Comparte esta noticia

• Tweet
• meneame

Otras noticias

• Economía incumple con Unión Gremial el criterio que aplicó para excluir a Anged del Observatorio
• El 'problema valenciano' se cuela en Madrid
• A quién le sube y a quién le baja los impuestos Joan Ribó

José Císcar, vicepresidente y portavoz del Consell lamenta la pérdida del sistema financiero valenciano y abre la puerta a la venta de empresas públicas, además de contemplar un sistema de gestión privada que podría alcanzar a la totalidad de la Ciudad de las Artes y las Ciencias

VALENCIA (FOTOS: EVA MÁÑEZ). José Císcar (Moraira, 1961), fue designado vicepresidente y portavoz del Consell por Alberto Fabra el pasado mes de enero. El exalcalde de Teulada, dejó entonces la cartera de Educación para debutar con una dura primera rueda de prensa en la que se anunciaba el decreto de ajustes del Consell.

Desde entonces, la presencia de Císcar ha sido constante tanto en la organización interna del Consell como en las grandes decisiones de la Generalitat: un número dos del presidente en toda regla. El pasado viernes protagonizó una de las ruedas de prensa más largas y delicadas de los últimos tiempos en la que se anunció el cambio de modelo en la sanidad valenciana. Una prueba de fuego más para la 'mano derecha' de Alberto Fabra.

-¿Cuántas horas duerme el vicepresidente de la Generalitat?
-Últimamente estoy durmiendo cuatro horas y media o cinco. Lo tengo que corregir porque es una cuestión de salud. 

-¿Entiende a la exvicepresidenta De la Vega cuando decía que no dormía nada?
-Entiendo a cualquier político que duerma poquito o mal.

-Está asumiendo importantes responsabilidades desde la vicepresidencia de la Generalitat en un momento en el que ustedes hablan de cambiar el modelo de administración. ¿Le hubiera gustado llegar al cargo en otra situación?
-Desde que estoy en política he pasado por todos los momentos. Los de bonanza económica en una alcaldía y ahora los de dificultad como conseller y vicepresidente. Tenemos que saber amoldarnos en cada momento y gestionar la situación que nos toca. Un tiempo complicado como este tiene el incentivo de que es un momento de oportunidad: a los que nos gusta el servicio público, nos da la oportunidad de cambiar aquello que no funciona y mejorar en lo posible lo que funciona. Los grandes cambios suelen llegar en momentos difíciles y el hecho de poder vivirlo también motiva mucho.

-La intención de Alberto Fabra ha sido tener un vicepresidente 'fuerte' en un momento tan delicado. De hecho, usted está siendo el rostro más visible en las decisiones. ¿Le preocupa el desgaste que conlleva esta tarea?
-Lo que me preocupa es que la Comunitat Valenciana, en una etapa crucial de su historia como autonomía, salga adelante lo antes posible. Eso es lo que importa. Si conlleva desgaste, lo asumiré. Ahora tenemos que tomar las decisiones que sean necesarias y comunicarlas. Es posible que en este momento, por la situación, el desgaste sea un poco mayor, pero no nos preocupa. Nos preocupa tomar las decisiones necesarias para salir de la crisis y lo hacemos con el convencimiento de que son las medidas adecuadas para cumplir este objetivo.

-Hablando de decisiones importantes. Los cambios previstos en Sanidad son históricos. No obstante, la forma de anunciarlo resultó un tanto sorprendente. Nos consta que llevaban preparándolo desde hacía dos meses: ¿cuándo se decide que se debe adoptar este cambio y por qué?
-Son medidas en las que venimos trabajando desde hace meses. Hay una planificación previa muy importante. Se presenta en esta rueda de prensa porque teníamos que aprobar en el pleno del Consell el plan de reequilibrio para cumplir con el pago a los proveedores y el objetivo del déficit y que, además, debía reflejar la estabilidad financiera no sólo para 2012, sino para los años venideros. Son medidas además, que van a empezar a implementarse ya, como el proceso administrativo para las iniciativas en el ámbito sanitario. Con el objetivo de ofrecer la máxima transparencia, decidió explicarse todo de forma conjunta en ese momento.

¿Todos los departamentos de salud se van a ver afectados? ¿O alguno puede quedarse fuera por tamaño o complejidad?
-Trabajamos para que el 100% de los departamentos de salud entren en este proceso. Esperamos que entren todos.

-¿Qué ocurrirá con las áreas del modelo Alzira?
-Continuarán igual como mínimo hasta el final de la concesión.

-¿El modelo Alzira está muerto?
-No, en absoluto. Es un modelo que está funcionando y está teniendo un índice de satisfacción en los usuarios muy elevado. Como mínimo tiene vida hasta el final de las concesiones.

