Esta capacidad permitirá a la empresa generar la energía suficiente en Hungría como para suministrar electricidad a 220.000 hogares, evitando además la emisión a la atmósfera de 130.000 toneladas anuales de CO2.
En concreto, la compañía que preside Ignacio Sánchez Galán ha puesto en marcha este mes el parque eólico de Csoma I, ubicado al Norte del país, en la provincia de Komárom-Esztergom, junto a la ciudad de Komárom. La instalación, que dispone de una potencia de 38 MW, incorpora 19 aerogeneradores G90 de Gamesa, de 2 MW de potencia unitaria.
Además, la filial de renovables de Iberdrola tiene en construcción otras tres instalaciones eólicas, que suman 70 MW: los parques de Scott (36 MW), Csoma II (8 MW) y Amundsen (26 MW).
La empresa ya tiene instalado en Hungría el parque Kisigmand, la instalación eólica más grande del país que, con una capacidad instalada de 50 MW, se ubica en la provincia de Komárom-Esztergom.
La construcción de todas estas instalaciones ha sido llevada a cabo por Iberdrola Ingeniería y Construcción, empresa del grupo que se ha convertido en una de las principales compañías de ingeniería energética del mundo.
Iberdrola Renovables ve su diversificación geográfica como una de sus "grandes ventajas competitivas". Su estrategia internacional se centra en crecer en mercados con sistemas regulatorios favorables y que tengan un alto potencial de desarrollo en el sector de las energías renovables.
A día de hoy, Estados Unidos y Europa son los mercados prioritarios para la compañía. En este contexto, Europa del Este es un objetivo relevante de cara a potenciar su crecimiento durante los próximos años.
LÍDER EN EUROPA DEL ESTE
De hecho, la empresa, que ya dispone en Europa del Este de una cartera de proyectos de cerca de 4.500 MW, se ha convertido en los últimos años en líder del sector en esta área geográfica.
La compañía cuenta, además de con los mencionados parques húngaros, con cuatro instalaciones eólicas en Polonia que suman 160 MW. Asimismo, desarrolla otros proyectos en Rumanía, Polonia, Hungría, Estonia y Bulgaria.
De entre todos estos desarrollos, destaca el rumano Dobrogea, situado en la zona de Constanza, considerada la iniciativa eólica terrestre más ambiciosa del mundo, que incluye la puesta en marcha de hasta 50 parques con una potencia conjunta de 1.500 MW. Iberdrola Renovables ha recibido recientemente del operador de la red rumana (Transeléctrica) el permiso para conectar a su sistema eléctrico esta capacidad y ya trabaja en el proyecto.
Iberdrola Renovables, presente en 23 países, cuenta con una potencia instalada de más de 11.400 MW al cierre de primer semestre de 2010, y su producción en en el peridodo ascendió a cerca de 13.000 millones de kWh.
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