MADRID. El real decreto de reforma financiera de primeros de febrero puede activar un poco el deprimido sector inmobiliario y promotor español, ya que las elevadas provisiones exigidas a los bancos les permitirán rebajar los precios y vender sus carteras, según han explicado a Valencia Plaza fuentes del sector.
De hecho, es ahora y no hace años cuando se están asomando de verdad por el mercado español los llamados fondos buitres, grupos como Cerberus, Lone Star, Paulson o Blackstone, entre otros, que de la mano de los bancos de inversión están escudriñando el mercado inmobiliario nacional en busca de las gangas que les pueden ofrecer los bancos, dado que son las entidades financieras las que van a tener que hacer provisiones del 80% sobre el valor escriturado del suelo, un 65% de las promociones en marcha y un 45% para las viviendas, según el texto del real decreto. Y además, los bancos son ahora prácticamente los dueños de todo el sector inmobiliario español ya que convirtieron en el pasado reciente en los propietarios de las pocas cotizadas que quedaban.
Precios mucho más bajos
El primer efecto de la reforma financiera aprobada es que los bancos podrán bajar los precios tras efectuar las provisiones obligatorias, con tal de presentarse luego a los mercados con riesgo cero inmobiliario o muy bajo, que está penalizando su cotización desde hace bastante tiempo. Según cálculos del mercado a los que ha tenido acceso ValenciaPlaza.com el impacto directo del real decreto en el abaratamiento del suelo será del 87% sobre su precio actual, del 76% para las promociones en curso y del 55% para las promociones terminadas.
No obstante, lógicamente, las entidades sólo se decidirán a aceptar las ofertas de estos fondos especulativos por grandes paquetes de vivienda o de suelo.
Santander, BBVA, Popular
La nueva situación puede desempolvar algunas operaciones que estaban en curso y que no se llegaron a concretar, como la anunciada venta del grupo Altamira del Banco Santander a Morgan Stanley, grupo donde la entidad ha situado la mayor parte de las viviendas que se ha tenido que quedar por la falta de pago del sector promotor español. Pero les sucede lo mismo a otras grandes entidades financieras como BBVA o Popular y puede que también en menor medida a Caixabank y Bankia, está última seguida más de cerca por los supervisores, que podrían lanzarse a iniciativas de este tipo.
El pasado año los fondos Paulson y Cerberus, según informó Financial Times (FT) mantuvieron reuniones con diversas cajas de ahorros para abordar soluciones a sus necesidades de capital después del endurecimiento de las exigencias por parte del Gobierno, y todavía no había llegado lo peor para ellas con la reforma financiera de este mismo mes de febrero, que ha elevado las provisiones que se exige a todo el sector financiero español en torno a los 52.000 millones de euros, según los últimos datos aportados por el ministro de Economía, Luis de Guindos.
El artículo de FT diferenciaba a bancos y cajas en el sentido de que pensaba que los grandes bancos cotizados se habían podido proteger mejor que las cajas gracias a sus operaciones internacionales, y aseguraba que "las cajas de ahorros están más desesperadas por captar capital después de que empezaran a pasar factura los créditos de la burbuja inmobiliaria" al haberse centrado más en el mercado de crédito español, que lo demandaba eran hipotecas y crédito promotor a las empresas. Sin embargo, según el rotativo, tras mantener reuniones con inversores extranjeros, entidades como Bankia, Banca Cívica, y otras de menor tamaño expresaron su rechazo a las valoraciones ofrecidas por estos fondos. Por ello, la nueva vuelta de tuerca del Gobierno al elevar las provisiones, quizás puede hacer factibles ahora operaciones de este tipo, dicen las fuentes consultadas.
Buen negocio de futuro
Muchos de estos fondos internacionales tendrían posteriormente, es decir pasado un tiempo, capacidad para ganar mucho dinero dando el pase a estas carteras o incluso comercializándolas ellos mismos o a través de terceros, la famosa teoría del banco malo que el Gobierno del PP ha rechazado de plano. El sector inmobiliario de costa es una de los más afectados por la actual crisis pero hay muchos países que se encuentran en mejor situación que España, como pueden ser Francia o Alemania, donde sigue existiendo una importante demanda para adquirir viviendas en nuestro país. Asimismo, las fuentes añaden que si se empiezan a realizar este tipo de operaciones previsiblemente el sector se reactivará ligeramente, ya que habrá una mayor demanda de terminar las promociones en curso. Y también a medio plazo, acabaría hasta afectando positivamente al suelo y obviamente a su precio.
En las últimas jornadas, incluso ayer mismo, algunas inmobiliarias, muy penalizadas por la crisis, han tenido un buen comportamiento en Bolsa. Ayer fue el grupo Reyal el que subió un 10,34% y también Renta Corporación casi un 5%.
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