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VALENCIA. La promotora inmobiliaria Nou Temple ha presentado casi una decena de demandas contra entidades financieras y ayuntamientos que, en su opinión, le están entorpeciendo el cumplimiento del plan de viabilidad que le permitió salir del concurso de acreedores en marzo de 2010.

La última demanda ha sido contra el Ayuntamiento de Ciutadella (Menorca), pero en el último año y medio ya le han antecedido ante los tribunales CAM, Nova Caixa Galicia, Banco CCM, Catalunya Caixa o los ayuntamientos de Ribarroja, Chiva o Vinaroz. Las acusaciones presentadas por la empresa que preside Víctor Flames van desde el impago de créditos ya firmados hasta la asunción de los daños y prejuicios causados por la deficiente urbanización de los PAI en los que la empresa ya había edificado o estaba comercializando inmuebles.

"Son actuaciones de unos y otros que han impedido terminar obras ya vendidas o la escritura de viviendas cuyos propietarios han terminado por retirar la señal, en algunos casos", advierten desde la empresa. El razonamiento de Flames es sencillo, si estas instituciones no le han permitido hacer su negocio, deben pagar por ello.

CUANTIOSAS INDEMNIZACIONES

Además de la solución del problema denunciado, la empresa exige indemnizaciones millonarias que tanto las entidades como los ayuntamientos están teniendo que pagar. De hecho, con las primeras decisiones judiciales, el Ayuntamiento de Vinaroz fue condenado a indemnizar a Nou Temple con 2,3 millones de euros o la intervenida Banco CCM vio sus bienes embargados para hacer frente al pago de 920.465 euros a los que fue condenado.

En la última demanda, el Ayuntamiento de Ciutadella se enfrenta al pago de 2,4 millones por el retraso en la ejecución de las obras de urbanización de las calles adyacentes a una promoción que impidieron a la empresa obtener las correspondientes licencias de ocupación en el tiempo establecido.

"Flames quiere salvar a su empresa de la liquidación por todos los medios", se reconoce desde la compañía, aunque para ello tenga que pleitear con quien haga falta y haya de asumir unos costes en abogados que podrían disuadir a otros.

UNA QUITA DEL 50%

Nou Temple salió de concurso con una quita del 50% de su deuda, que ascendía 180 millones de euros, y una cartera de casi una treintena de promociones en marcha, tanto en fase de venta, como de construcción o en proyecto en la Comunitat Valenciana, Tarragona y las islas Baleares.

La firma adquirió una destacada presencia pública por sus campañas publicitarias con el capitán del Valencia CF, David Albelda, y su salida de concurso contó con el respaldo de CAM, Caixa Catalunya, Caja Sur, Unicaja y el Banco Gallego.