X AVISO DE COOKIES: Este sitio web hace uso de cookies con la finalidad de recopilar datos estadísticos anónimos de uso de la web, así como la mejora del funcionamiento y personalización de la experiencia de navegación del usuario. Aceptar Más información
GRUPO PLAZA
LA CIUDAD Y OTROS VICIOS /4

Madrid: algunos otros 'retiros'

VICENT MOLINS. 09/08/2012 La guía urbana de ValenciaPlaza.com se desplaza a Madrid para romper el tópico de la jungla de asfalto

Parque de las Tetas

VALENCIA. La inmediatez con el AVE, añadido a otro tipo de cercanías, ha provocado que Madrid sea más que nunca un apéndice de Valencia. O quizá al revés.

La cuestión es que conocerse bien y estar cerca supone derrumbar mitos construidos a partir de la exageración. Como por ejemplo el tópico de que Madrid es una jungla, una ciudad incompatible con la vida tranquila. Puede que no sea para tanto.

Madrid, además de las 118 hectáreas del Retiro, tiene varias áreas de desconexión urbana. Idóneas para ver el sofoco de la hora punta con cierta lejanía. Tres de ellas son: el Templo de Debod, un lugar egipcio donde se fantasea con enigmáticos misterios; el Parque de las siete tetas, que en realidad se llama el Cerro del Tío Pío; y el Parque del Capricho, cuyo subterráneo está taladrado por un refugio de la Guerra Civil.

Templo de Debod

- Templo de Debod: Al oeste de la Plaza de España, junto al Paseo de Pintor Rosales, el de Debod es un espacio de retiro extraño. Y no sólo por su cercanía con la sede nacional del PSOE. Por las tardes, cuando empieza a caer el sol, una luz roja blande el ambiente y contagia el entorno de una intimidad intensa.

El templo es un edificio importado. Aunque las referencias están envueltas de confusión, se le sitúa hace 2200 años en la región egipcia de Nubia. Con el proyecto constructivo de la Gran Presa de Asuán, los templos y otros emblemas locales serían rebanados por las aguas del Nilo. Para salvarlos, la UNESCO lanzó la campaña ‘adopte un templo egipcio'. O algo así. Los templos se desmontaron y se trasladaron a otros países. El 18 de junio de 1970, a bordo de la embarcación Benisa, llegaron a Valencia procedentes de Alejandría los grandes pedazos que darían cuerpo al Templo de Debod. En 1972, tras el montaje, y dotado con más piedra de Salamanca que de Egipto, se abrió al público en su actual ubicación madrileña.

El espacio que aglutina al Templo de Debod y sus jardines, permite visualizar con un ojo la Casa de Campo, Guadarrama y más cerca el Palacio Real. Con el otro ojo, y en contraste con los pilones egipcios, puede verse la Torre de Madrid y el Edifico de España. La pura ciudad desde el recogimiento egipcio.

→ Info: Jardines del Templo de Debod. Descanso egipcio en medio de la ciudad. Metro: Plaza de España y Ventura Rodríguez. Consultar horarios de acceso al templo aquí.

Vista del skyline de Madrid desde el Parque de las Tetas

- El Parque de las siete tetas (Cerro del Tío Pío): De la calle de Ferraz y el paseo del Pintor Rosales, a Vallecas, esa fracción de Madrid pendiendo siempre de un hilo. Próximo a la Avenida de la Albufera, se encuentra un mirador espontáneo, desde donde mejor se puede tomar una panorámica de la ciudad y sus alrededores. El lugar tiene una resonancia silenciosa. Como acercarse a una cumbre elevada para alejarse de la civilización.

Las siete tetas del parque, anchas y cubiertas de césped bajo, recuerdan al escenario virtual en el que se rodaba los Teletubbies. Son costumbre las meriendas a media tarde sobre alguna teta. Dejarse perder por unas vistas apabullantes, probablemente únicas.

Bajo los siete montículos se encuentra soterrada una escombrera.

→ Info. Parque de las Tetas (Cerro del Tío Pío). El gran mirador de la ciudad. Metro: Buenos Aires y Portazgo.

El Capricho, en Madrid

- El Parque del Capricho: Tal vez el hermano desconocido del Retiro. Intercala un romanticismo infalible con un cierto carácter siniestro producto de la Guerra Civil. Está cerca de Barajas, en Alameda de Osuna.

Su historia es la siguiente: en 1748 los Duques de Osuna adquieren las 14 hectáreas de un terreno muy alejado de la ciudad con la intención precisamente de eso, evadirse del Madrid del XVIII. Gracias al cuidado de la Duquesa, los jardines se convierten en un centro de atracción para actos sociales. Todo marcha bien hasta que, como ocurre en estos casos, tras distintos caminos en la herencia el recinto acaba en manos de uno de los nietos, apellidado Alcántara, y de gustos manirrotos. El jardín es vendido. En la Guerra Civil, el Capricho es tomado por el Ejército del Centro, que lo utiliza como cuartel general y traza recovecos de bunkers a quince metros de profundidad. Desde entonces, el Capricho termina prácticamente abandonado. En 1999 se reabre con su esplendor actual.

El Capricho, en Madrid

El Capricho tiene un jardín francés, otro italiano y una muestra de paisajismo inglés. Debajo hay bunkers, y arriba laberintos de setos, estanques y riachuelos. Un espacio muy sofisticado donde la ciudad no existe.

→ Info: Paseo de la Alameda de Osuna. Jardines románticos con bunkers en el subsuelo. Sólo está abierto sábados, domingos y festivos de 09:00 a 18:30 del 1 de octubre al 31 de marzo, y de 09:00 a 21:00 del 1 de abril al 30 de septiembre. Metro: El Capricho. Línea 5. Teléfono: 91 588 01 14

____________________________________________

PROPUESTAS ANTERIORES DE 'LA CIUDAD Y OTROS VICIOS'

· Benimaclet tiene nueva deriva continental

· Dónde tomar una cerveza (con o sin Rita)

· Viaje a una Valencia imprevista (I)

Comparte esta noticia

comentarios

Actualmente no hay comentarios para esta noticia.

Si quieres dejarnos un comentario rellena el siguiente formulario con tu nombre, tu dirección de correo electrónico y tu comentario.

Escribe un comentario

Tu email nunca será publicado o compartido. Los campos con * son obligatorios. Los comentarios deben ser aprobados por el administrador antes de ser publicados.

publicidad
publicidad