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MADRID (EFE). Las empresas que se adjudicaron la construcción del ferrocarril de alta velocidad entre Medina y La Meca comenzará a trabajar en Arabia Saudí en un plazo de dos meses, según anunció el presidente del consorcio y director de operaciones de Ineco, Manuel Benegas.

Benegas indicó a EFE que el inicio de los trabajos estaba previstos para dentro de seis meses, pero que se quieren adelantar, dado que una parte de la plataforma ya estará colocada en abril.

El consorcio, denominado Al Shoula, tiene un plazo de 34 meses para finalizar las obras, por lo que previsiblemente probará los primeros trenes en septiembre de 2013.

El proyecto va a suponer unas exportaciones para España por 2.700 millones de euros, lo que, según Benegas, va a generar actividad en diferentes empresas, algunas importantes, como ArcelorMittal.

También puede implicar inversiones en empresas más pequeñas, como el grupo Parrós de Bolaños de Calatrava (Ciudad Real), que proporcionará el hormigón de los postes de las columnas del trazado de la vía.

El contrato también va a generar puestos de trabajo en diferentes lugares de España y, aunque Benegas no pudo dar una cifra significativa, sí puso como ejemplo el caso de Talgo, que "prevé una ampliación de 300 trabajadores en su factoría de Miranda de Ebro".

En cuanto al futuro del consorcio en otros proyectos internacionales, su presidente dijo que no se puede generalizar, dado que "en cada caso hay que hacer un traje a la medida" y habrá empresas que puedan acudir a unas licitaciones y otras que no.

Por ejemplo, añadió, es muy interesante el metro de Qatar, una obra sobre la que están las empresas de infraestructuras españolas.

Más allá del Golfo Pérsico también hay licitaciones interesantes para Ineco y las demás empresas del consorcio, como la construcción de la nueva línea de alta velocidad en Gran Bretaña, donde la empresa pública de ingeniería está en uno de los consorcios precalificados para su diseño.

Otro país que está dispuesto a mejorar sus infraestructuras ferroviarias es Brasil y, a juicio de Benegas, un grupo similar al del Ave de Arabia se presentará a la licitación para construir el tren de alta velocidad entre Río y Sao Paulo.

También en Rusia hay un mercado "importante" y en el que Adif ya ha dado sus primeros pasos, por lo que será en el entorno de la entidad pública donde se "consolide el grupo que quiera ir allá", según Benegas.

El consorcio está integrado por Renfe, Adif, Talgo, Indra, Cobra (grupo ACS), OHL, Copasa, Dimetronic, Inabensa, Consulstrans e Ineco, así como por las empresas saudíes AlShoula y Al Rosan.

El contrato, que asciende a 6.737 millones y fue firmado el pasado 14 de enero en Riad, es el mayor adjudicado a un grupo español de empresas y el primero de este tipo que un país abre a la competencia internacional.

Conocido como el "tren de los peregrinos", cubrirá en menos de 2 horas y media los 450 kilómetros que separan las dos ciudades santas del Islam - visitadas cada año por 2,5 millones de fieles- a una velocidad máxima de hasta 320 kilómetros por hora.

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