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VALENCIA. Ideas, tiempo y una mínima inversión. Ese es el plato entrante que se necesita para desarrollar una empresa de negocios basados en Internet o aplicaciones tecnológicas. Las llamadas start-ups están pegando fuerte tanto en la red como en los smarthphones y las inversiones en este tipo de proyectos siguen aumentando, llegando en 2012 a una de sus mejores cifras en España. 

Adrian Escardino, director del Área de Desarrollo de Negocio de la Fundación Ciudad Politécnica de la Innovación, apunta que para encontrar inversión en este tipo de empresas lo importante no es el tamaño, sino que sean "escalables". Los inversores buscan empresas que, a pesar de ser pequeñas, puedan ir haciéndose más grandes, que los beneficios se vayan multiplicando. ¿Y cómo conseguir encontrar proyectos que hayan desarrollado este tipo de ideas?

Según Escardino, hay una gran cantidad de criterios de seguimiento que pueden ayudar a decidir de forma clara si se va o no a invertir en un proyecto. Número de visitas, decargas, seguidores o recaudación, cifras que pueden verse multiplicadas al expandir ese negocio a mayor escala.

¿BURBUBUJA DE LAS START UPS?

Este auge de las empresas tecnológicas recuerda a la burbuja de las punto com entre 1997 y 2001. Durante estos años, el valor de las empresas vinculadas a Internet se convirtió en el punto de mira de especuladores que generaron falsas espectativas. "Empresas que aún no funcionaban empezaron a recibir grandes inversiones pero no se sabía si acabarían funcionando" apunta Escardino.

Pero el panorama actual ha cambiado. "El mercado se hincha porque muchos deciden apuntar al sector pero este incremento no es similar al de burbujas anteriores". La tecnología se ha convertido es un aspecto estructural de muchas empresas lo que aumenta la necesidad de prestar atención a este nicho. "Ahora se tiene doce años de experiencia que constatan que el sistema se mantiene y es necesario" explica Escardino. "En el año 2000 la gente invertía a ciegas, ahora se invierte con conocimiento". El director alude al interés de la gente por invertir, pero también a la desconfianza que se ha generado y a la búsqueda de "inversiones golosas" y con resultados a corto plazo.

INTERNET STARTUP CAMP VALENCIA, PROMOVIENDO LA INICIATIVA

A propósito de este gran interés de la sociedad y los jóvenes, la Universidad Politécnica de Valencia realizará por primera vez el Internet Startup Camp Valencia, entre el 16 y el 21 de julio. Escardino explica que el motivo de realizar este campus es intentar informar a los jóvenes sobre los pasos que son necesarios para crear una empresa y, sobre todo, va dirigido a aquellos que se encuentran en sus casas por no encontrar un empleo o una iniciativa por la que apostar. El paro juvenil de la Comunitat Valenciana es del 51,9%, según los datos difundidos por Eurostat, por lo que este tipo de propuestas puede empezar a despertar ideas emprendedoras en los asistentes.

"Lo bueno de este tipo de aplicaciones es que lo más valioso que se le dedica es el tiempo, por lo que la inversión inicialmente es mínima y se pueden unir emprendedores que no tengan necesariamente conocimientos específicos sobre informática, sino que también pueden emplearse saberes complementarios como la psicología o la ingeniería" apunta el director.

La organización del campus pretende que gente que pueda estar interesada en estos temas escuche lo que se ha hecho de la mano de especialistas en empresas tecnológicas relevantes como el co-fundador de Tuenti, Fernando Ruiz, miembros de Startup Spain o todoexpertos.com. "Queremos desmitificar la dificultad de crear una empresa" afirma Escardino. "Montar una sociedad no cuesta nada, quien no lo hace es porque no tiene ganas". Reconoce que el problema de las empresas viene después, una vez se han creado, pero que de las dificultades se aprende y ellos intentarán a través del campus que la posible caída sea más leve. "La gente tiene que empezar a moverse, los jóvenes tienen que darse cuenta de que no dependen de nadie, sólo de ellos mismos".

Escardino cree que muchos de los asistentes pueden llegar a encontrar un modelo que funcione y se puede probar a pequeña escala durante el periodo de una año. "Si luego hay posibilidad de seguir invirtiendo parece razonable gastar tiempo, aunque no se saque dinero al principio". Si al final no funcionan han hecho un "master" de un año con toda la experiencia que eso conlleva.

El campus promete. Cada mañana se tratarán aspectos clave del diseño y lanzamiento de un proyecto de Internet y se presentarán casos de éxito españoles destacados contados por sus responsables. Por las tardes se realizarán actividades como ponencias, grupos de networking, coaching, y talleres entre otras actividades. Una oportunidad de aprender como crear una start-up y tomar la iniciativa.