-¿Se volverá a crear un hospital con este modelo?
-En principio no es algo que esté encima de la mesa.

-¿Quién ha redactado este modelo? Porque tenemos entendido que incluso la Conselleria de Economía ha participado...
-Lo han redactado los técnicos de la Conselleria de Sanidad aunque han hecho consultas internas, como a la Conselleria de Economía y otras externas.

-¿Cuál ha sido el papel del conseller de Sanidad, Luis Rosado?
-Como máximo responsable del área, es la persona que ha estado pilotando todo el trabajo hecho hasta ahora.

-¿Han llegado directrices desde Madrid para que seamos la 'prueba piloto' en este modelo?
-No, en absoluto. Es una decisión que se ha tomado desde aquí y con plena autonomía. Nosotros tenemos que hacer que la administración sea sostenible y para ello debemos tomar decisiones. La virtud de este modelo es que garantizamos que la gente va a tener los mismos médicos, centros de salud, hospitales, y que seguirá siendo una sanidad gratuita y de calidad pero con la diferencia es que a partir de ahora será sostenible.

-¿Y dónde está el truco? Si va a ser igual e incluso mejor y, además, más barata. ¿Qué se nos escapa?
-El truco está en dar paso a la colaboración público-privada porque hay sitios a los que la administración no puede llegar por las propias normas de contratación. La iniciativa privada tiene unas posibilidades para conseguir economías de escala que no tiene la administración por sus reglas de funcionamiento. Cuando presentamos este modelo hablamos del ejemplo sueco: este país sufrió los mismos problemas que ahora tiene la Comunitat Valenciana. Dieron paso a esta colaboración público-privada, no solo en la sanidad, y demostraron que este sistema puede funcionar.

-En el modelo sueco se paga una cantidad simbólica por ir a la consulta... ¿hay posibilidades de que eso ocurra?
-No. Aparte de que debería ser una decisión estatal porque habría que reformar la ley básica donde se habla de la sanidad gratuita. Nosotros no lo contemplamos en absoluto.

-La ministra de Sanidad ya ha hecho las reformas que pensaba acometer en este ámbito. Todo lo demás está descartado. En cuanto a aquello que no es asistencia sanitaria propiamente dicha, el Consell ya tomó las medidas que consideró necesarias en enero que están en ejecución.

-Echando la vista atrás, ¿usted hubiera hecho la nueva Fe?
-Aunque haya voces críticas, creo que fue un acierto y el tiempo nos dará la razón.

-¿En qué punto se encuentra el proceso de reestructuración de las empresas públicas?
-Es un proceso lento por su enorme complejidad técnica y jurídica. Estamos hablando de transformar el actual mapa de empresas públicas, fundaciones y entidades de derecho público para englobar a todo los demás. Hay medidas de absorción, fusión, privatización, Eres, etcétera. La hoja de ruta, no obstante, se está cumpliendo y en este mes de mayo vamos a tener el documento final de cómo vamos a acometer estas cuestiones.

-¿Hay alguna oferta por alguna empresa pública o por sus instalaciones?
-El plan estratégico se está cerrando y nos dirá sobre cada empresa qué posibilidades tiene. En función de eso actuaremos. Hemos visto interés en Ciudad de la Luz pero no vamos a tomar ninguna decisión hasta que no tengamos concluido el plan. Pero en este proceso, es una opinión personal, va a haber ventas de empresas públicas.

-¿L'Oceanogràfic, por ejemplo?
-Veo bastante inviable la venta tanto de L'Oceanogràfic como de la Ciudad de las Artes y las Ciencias. No es descartable cambios en el modelo de gestión.

-¿Podría extrapolarse el modelo de gestión del Oceanogràfic, gestionado por Parques Reunidos Valencia?
-Sí. Podría.

-Fuera de estos holding se queda RTVV. Presentaron recientemente el anteproyecto de ley del nuevo ente que supondrá liquidar la actual, el cierre de la empresa y asunción de la deuda por parte de la Generalitat. ¿Qué debe hacer la nueva televisión para no cometer los errores del pasado? 
-La nueva televisión tiene la obligación legal de no producir déficit, que es lo que reflejará la ley que aprobará el Estado para todas las comunidades autónomas. El modelo que proponemos conseguirá que destinando muchos menos recursos por parte de la Generalitat no produzca déficit. La idea básica es que tenga gestión directa en los informativos y en todo aquello que signifique preservar las señas de identidad valencianas. Lo demás, a través del contrato-programa, poder externalizarlo y que sea la iniciativa privada quien lo gestione.

-La Ley recoge que la Generalitat solo financiará aquello que considere servicio público. Entendemos que tendrá que delimitarse de alguna manera. Por ejemplo: ¿el fútbol es servicio público? ¿o los dibujos animados para los niños?
-Es algo que, efectivamente, deberá delimitarse.

