VALENCIA. No todo parece estar perdido para Banco de Valencia. Tras suspenderse su subasta este verano a raíz de la crisis de Bankia y la petición a la Unión Europea de un rescate para el sistema financiero español, la situación pintaba especialmente complicada para los bancos nacionalizados, como es el caso de la histórica entidad valenciana. Sin embargo en las últimas semanas se ha abierto una ventana nueva para el futuro de Banco de Valencia.
La creación de un 'banco malo' al que las entidades financieras españolas traspasen todos sus activos tóxicos vinculados al sector inmobiliario ha despertado ciertas expectativas en el mundo financiero local. La idea que está cuajando es que en el caso de desprenderse de todo el lastre del ladrillo, Banco de Valencia sería una entidad solvente y atractiva para sus accionistas.
Este optimismo se aprecia, aunque con matices y prudencia, tanto del entorno de los accionistas históricos del banco como de los actuales gestores de la entidad, los tres administradores nombrados por el Fondo de Reestructuración Ordenada Bancaria (FROB), propietario de más del 90% del capital.
CÓMO FUNCIONARÁ EL 'BANCO MALO'
El 'banco malo', que si nada falla aprobará el Consejo de Ministros del próximo 24 de agosto, será una entidad de nueva creación a la que las entidades financieras españolas traspasarán tanto activos inmobiliarios como inversiones en el sector fallidas o con riesgo de serlo. Todavía no se conocen ni las entidades que estarían obligadas a hacerlo ni qué activos se asumirían (ni a qué coste) por parte del 'banco malo'. Lo que está descartado es que esa función sea asumida por Banco de Valencia, como se especuló hace unos meses.
Aún con todos esos detalles pendientes, lo cierto es que en el entorno financiero valenciano se considera que Banco de Valencia puede ser rentable y viable si no tiene que hacer frente a las fuertes provisiones que obligan unos activos que se van deteriorando con el paso de los meses y a una creciente morosidad. Así, apartados del balance suelo, pisos y créditos fallidos (o en proceso de estarlo), el negocio puramente bancario de la entidad sería positivo.
PROCESO DE VENTA ABIERTO
Este sería, en todo caso, un paso previo para encontrar una solución. Banco de Valencia tiene que ser recapitalizado por las pérdidas que ya tiene acumuladas y que debe afrontar (implica una inyección de más de 1.000 millones de euros que llegarán del fondo de rescate europeo) y después encontrar a un comprador para el capital que esté en propiedad del FROB. La recapitalización, de hecho, implicará una ampliación de ese porcentaje del capital y, por tanto, la dilución de los accionistas históricos.
Según las distintas fuentes consultadas por este periódico, pese a que la subasta quedó en suspenso, los contactos de Banco de Valencia con distintos interesados en el negocio financiero de la entidad no se ha detenido totalmente. Sin embargo, hasta que no se inicie todo el proceso de puesta en marcha del 'banco malo' y se aclaren las condiciones en que se traspasarán los activos tóxicos todo está paralizado.
En todo caso, la consolidación de ese proceso de sacar del balance el ladrillo se antoja en estos momentos como la única salida viable para Banco de Valencia.
¿Tú quien eres, el Ministro de Economía o algún jeta que ha despedido la entidad? a ver si me lo aclaras por favor.
Segun mi información Banco de Valencia no va a entrar en este proceso, ya que va a ser sacrificado como quiere Europa, es decir, le van a dejar caer.
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