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VALENCIA (L.M.). Adaptarse a los continuos avances tecnológicos no siempre es fácil para la empresas. La valenciana Proyecson, dedicada a productos relacionados con la industria del cine desde 1957, parece que lo hace, ya que el 3D no es ningún misterio para ellos. Su último movimiento ha sido la distribución en España, Francia e Inglaterra, de una gafas personalizadas para la versión tridimensional de la película Shrek, felices para siempre.

Creada en 1957 por la familia de Francisco Lafuente, gerente de la empresa, la compañía 100% valenciana, se dedica a la fabricación de proyectores cinematográficos, así como a otros productos relacionados directamente con el séptimo arte como la instalación de cine digital, sistemas audiovisuales, video proyección o vídeo conferencia en salas multiusos.

Según los datos de Informa, las últimas ventas de Proyecson alcanzaron en 2009 los 5,4 millones de euros. Según Lafuente, el año pasado aumentaron en un 15% su facturación y esperan que en 2010 el crecimiento sea el mismo. "El negocio no va mal", declaró el gerente de la empresa.

Con cuatro delegaciones en España en Valencia, Bilbao, Sevilla y Barcelona, además de 29 distribuidores internacionales repartidos por todo el mundo, Proyecson no descarta seguir ampliando su gama de productos para continuar con su crecimiento.

Aunque la distribución de este tipo de gafas parece no estar directamente relacionado con sus productos, Lafuente afirmó a Valenciaplaza.com que la evolución del cine, sobre todo el 3D, fue lo que les llevó a desarrollar este nuevo negocio. "Si las ventas van bien, nos plantearemos incluso el diseño de otros prototipos". Por el momento no existen datos sobre su venta en los diferentes países, ya que es la primera vez que se personalilza hasta este extremo un producto para el cine.

El sector cinematográfico, en crisis desde antes de que explotara la burbuja inmobiliaria por la caída de espectadores en las salas, les ha afectado, pero no en gran medida, ya que sus ventas no han parado de crecer. 

Según cuenta Lafuente, películas como Avatar, que revolucionó los cines las pasadas navidades, son las que hacen que el negocio se recupere.

A ellos les benefició porque instalan pantallas 3D y porque desde el pasado mes de abril venden unas toallitas húmedas, confeccionadas con papel de celulosa,  destinadas a limpiar las gafas tridimensionales que usan los espectadores en las salas. Éstas van envasadas individualmente y contienen agentes bactericidas.

Además de todos estos productos, Proyecson lideró este año un proyecto avalado por el Ministerio de Industria para la digitalización de salas denominado Portal Digital Cine PYME. A través de esta plataforma, se permite que los cines puedan exhibir no solo películas, sino también otros contenidos audiovisuales de carácter cultural, deportivo y publicitario, y acoger conferencias, demostraciones o cursos de formación para grupos.

El proyecto, según la empresa, también ahonda en mejoras medioambientales, ya que se reducirá de manera drástica el material a destruir o reciclar, al desaparecer la película como soporte de proyección y trabaja mediante retransmisión vía satélite, vía cable o en discos duros.