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VALENCIA (VP). Hoy es viernes 16 de marzo, festividad de... Un momento, hoy no es fiesta. Puede que las Fallas llenen las calles de Valencia y la actividad festiva, en puertas de una largo fin de semana, se haya adueñado de los valencianos. Pero todos los comercios e insituticiones abren hoy sus puertas (¡hasta Bancaja!, que se ha quedado sin su horario especial fallero)... ¿Todos? ¡No! Dos aldeas irreductibles resisten ahora y siempre al invasor, que escribía René Goscinny en el arranque de sus historias de Asterix.

Y no son dos 'aldeas' cualquiera. Se trata de las dos grandes patronales valencianas, la provincial CEV y la autonómica Cierval aparecen hoy con sus puertas cerradas a cal y canto.

Los periódicos y las cartas amontonadas en la puerta de Cierval (sí, Correos también trabaja hoy) podrían no ser más que una anécdota en una ciudad sumida en la resaca de la plantà de la noche del jueves, de no ser porque contrasta con la actividad se vive en la otra acera de los agentes sociales.

Tanto UGT como CC OO están abiertos y desarrollan su actividad como un día laborable, que es lo que es. Solo salva 'el honor' de los empresarios la Cámara de Comercio de Valencia, que este año sí está aplicándose y hasta ha anulado el tradicional permiso que otorgaba a sus empleados para ir a la mascletà. En el lobby AVE, con las oficinas cerradas, tienen la centralita desviada a un móvil de uno de los empleados. 

En fin, que algunos discursos sobre la productividad, el exceso de vacaciones en España, lo malos que son los puentes para la economía española o sobre lo poco que trabajan algunos están bien pero aplicar la lección en casa propia es una cosa distinta. ¿Consejos vendo?

En todo caso, y para que quede claro, desde una de las dos patronales, el departamento de comunicación, que atiende al móvil, insiste en que el día viene fijado por convenio, en compensación por las horas de más que se trabaja a lo largo del año. Esos convenio demonizados por las patronales, todo sea dicho de paso