VALENCIA. La economía china crece en China, pero también en Valencia. La Asociación de Comerciantes Chinos de Valencia estima que los establecimientos regentados por nacionales de aquel país ha ido creciendo en los últimos años hasta superar los 1.500 sólo en la provincia de Valencia.
Entre ellos han crecido sustancialmente los establecimientos de venta de textiles y calzado, así como los establecimientos de hostelería, que sustituyen a los bazares de precio reducido (los veteranos Todo a 100) tanto al por mayor como al detall. Muchos empezaron con bajos de 1.500 metros y pronto ampliaron a los comercios contiguos, conectándolos por dentro, fueran o no de la misma finca.
Uno de los efectos más visibles de esta prosperidad es el reciente traslado de estos puntos de distribución de la ciudad de Valencia, especialmente en el barrio de Ruzafa, a las naves de polígonos industriales. Los bajos precios de estas zonas, provocados por el cierre de muchas de las empresas radicadas en ellos por efecto de la crisis, ha facilitado la rapidez del tránsito.
Sólo en los polígonos industriales de Manises se estima que una veintena de empresas han ocupado otras tantas naves disponibles desde el pasado verano, especialmente en el de La Cova, junto al aeropuerto.
DEL BARRIO AL POLÍGONO
Este área logística, ya contaba con una amplia presencia de mayoristas asiáticos y las nuevas incorporaciones han concentrado físicamente la oferta de cara al cliente, en su mayoría también asiático.
Fuentes del Ayuntamiento de Manises, advierten de la dificultad de ser concluyente a la hora de adjudicar una nacionalidad determinada a los propietarios de las naves. El consistorio tiene la responsabilidad de controlar que la empresa que se instala esté legalmente constituida y desarrolle actividades lícitas, pero por cuestiones legales no puede hacer constar étnia o la nacionalidad de sus propietarias.
Efecto colateral de esta mudanza, los precios para el alquiler de locales en Ruzafa han bajado en un más de un 50% en el último medio año, cuando se produjeron la mayoría de los traslados, unos 50.
BLINDADOS A LA CAÍDA DEL CONSUMO
Las importaciones de la República Popular a la Comunitat Valenciana han vuelto a los niveles de antes de la crisis gracias a la creciente importación de manifacturas de consumo, que han tomado el relevo al resto a los bienes de equipo.
Si en 2006, las importaciones a la Comunitat del gigante asiático sumaban 2.056 millones de euros, mientras que sólo hasta noviembre de 2011 ya han sumado 2.242 millones de euros.
A pesar de la caída experimentada en 2009 por el descenso de las importaciones de bienes de equipo (de 728 millones a 302 millones en sólo doce meses), la importación de textil y calzado ha espoleado sus datos hasta escalar de 875'8 millones a 1.019 millones en los once primero meses de 2011.
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