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VALENCIA (VP). Empresas, ferias, fundaciones y universidades públicas coparon el pasado año el 86% de los préstamos y avales que el Instituto Valenciano de Finanzas (IVF) otorgó a través de su actividad crediticia, además de aumentar un 1% en el sector público, según la memoria anual del brazo ejecutor de la política financiera del Consell.

Mientras tanto, los préstamos al sector privado, que apenas coparon el 14%, se redujeron en un 42%, pese a que una de las tres funciones básicas del IVF es prestar apoyo financiero para la promoción de las actividades empresariales, en especial aquellas que incorporen un valor añadido significativo, con innovación tecnológica, generadoras de empleo o sean consideradas estratégicas por la generación de riqueza y empleo para la Comunitat Valenciana.

LÍNEA 'BUSINESS ANGELS' 

No lo debieron de ver así los técnicos del instituto dirigido hasta hace unos días por Jorge Vela, dado que los créditos directos pasaron de los 183,02 millones de euros hasta los 106,25 millones tras haberse reducido en casi un 10% el número de operaciones. Así, en lo que a operaciones nuevas se refiere, que se elevaron en nueve hasta la treintena distribuidas en 19 préstamos IVF y 11 préstamos participativos de la línea 'Business Angels', el importe total cayó desde los 45,23 millones de euros hasta los 25,60 millones. 

En lo que a las operaciones de reestructuración se refiere fueron 38 operaciones (19 menos que en 2010), hasta totalizar 72,4 millones de euros por debajo de los 57 millones de un año antes.

Todo ello pese a la acuciante situación de un buen número de empresas, cuya falta de equilibro financiero las están abocando directamente al cierre.

OPERACIONES CONJUNTAS 

Asimismo, a lo largo del pasado año el IVF realizó conjuntamente con otras entidades de crédito 15 operaciones, lo que representó el 50% del total, pero pese a que hubo una operación más el volumen en esta partida se desplomó en un 70% hasta los 8,25 millones.

Unos datos que caminan en sentido contrario al demandado por el sector productivo, afectados sin duda por los problemas financieros de la Generalitat Valenciana, cuyo Instituto Valenciano de Finanzas elevó hasta los 652,9 millones de euros los préstamos al sector público respecto a los 647,3 millones del ejercicio precedente.

Un importe que junto con las operaciones formalizadas en años anteriores representaban al 31 de diciembre de 2011 un riesgo vivo de 815,4 millones de euros, es decir, un 70% más que los 480,6 millones de 2010. Entre las operaciones formalizadas destacaron los préstamos, por un importe máximo de 10 millones de euros por operación, suscritos con Valenciana de Aprovechamiento Energético de Residuos (Vaersa), la Entidad Pública de Saneamiento de Aguas Residuales de la Comunidad Valenciana (EPSAR) y la Institución Ferial Alicantina (IFA), formalizada por el IVF con el ICO.

EL APOYO DEL BANCO EUROPEO DE INVERSIONES

También destacó el préstamo con EPSAR por importe de 100 millones de euros, destinado a financiera el proyecto del Banco Europeo de Inversiones (BEI) denominado 'Saneamiento CA Valenciana V'.

Precisamente el BEI también financió con sus fondos un préstamo que el IVF otorgó a la Universidad Jaume I de Castellón, por un importe máximo de 9 millones de euros, destinado a financiar las inversiones necesarias para la implantación de las enseñanzas universitarias de medicina y enfermería. 

MÁS DEUDA Y MENOS BENEFICIO 

Mientras tanto, el endeudamiento del IVF a 31 de diciembre pasado se elevó hasta los 1.314 millones de euros, que representan un aumento de 209 millones sobre el ejercicio precedente. Según la memoria anual, los recursos obtenidos de dicho incremento se destinaron en su mayor parte a la financiación de empresas del sector público valenciano, que compensaron la disminución del saldo vivo de las líneas de mediación de acuerdo a su calendario de amortizaciones. 

Por último, el gestor de la deuda pública valenciana multiplicó por cuatro sus pérdidas durante el pasado año, al pasar de unos números rojos de 2,42 millones de euros hasta los 8,10 millones. Unos resultados, los del pasado ejercicio, que estuvieron condicionados por las fuertes previsiones realizadas en unos 10 millones.