-Entonces, ¿podrá la nueva RTVV comprar los derechos para retransmitir los partidos del Valencia CF?
-Creo que el nuevo modelo de televisión no va por esa línea. Servicio público es aquello que defiende nuestra identidad, lengua, tradiciones... pero eso no es incompatible con que en los contratos-programa nosotros obliguemos a la iniciativa privada a que también defienda y fomente estas señas en sus producciones.

-¿En qué punto se encuentra la organización del Gran Premio de Fórmula 1?
-Todo transcurre con normalidad. Sabíamos que lo teníamos que organizar, no había otra salida. Así que vamos a intentar que, como gran evento, produzca réditos en la Comunitat de imagen y económicos para comercio, hostelería, etcétera.

-¿Son conscientes de que la compra de Valmor no es justificable de ninguna de las maneras si no es por la obligación que tiene la Generalitat de hacerse cargo?
-La compra de Valmor es justificable porque hay unos contratos que se tienen que cumplir y que, de no ser así, la Generalitat tendría una responsabilidad económica muy importante. Es un paso que se da para que los contratos puedan cumplirse.

-Pero la responsabilidad de esos administradores privados ha quedado 'impune' por decirlo así...
-Nosotros lo hemos asumido para evitar males mayores porque la Generalitat ha suscrito unos compromisos contractuales que así lo obligan. Hemos hecho la gestión más adecuada para los intereses públicos.

-¿Deberían exigirse responsabilidades para los que firmaron esos contratos o para los gestores?
-Tenemos un sistema legal que regula de una manera muy detallada la exigencia de responsabilidades de los gestores públicos y privados. Todo este proceso de compra está tutelado por los técnicos de la administración y por la intervención de la Generalitat. Si en cualquier momento detectaran que hay algún tipo de responsabilidad nos lo harían saber y ejerceríamos las acciones que correspondieran, aunque de momento, esto no se ha producido.

-¿Cómo ven la situación de encaje de Bancaja con Bankia sumado a la resistencia de José Luis Olivas a ceder la presidencia?
-Lo que le pedimos a los consejeros de la entidad es que el peso que tiene Bancaja dentro de Bankia, la cuota de participación, no se reduzca lo más mínimo. Que defiendan ese peso y esa participación. Es cierto que en esa toma de decisiones el consejo de administración es autónomo por mucho que se nombren desde otras instancias. Una vez designados tienen plena capacidad de actuación y gestión. ¿Qué es lo que queremos?. Que Bancaja no dé un paso atrás dentro de Bankia.

-¿Mantienen la confianza de José Luis Olivas como presidente de Bancaja?
-Mantenemos la confianza en todo lo que es el consejo de administración y en todos los órganos de Bancaja para conseguir el objetivo que he dicho antes.

-¿Están sorprendidos por la cantidad de ‘basura' que está saliendo de la gestión en la CAM?
-Estamos desagradablemente sorprendidos en todas las cosas que se están conociendo. Debemos dejar que los tribunales diluciden las responsabilidades que sean de tipo judicial y que la comisión de investigación de Les Corts haga lo propio en el ámbito político. A partir de ahí, estamos esperanzados con que el nuevo gestor, el Banco Sabadell, ayude a nuestro tejido productivo y que nuestras empresas y familias tengan el mismo apoyo que han tenido desde la CAM.

-En cuanto al Banco de Valencia, en pleno proceso de subasta, suena como candidato el Banco Mare Nostrum. ¿Han tenido contacto con ellos?
-Desde la vicepresidencia no. Lo que pedimos es que la entidad mantenga su valencianía, una implicación territorial que ayude a nuestros sectores productivos.

-¿Está decepcionado por el final del sistema financiero valenciano?
-Evidentemente no nos gusta. Pero debemos afrontar la situación y tratar que la solución sea la mejor posible.

-¿Los hispanobonos serán una realidad?
-Pensamos que sí. Al final, como no es un problema exclusivo de la Comunitat, esperamos una solución centralizada de este tipo después de que se aprueben los presupuestos generales de 2012.

-En Cataluña renuevan sus bonos minoristas patrióticos. El mercado está igual de cerrado para todos. ¿Son más fiables que nosotros, se debe a las entidades financieras?
-Como administración no creo que sea más fiable que la valenciana. El secreto puede estar en las entidades financieras.

-Por eso, hubiera sido mejor no perderlas...
-Es que todos estamos de acuerdo en que no se querían perder las entidades financieras. El gobierno actual esto no lo discute. Habríamos querido que continuaran pero ahora tenemos que hacer frente a unas circunstancias que son las que son.

Noticias relacionadas

• "Me veo con fuerzas para asumir también un cargo en el PP"