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VALENCIA. En casa de herrero, cuchara de palo. La dirección del sindicato UGT elegirá quiénes serán los despedidos en el Expediente de Regulación de Empleo (ERE) que afectará a una treintena de sus trabajadores. Mientras se ultiman los últimos flecos antes de presentarlo a los trabajadores, lo que sí ha quedado claro es que la dirección será quien decida a qué personas afectará "en caso de duda", señalan fuentes sindicales.

Aunque el acuerdo del ERE establece que una comisión constituida al 50% por "la empresa" (tal y como se denomina a la dirección del sindicato desde fuentes de la negociación) y de los representantes de los trabajadores, se impondrán las decisiones de "la empresa", si no se llega a un acuerdo.

La contrapartida que presenta el comité de empresa a cambio de esta concesión es la reducción del número de rescisiones de contrato, en favor de un ERE temporal de otra parte de la plantilla. Aunque inicialmente los despidos es de al menos una treintena, esta cifra se podrá ampliar hasta el medio centenar, entre afectado de forma temporal y definitiva.

RESUELTO ANTES DE FIN DE MES

El ERE debe quedar acordado, votado por la platilla y ejecutado antes de que termine el mes para no generar complicaciones administrativas dentro de la organización y poder entregar el finiquito al tiempo que se entrega la nómina completa del mes.

Actualmente, el sindicato UGT del País Valencià mantiene una plantilla de 300 trabajadores, repartido entre las tres provincias, pero ha retrasado dos meses la ejecución "hasta tener dinero para poder hacerlo", según fuentes de la negociación.

No es la primera vez que UGT aplica en una de sus federaciones territoriales un ERE. A finales del pasado año ejecutó distintos ajustes en Castilla La Mancha y Canarias que se vieron salpicados de acusaciones de "caja de brujas" en la elección de los afectados, como denunció Fernando Campos, exsecretario general de UGT en Castilla La Mancha.

UGT-PV, VICTIMA DE LA CRISIS Y DE LA GENERALITAT

Los motivos alegados para la aplicación de este recorte por parte de UGT son similares a los que atraviesan los otros sindicatos y patronales, que también están tomando medidas. Aunque el sindicato asegura que con la crisis se han incrementado las afiliaciones, los nuevos ingresos no han compensado el "trasvase" de trabajadores que pagaban la cuota general y ahora abonan la especial, destinada a desempleados, que sólo pagan un 50%.

Por otra parte, el sindicato carga también las culpas a la "importante disminución de ingresos", fundamentalmente procedentes de convenios con las administraciones públicas valencianas. En principio, la Generalitat distribuye los fondos (y la obligatoriedad de impartir cursos de formación) entre la patronal autonómica Cierval (50%), UGT (25%) y CC.OO. (25%), de acuerdo al Plan Valenciano por el Crecimiento y el Empleo (PAVACE).

Hasta ahora, tanto patronales como sindicatos adelantaban el pago de estos cursos y luego los cobraban. A partir de 2010, la Generalitat empezó a aplazar los pagos hasta acumular desde entonces unos impagos que alcanzan el 75% de los fondos comprometidos.

PLANIFICACIÓN DE AJUSTES A LARGO PLAZO

Distinto es el caso de CC.OO., por el momento. La organización asegura que lleva un año aplicando un Plan Estratégico de alcance estatal: han recortado las dietas por desplazamiento al mínimo y han repercutido la reducción de representantes en los comités de empresa, un descenso vinculado a la propia reducción de las plantillas.

A diferencia de UGT, CC.OO. hace pública sus cifras de afiliación y reconoce que se ha reducido el número de afiliados de 141.000 a 130.000 trabajadores entre 2008 y 2011. Además, apunta que este recorte de ingresos se ha sumado al descenso provocado por los trabajadores que se han acogido al pago del 50% de la cuota, al estar en situación de desempleo.

Afectada por los mismos problemas de impagos por parte de la Generalitat que su homóloga UGT, desde esta formación sindical se reconoce que se están estudiando despidos en secciones muy concretas, pero en ningún caso un ERE, que tendría que afectar a un 10% de su plantilla.