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VALENCIA. 20 de mayo de 2009. El entonces presidente de la Generalitat y líder del PPCV, Francisco Camps, acudió a declarar al TSJCV por un supuesto delito de cohecho en relación a unos trajes que habrían sido pagados por Orange Market, empresa considerada eje del caso Gürtel.

Ese día, el jefe del Consell entró en la sede judicial flanqueado por los tres vicepresidente del Gobierno valenciano, Vicente Rambla, Gerardo Camps y Juan Cotino, además de por la alcaldesa de Valencia, Rita Barberá. Unas muestras de apoyo inequívocas para el líder del partido y máxima autoridad autonómica.

Este lunes, dos años y medio después, Camps se enfrenta al juicio oral de la ‘causa de los trajes'. Sin embargo, no está previsto que ninguna autoridad del Gobierno o del PPCV acuda con él a la sede del Tribunal Superior de Justicia de la Comunitat Valenciana. Al menos, es lo que se deduce de las palabras pronunciadas por la portavoz del Consell, Lola Johnson, en la rueda de prensa de ayer, quien decidió improvisar un pequeño vodevil -comedia frívola, de argumento basado en la intriga y el equívoco- al respecto de la presencia de miembros del Ejecutivo para dar soporte visible a Camps en la cita.

Hasta en tres ocasiones se le preguntó a la consellera por si recibiría el apoyo "físico" de algún miembro del Ejecutivo en su trance judicial y en las tres oportunidades la portavoz se negó a contestar a la cuestión, limitándose a insistir de forma generalizada en el respaldo que tenía el expresidente por parte de "todos".

"Cuenta con el respaldo de todo el Consell, todo el partido, todos los alcaldes y muchísimos valencianos que, desde su dimisión, le han venido manifestando su apoyo", aseguró la portavoz. Reiterada la cuestión sobre si tenía constancia de que algún miembro del Ejecutivo fuera acudir, Johnson se limitó a repetir: "Centenares de cargos, alcaldes... son apoyos que se producen directamente y se seguirán produciendo". Otra forma de no contestar -algo demasiado habitual- a las preguntas formuladas por los representantes de los medios, que se vieron obligados a repetir una cuestión muy clara en tres ocasiones y se marcharon sin una respuesta concreta.

RITA BARBERÁ NO ACUDIRÁ

Otra de las dirigentes preguntada ayer por su apoyo a Francisco Camps fue la alcaldesa de Valencia, Rita Barberá, uno de los respaldos más firmes que ha tenido el exjefe del Consell en el proceso. La primera edil dejó entrever que no acompañará a Camps: "Él quiere que todos estén donde tienen que estar, es decir, cumpliendo con su obligación".

De esta manera, Barberá hacía referencia a la Junta Directiva Nacional del PP del lunes en la que la primera edil, junto al presidente del partido en la Comunitat, Alberto Fabra, y otros altos cargos de la formación, estarán presentes. "Es la más importante de un partido en los últimos 15 años y debemos estar donde debemos de estar", sentenció Barberá.

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