarial.

En concreto, Economía destina 20 millones de euros a personal (-2,8%), 5,1 millones a funcionamiento (-13,8%), 33,5 millones a transferencias corrientes (-59,2%), 260.000 euros a inversiones reales (-45,3%) y 69,1 millones a transferencias de capital, que suben un 10,3 por ciento respecto a 2012. Los activos financieros ascienden a 3,5 millones de euros (-6,7%).

En su intervención, ha destacado que son unos presupuestos "fuertemente condicionados por el actual marco económico recesivo", que "obliga al sector público a actuar con la máxima diligencia y el más absoluto compromiso con los ciudadanos" y a tener "la austeridad, el rigor, la contención del gasto, la utilidad y la eficiencia" como criterios básicos elaborar esas cuentas.

"Pero también es el momento de mirar al futuro y de sentar las bases de un nuevo modelo productivo para los próximos años", ha subrayado Buch, quien centrará sus esfuerzos en llevar a cabo "políticas inteligentes que lleven a mejorar nuestra competitividad, favorecer el empleo y retomar la senda del crecimiento", tales como su sistema de incentivos al sector privado

Del nuevo Plan de Incentivos, dotado con cinco millones más que el anterior, ha destacado que su objetivo vuelve a ser "contribuir a la reactivación económica mediante mejora de la competitividad empresarial", gracias a mejorar la gestión, ajustar prioridades, incrementar el compromiso y participación privada y "valorar la repercusión última de esas ayudas" en términos de "creación de empleo, aumento de exportaciones o actividad innovadora".

Ese programa concentra la mayor parte de las actuaciones de Economía de apoyo a los sectores productivos, con especial énfasis en financiación, y tiene cinco ejes: apoyo a los emprendedores, dotado con 18,2 millones de euros; impulso de la innovación y competitividad -53 millones, 1,6 para modernizar infraestructuras, instalaciones industriales y dotación de servicios en el área industrial de Almussafes (Valencia)-; potenciar la internacionalización empresarial -con un 10,2 millones para incentivos directos, un 18% más, y un recorte del 30% al IVEX--, así como mejorar la eficiencia energética y el acceso de las pyme a financiación.

PROTAGONISMO DE IVACE E IVF Y EXTINCIÓN DEL IVE

Buch ha destacado el papel del Instituto Valenciano de Competitividad Empresarial (Ivace), que "iniciará sus actividades como órgano único gestor de la política industrial de la Generalitat en el próximo año" y tendrá una dotación de 76,8 millones, y del Instituto Valenciano de Finanzas (IVF), que recibe 135,2 millones y reorientará su actividad crediticia "hacia proyectos con valor añadido, especialmente los catalizadores de innovación y emprendimiento".

También ha dado cuentao de la extinción del Instituto Valenciano de Estadística (IVE), que deja de tener personalidad jurídica pero su actividad se mantiene, con más presupuesto, y pasa a ser asumida por la Dirección General de Economía.

En cuanto al sector público empresarial de la Generalitat, la dotación del programa para su planificación y ordenación sube un 15,7 por ciento, hasta 1,83 millones de euros, ya que "a principios de 2013 estará operativa la nueva configuración", que supondrá una reducción de 46 entes desde el inicio de legislatura y un "adelgazamiento de las plantillas del orden del 40 por ciento", de cerca de 3.000 personas, que se ejecutará antes de final de año. Buch ha recordado que esa reestructuración les reportará un ahorro de "entre 12 y 15 millones" por sinergias de integración y de "entre 160 y 200 millones" por optimización de la gestión.

El conseller ha defendido la eficacia de esos presupuestos para "seguir luchando contra la crisis economica, primando apoyo a las empresas", y se ha mostrado convencido de que permitirán alcanzar los objetivos fijados y revalidar los "positivos resultados" de su antecesor.

"HAY DINERO PARA LO QUE SE QUIERE"

Desde la oposición, el socialista Francisco Toledo le ha espetado que "es ya un experto en maquillaje" y que el presupuesto de Economía es "similar" a los 126 millones destinados a proyectos estratégicos, frente a los 72,3 millones para política industrial. "Eso demuestra que hay dinero para lo que se quiere y para los grandes proyectos hay a mansalva", ha subrayado.

También le ha acusado de practicar "terrorismo informativo" con los trabajadores de las empresas públicas al considerar que la reducción será del 22 por ciento, no del 40 por ciento, extremo que ha refutado el conseller: "Le aseguro que va a ser verdad". Buch también ha defendido que "no es maquillaje" y ha valorado el aumento de los fondos para incentivos.

El diputado de Compromís Fran Ferri ha denunciado la "infrafinanciación" de la Comunitat, el contraste entre la puntualidad para pagar la deuda financiera y el resto y entre el "aumento del 124 por ciento respecto a 2011" de esa partida de pago de deuda y los "recortes en áreas clave", e incluso ha pedido una "moratoria" para hacer frente a esos pagos.

En la réplica, Buch ha constatado que el 60 por ciento de la deuda se debe al déficit de financiación estatal, pero ha asegurado que "no hay más remedio" que priorizar la deuda con entidades financieras, aunque ha admitido que él también sería "partidario de no pagarles y pagar otras cosas" si pudiesen "sobrevivir" sin hacerlo.

"NOS LLEVAN A LA RUINA"

Marga Sanz, de EUPV, ha incidido en que esas cuentas dejan al conseller "sin capacidad operativa para salir de la crisis" y "nos llevan a la ruina", al tiempo que ha denunciado que un 70 por ciento del presupuesto anterior quedó pendiente de ejecución. A su juicio, las cuentas presentadas para 2013 constituyen "una barbaridad", al igual que la reestructuración del sector público empresarial, al considerar que algunas de esas mercantiles son "incuestionables".

"Va a ser muy difícil hacer más con tantísimo menos", advierte Sanz, quien critica los recortes del 32,5 por ciento en política industrial y del 50 por ciento en la aportación a la red de institutos tecnológicos de la Comunitat. "Eso es matar la ciencia y a la innovación", ha sentenciado.