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VALENCIA. La reelección de Alberto Catalá a frente de la presidencia del comité ejecutivo de Feria Valencia "fue por aclamación". Ni rastro de las voces críticas que, en privado, consideraban necesario en las semanas previas propiciar el relevo del máximo dirigente de la institución ferial. El propio Catalá se había dejado querer, de hecho, para otros puestos fuera de la feria, pero sin éxito. Así que su continuidad en Feria Valencia se daba por descontada habida cuenta del apoyo firme y muy relevante de la alcaldesa de Valencia y presidenta del Patronato de Feria Valencia.

Con este consenso, Catalá afronta los próximos años de mandato en los que su principal reto va a ser sortear la crisis económica y los efectos que sobre el negocio ferial. El coste de la ampliación, criticada por excesiva y cara, son un auténtico lastre para las cuentas de una entidad que no consigue llenar los pabellones con la frecuencia y ocupación necesaria para aumentar su cifra de negocio y afrontar sus compromisos financieros.

Eso es lo que prometió Catalá, tras su reelección, que cambiará en los próximos cuatro años que tiene por delante ahora que ha renovado. El presidente de Feria Valencia anunció "un importante aumento de la actividad durante los próximos cuatro años y un fuerte control del gasto que llevarán a la consolidación del equilibrio financiero en las cuentas de la institución".

Catalá aporta en su haber de los últimos años haber puesto en marcha un fuerte recorte de gastos, con un ERE sobre buena parte de la plantilla, ante la caída de negocio y la obligación de adaptarse a los nuevos tiempos. Medidas que, en todo caso, no consiguen su propósito de forma completa ya que o bien por la caída de la actvidad o por la necesidad de bajar los precios de los pabellos para evitar la fuga de expositores han repercutido en los ingresos.

La forma de aumentar la facturación, según Catalá pasa por la apertura a terceros de los pabellones para la organización de eventos ajenos a Feria Valencia así como aumentar la oferta de certámenes. Es ahi donde Catalá ha depositado parte de las esperanzas de recuperación de visitantes e ingresos. Solo para 2012, Catalá anunció la puesta en marcha de doce nuevos certámenes (Hygienalia Pulire, Novabuild, Greenup, Talent, Dike, Agroinvest, Expomajor, 360º Valencia, Growmed, Ok Mami, Expomascota y World Gaming Show). Tres de ellas son coorganizadas y el resto propias.

Los departamentos de I+D y de nuevos negocio de Feria Valencia tienen en cartera una decena más de proyectos que verán la luz entre el 12 y el 13. El presidente del comité ejecutivo recordó que la cartera de productos de Feria Valencia tiene en torno a 40 certámenes históricos. Lo que unido a los cincuenta eventos que celebra anualmente da un total de 90. Catalá se comprometió a poner en marcha hasta 2015 una treintena de nuevas ferias que hagan crecer la cartera de productos hasta los 120 ferias y eventos anuales.

Catalá también explicó que en el primer trimestre del año se han de fallar los concursos de Costa Rica y Uruguay para la construcción de sendos recintos feriales. Concursos a los que Feria Valencia opta como consultora. En el terreno internacional, Catalá actualizó la información sobre los acuerdos que se están trabajando también en Marruecos y en Cabo Verde.

APROVECHAR HASTA EL TECHO

El presidente del comité ejecutivo aclaró que la feria va a insistir en su política de ajuste de costes y de refuerzo de su actividad. Y en el campo de la innovación y de los usos no habituales del recinto comunicó que el comité ejecutivo de la institución acordó ayer emitir una invitación a diversas empresas para convertir Feria Valencia en la principal planta fotovoltaica de Valencia capital a través de la instalación de placas solares en parte de las cubiertas del recinto.

Por último, Catalá apostó por la necesidad de hacer una modernización de los estatutos con vistas a mejorar el servicio que se presta a los expositores, los visitantes y la ciudad y siempre con la idea fundacional de la utilidad de la institución.

El presidente del comité ejecutivo explicó que la feria va a trabajar de manera coordinada con otras instalaciones para reforzar el papel de la ciudad de Valencia como cluster del negocio de ferias y eventos, y dio las gracias al comité ejecutivo de la institución "que durante estos cuatro años ha servido de hervidero de ideas para diseñar todos juntos el futuro de la empresa" y a la plantilla de Feria Valencia "que ha sabido plantar cara y poner más trabajo encima de la mesa en los complicados momentos que vivimos".