Román Ceballos y su decapitación. La falsedad de y en la política hace estragos de lo más diversos. En esta ocasión le ha tocado el turno al ya ex secretario autonómico de Formación y Empleo y ex director general de trabajo de la Generalitat, Román Ceballos. Y ha sido la nueva consellera, María José Catalá Verdet, quien se ha despachado a gusto con esta destitución del cargo a quien venía desempeñando su labor con total reconocimiento por parte de quienes le han tratado en la materia propia de su cometido, al tratarse de una persona seria, responsable, trabajadora y con extensos conocimientos en la disciplina a la cual dedicaba su tiempo dentro y fuera del entorno de la dirección general de trabajo y la secretaría de Formación y Empleo; cuyo listón lo ha dejado tan alto que le será muy difícil, tal vez imposible, alcanzarlo a su sucesor; lo que sufrirán quienes dependan de ello en su actividad profesional. Sí, ha sido la nueva consellera Catalá Verdet quien, con un total y absoluto desconocimiento, mayor despropósito si cabe y carente del más mínimo rigor y conocimiento del área, se ha llevado del consistorio de Torrent, para sustituir al Sr. Ceballos, a quien fuera titular de la cartera de urbanismo y que, por los comentarios que se suceden en la ciudad, ha dejado tras de sí más problemas por resolver que los que se han producido durante su ocupación en dicha área; si bien está por demostrar su capacidad en la nueva responsabilidad, por lo que al menos se merece el beneficio de la duda y que el tiempo hable por sí mismo. Pero al ciudadano no nos convence ni nos sirve que los cargos políticos se rodeen sólo de quienes les bailen al son que ellos toquen, ya que ello va en detrimento del servicio de calidad que deben prestar al administrado. Pero así es la política: falsa, rastrera, interesada para sí y desinteresada para el colectivo general, de “trepas” donde los haya y ausente de ética y rigor, donde las puñaladas traperas se suceden entre quienes se estrechan la mano pero la sinceridad brilla por su ausencia. No hay amigos, sí por el contrario infidelidades por un plato de lentejas.

Enhorabuena Roman. Tuvimos ocasion de compartir momentos delicados en muchas empresas. Tu desde la Direccion General de Trabajo y yo desde el IVF. Me pareciste siempre una persona intachable, con gran humanidad y tratando de buscar las mejores alternativas. Hablabas algo bajito para mi oido, per alto en tus decisiones nunca faciles. No se si has solicitado tu el cambio o es que ya no les sirves. Una gran perdida. Roman, aunque hace unos seis años que no nos vemos, aqui tiebes un amigo

Lo de Roman Ceballos era inaudito, el daño que ha hecho a muchas empresas con perdidas y a otras como el casino Mediterraneo con ganancias y aprobando un E.R.E.