VALENCIA. No por menos que de enigmática puede calificarse la salida del exdirector del Instituto de Finanzas de su actual empleo, el pasado viernes, como director general de Renomar. Y más si se tiene en cuenta que ha renunciado a una indemnización superior al millón de euros, según aseguran fuentes próximas a la empresa.
Este diario ha intentado aclarar la situación sin demasiado éxito. Uncio no ha respondido a las llamadas. Pero sí lo ha hecho el presidente de la compañía, Francisco Fenollar, quien ha comentado la salida del ya exdirector: "A quien hay que pedir responsabilidades por su salida es al Ministerio de Industria por haber dejado a la empresa sin actividad. Pregunten usedes si quieren a Industria. Además, Uncio tiene otras ambiciones y, por tanto es lógico que se haya ido en su busca".
Dicho así por el presidente de la empresa, no queda más remedio que desechar los rumores surgidos últimamente y que hablan de desavenencias entre el consejo y el director. Pelillos a la mar y aquí no ha pasado nada. Se baja el telón (de momento). En todo caso, queda claro que la verdadera y azarosa historia de la industria eólica en la Comunidad Valenciana y sus interesadas relaciones con la Administracioón autonómica y estatal aun no ha sido escrita.
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